Gabriel Ben Tasgal nació en la ciudad de Buenos Aires; vive en Israel desde fines del siglo pasado. Publicista, licenciado en Ciencias Políticas y Relaciones Exteriores, educador, se especializa en política israelí y Medio Oriente. Además se dedica a asesor a fuerzas de seguridad de América Latina sobre el fundamentalismo islámico. Pasó por Santa Fe, invitado por la filial local de DAIA, donde dictó una serie de charlas, y conversó extensamente con El Litoral.
- Israel está en un desierto y llegó a ser un país desarrollado. ¿Cuál es el secreto?
- Tengo una visión corta y una visión larga. La primera, desde la época de los romanos en que los judíos se rebelan contra ellos pasan a ser un pueblo al que siempre le imponen un gobierno extranjero con valores no judíos. Eso desarrolló en el judaísmo el concepto de inconformismo que se traduce económicamente en que si podemos estar mejor, vamos a estarlo. En todas las comunidades judías el abuelo intenta que el nieto no tenga las privaciones que tuvo él. En la visión larga hay una serie de factores, entre ellos que en Israel estudiamos más de una carrera. La segunda es la función del Ejército que exige a sus soldados mucha independencia y en unidades selectas toman jóvenes para siete años, en los cuales los primeros tres los dedican a estudiar ocho títulos universitarios. Su misión es solucionar problemas y al retirarse con lo aprendido levantan emprendimientos. El tercer elemento es la decisión del gobierno allá por los 80 de dejar de vender naranjas. Ahora recogemos ideas. Una empresa el año pasado vendió al exterior por 15.500 millones de dólares con lo que eso significa en impuestos. Sumale que la madre judía taladra al niño por el estudio y que hay muchos inmigrantes y el inmigrante toma riesgos. El milagro económico fue en los 80 pero nos va a ir mejor porque el tiempo juega a nuestro favor.
Los israelíes nos caracterizamos por saber crear ideas. Tenemos tres cosas fundamentales: querer progresar y estudiar más de una carrera; buena cultura del fracaso al que consideramos el inicio de la otra experiencia, y un territorio que no tiene riquezas naturales y obliga a buscar alternativas.
Un gran diferencia con ustedes está en la justicia. En Israel hoy se juzga al primer ministro porque dicen que ayudó con reducciones impositivas a un empresario telefónico dueño de una página web de información. Afirman que lo ayudó para que el portal hable bien de él. Comparo esto con lo que pasa en la Argentina y parece un chiste. El sistema judicial funciona y no hay corrupción en obra pública.
- Cómo se ve desde Israel, América Latina y la Argentina
- Argentina es un país inestable. En Israel, un profesor de Economía explica que en América Latina, cuando las materias primas están caras en el mundo hay gobiernos populistas, y cuando están muy baratas, gobiernos conservadores. América latina ha pasado de una ola de populismo (Chávez, Correa, Morales, Lula, Cristina) a una ola conservadora. Es muy difícil para un país estable tener relaciones a largo plazo con países inestables. Estables son México, Colombia, Costa Rica, Chile mientras que las grandes potencias (Brasil, Argentina) son inestables. En Israel hay envidia por las riquezas naturales que tienen y una pena por los niveles de corrupción que desbordan la normalidad.
Argentina no ocupa un lugar preponderante en la agenda de Israel. Es visto como un país simpático, allá viven 120.000 argentinos. Vienen con mucha capacidad intelectual, son muy bien recibidos. En Israel aman a Messi, aman la carne.
Se sabe que intentar hacer negocios con Argentina es hacer malabares. Sumale los dos atentados terroristas en Buenos Aires -obra de Irán-, más el memorándum que el gobierno anterior intentó firmar con Irán. Alguien me dijo que los argentinos fueron unos pichones al firmar ese pacto. Los persas vienen desarrollando desde hace años una ideología muy importante dentro de Islam que es ocultar la verdad, mentir. Engañaron a tres potencias mundiales hasta que el Mossad le robó 100.000 documentos que demostraron que estaban mintiendo, son grandes vendedores de humo y de alfombras. Los argentinos son bebés de pecho que pensaban que firmando un acuerdo iban a lograr que Irán recapacite. Cualquier conocedor de Medio Oriente sabe que no van a poder dominar a los iraníes. Cristina ha dicho que el memorándum fue una inocentada, y es así.
- Usted dice que los dos atentados fueron de Irán, pero para la justicia argentina todavía no está determinada
- Cuando analizas un atentado no debes preguntar quien lo hizo. Las dos preguntas centrales son: quién tiene capacidad de hacerlo y quién puede hacerlo. En los años 90 atentado de hombres disparando era fuerzas cercanas a la OLP; hombre bomba es el modus operandi clásico de Hamas y coche bomba era método clásico de Hezbolá de Irán. El 98% de los atentados con coche bomba de los 90 eran de chiitas. En Sudamérica hay una comunidad muy activa chiita, no hay que ser muy sabio para darse cuenta que fueron ellos que se vanagloriaron de hacerlos. La justicia no lo determinó, la pregunta no es quien fue sino porqué la justicia argentina no logra hacer lo que en Francia tardan 48 horas.
- Medio Oriente parece un equilibrio inestable permanente
- El problema central en América Latina cuando se habla del conflicto de Medio Oriente es cómo se lo interpreta. ¿Qué gafas usas? Lo más normal es ponerte gafas marxistas por más que no lo seas. La palabra más usada es que el conflicto es por tierras y la palabra más usada es co ocupación. El conflicto territorial está prácticamente solucionado. Para los palestinos y para el Islam actual el conflicto es religioso. Si no te especializas en religiones y en clanes no tenés un análisis serio de Medio Oriente. Te doy ejemplos. Hoy los países estables en Medio Oriente son Qatar gobernado por un clan, sin competencia; Kuwait, igual. Si tenés varios clanes y muchas religiones es anarquía e Irán tiene por lo menos 14 religiones oficiales y como 200 clanes. Lo mismo en Siria, en Palestina. Si pensas en términos religiosos se empiezan a ordenar las ideas.
