Fabiana García | Enviada especial a Lima
Fabiana García | Enviada especial a Lima
Este viernes se cumplió una semana desde que el fuego olímpico se encendió en Lima 2019 en el Estadio Nacional, y por primera vez salió el sol. Los Juegos están en su esplendor con la definición de los deportes de conjunto y esperando a las figuras del atletismo y la natación.
Valió la pena la hora de viaje hasta la Base Aérea Las Palmas, aunque el Uber (que no es lo mismo que un taxi) se haya perdido en el distrito de Surco, haciendo conocer un sector genuino de esta capital, donde perduran en las paredes las pinturas del Papa Francisco que visitó Lima. En resumen, el viaje por el conductor perdido en su propia ciudad salió 22 soles (unos 500 pesos).
Pero son hechos que forman parte del diario de viaje y que se ven gratificados por el clima que se vive en estas competencias donde se reúnen 39 deportes y más de 60 disciplinas.
El sol que hacía falta
Los polígonos de Las Palmas fueron estrenados para estos Juegos Panamericanos y están impecables, no son desarmables, son de material, y la estructura quedará para Lima en este gigante complejo militar.
A la salida del recinto de tiro hubo una sorpresa, en el día 10 de los Juegos Panamericanos salió el sol y brilló fuerte, rápidamente la tempertaura subió a 20 grados.
Hacía falta, sin sol los Juegos estaban opacos, muchos llegaron buscando la fiesta y el color de Río, y hubo decepción día tras día de neblina y frío.
El surf, el deporte que hace su presentación, se lució más al mejorar las condiciones. Los deportistas se quejaban por el frío en los deportes acuáticos.
Ojalá perdure, para acompañar las aguas abiertas y el atletismo. Mientras, a la vez esté la espectacular pileta de la La Videna a pleno. Los Juegos en su esplendor..., al fin!!!