Juan Manuel Fernández | @jotafernan
Ayer hubo una manifestación en Roque Sáenz Peña en reclamo de ayuda para los inundados. En la Legislatura, sin embargo, no se aprobó la prórroga de la Emergencia Agropecuaria. El gobernador hace gestiones en Buenos Aires y, hasta el viernes, esperan que vuelva con respuestas.
Juan Manuel Fernández | @jotafernan
Productores agropecuarios chaqueños que padecen la inundación de sus establecimientos luego de las intensas lluvias de la semana pasada -que descargaron hasta 500 milímetros en algunas localidades- se manifestaron ayer sobre la ruta provincial 16 en Roque Sáenz Peña para llamar la atención del gobierno y la Legislatura ante la crítica situación que padecen. A pesar de ello, insólitamente en la Cámara de Diputados no hubo acuerdo para prorrogar la emergencia agropecuaria.
Joel Dombrovsky, referente de la delegación Corzuela de Federación Agraria Argentina relató a Radio EME: “salimos a la ruta para que los diputados vean que los productores estamos preocupados, pero no alcanzó; evidentemente no nos tienen en cuenta”.
Cuando regresaban a sus hogares se enteraron que la votación de la prórroga de la Emergencia (una era una iniciativa de la oposición) fue reñida al punto que desempató un legislador del oficialismo (PJ). Tampoco prosperó otro proyecto para avanzar en la toma de deuda por parte de la provincia para realizar obras hídricas en la región.
Ahora quedaron a la espera de la ayuda que el gobernador Domingo Peppo gestiona ante el gobierno nacional. “Le dijimos que hasta el viernes nosotros esperamos”, dijo el dirigente ruralista, según lo dictado por las bases. Luego, “si no hay respuesta, se volverá de nuevo a la ruta y por lo que hablamos lo haremos con todo; si tenemos que cortar la ruta por tiempo indeterminado lo haremos porque nuestros gobiernos no nos dan bolilla, trabajan para ellos y no para la gente”.
La protesta se disparó por la falta de respuestas en la crisis, especialmente ante la urgencia de productores que “se han quedado sin nada, han perdido hasta los animales de patio; no tienen gallinas, no le quedó un chivo, un chancho”. Y peor aún, tampoco podrán hacer un cultivo que invierno “porque están tapado en agua y no se sabe si van a llegar a una soja o un algodón”, que se implantan entre septiembre y noviembre en la región.
“La gente está muy decepcionada; hay algunos que por las cuentas que se generaron no creen que puedan llegar a levantarse del golpe y nuestro gobierno sigue haciendo oídos sordos a todo eso”, comentó el dirigente federado.
Dombrovsky indicó que unos 2.000 productores ya tienen su certificado de emergencia “pero (la cantidad) se agravó con las últimas lluvias”, por ejemplo en el sudoeste provincial a raíz del agua “que viene caminando desde arriba”.
Desde principios de año, las lluvias afectaron al sur provincial, donde se perdieron cultivos como el girasol. Al tener el campo inundado tampoco pudieron sembrar nuevamente (soja o maíz). Excepto en el centro, donde el agua bajó luego de la primera inundación, pero “ahora el clima nos jugó una mala pasada y arrasó con toda nuestra soja”.
La situación empujó a los productores a plantear el problema al gobernador Peppo quien se comprometió a asistirlos. “Y hasta el día de hoy no hubo respuesta”, lamentó. “Cuando hay ganancias -sentenció- le meten la mano en el bolsillo con más impuestos al productor, que con malestar y todo agacha la cabeza y sigue para adelante; pero hoy con pérdidas totales no hay gobierno que nos ampare”.