Se puede llegar a un acuerdo territorial sí, pero todo el tiempo en que el radicalismo islamismo sea parte de la ideología palestina, el Islam va a considerar que el judaísmo no es un pueblo, es una religión. Si no sos pueblo no tenés derecho a estado propio. El Vaticano no pide un estado propio supuestamente. Gran parte de Medio Oriente piensa así y entonces como vas a aceptar la existencia de un estado judío en el medio del estado islámico. Más influencia de temas religiosos, más difícil llegar un acuerdo. Para especializarse en Medio Oriente se debe estudiar religión.
La penetración en América Latina
Ben Tasgal hoy se dedica a asesorar a fuerzas de seguridad sobre prevención del radicalismo islámico.
- En Sudamérica hoy hay una influencia muy fuerte de chiitas que han penetrado a través de dos países: Venezuela y Bolivia. Muchos de ellos reciben ciudadanía de esos país. Un reciente informe revelado por un ex agente jefe del Servicio de Inteligencia de Venezuela afirma que el ex vicepresidente y actual ministro de Industria, Tareck El Aissami, druso, sirio, agente Hezbolá en todo el continente y junto a su padre ha entregado pasaportes venezolanos a gente de Hezbolá y los han utilizado para el tráfico de drogas que es lo que suelen hacer. Las fuerzas de seguridad de Sudamérica están muy nerviosas porque chiitas deambulan con pasaportes venezolanos pero no hablan español. Así se entienden los atentados. Venezuela es un problema serio desde el punto de vista del terrorismo del continente.
Tienen varias técnicas de penetración: la acción social; vienen con petrodólares y levantan mezquitas para captar gente. Lo hacen en Perú, en México, Venezuela, en Argentina ocurre en Tucumán. Han incorporado a políticos pagándoles, en Argentina le pagan a Luis D Elía; en España a Pablo Iglesias. Tienen también canales de televisión. Les pagan a docentes para levantar cátedras prochiitas, y por último están metidos en todos los grupos indígenas que quieren regresar al dominio de sus tierras antiguas como por ejemplo la araucanía en Chile o en Perú el etnocacerismo. Los chiitas tienen mucha fuerza acá y te generan problemas internos.
El segundo grupo que está fomentando presencia es Turquía que se ha radicalizado desde el punto de vista religioso y también Qatar que es una gran potencia radical que tiene al mayor líder sunnita radical que dicta sentencias religiosas donde incita a conquistar árabes y judíos y cómo matar a alguien. Este hombre recibe dinero de la fundación Qatar y tiene un programa de televisión en Al Jazeera de preguntas y respuestas. Hay películas masivas que corren por Facebook. Qatar es un problema serio y los otros sunnitas lo tienen entre ojo y ojo porque han echado gobiernos. Al Jazeera habla de todos gobiernos que no son como ellos y en su canal está prohibido hablar de Qatar. Qatar viene a Sudamérica y pone publicidad en camisetas de fútbol. ¿A cuántos sobornó Qatar para poder realizar el próximo mundial? El Mundial será darle legitimidad a un país con una historia radical peligrosa. Qatar en los últimos 15 años ha adoptado la línea de los Hermanos Musulmanes. Se sienten seguros porque tienen una base militar norteamericana para controlar a Irán.
Hay que diferenciar a los musulmanes no radicales - que son la mayoría- de aquel que es radical o fomenta el radicalismo.
Ben Tasgal revela que “Irán ha invertido mucho, mucho en Venezuela. El problema que tenés en Venezuela es parecido al de Noriega en Panamá, una mafia metida, si fuesen dictadores solamente la solución sería más sencilla, pero el mafioso tiene mucho más que perder, no puede ir a Estados Unidos, a Europa porque lo van a extraditar, el mafioso tiene miedo”.
Para Ben Tasgal, el conflicto más grande de Medio Oriente es “entre musulmanes radicales y los que no lo son. Han muerto 20 millones de musulmanes por conflictos internos dese 1920. El segundo conflicto es entre chiitas y sunnitas, Irán y Hezbolá contra sunnitas. El tercer conflicto es entre musulmanes y no musulmanes, los principales muertos no musulmanes en Medio Oriente son cristianos y también israelíes pero Israel se defiende con ejército. El cuarto conflicto es entre palestinos e israelíes que antes parecía el principal y no lo era. Como será de menos importante que Donald Trump hace casi cuatro años que está en el gobierno y no está interesado en solucionarlo y los países árabes tampoco porque todo Medio Oriente explota por la primavera árabe y hay países que ya no existen como tales (Siria, Libia). Además el precio del petróleo está en caída y el fracking los va a destruir. No volverá el precio del petróleo a la época de los 70 donde los árabes dominaban el mundo. Deben diversificarse y ellos no están interesados en el problema palestino, están interesados en sobrevivir. ¿En que contexto decidieron que las mujeres puedan manejar vehículos‘?. Lo hicieron porque tenían la mitad del pueblo que no podía trabajar porque no podía conducir. El tema de autorizar a la mujer no es tema religioso, es económico, entendieron que si no empiezan a producir las mujeres el país no se diversifica. El tema palestino ha quedado encajonado, el problema es religioso.