No es sencillo nada a esta altura en Colón. La inestabilidad de este momento deportivo y un viaje complicado a Venzuela, con muy poco tiempo de organización para los dirigentes, más las características propias de pasar de un clima invernal a otro veraniego, hacen que las cuestiones extradeportivas también ocupen un sitial preponderante de cara a este encuentro histórico para Colón.
El plantel viajó por vía terrestre a Buenos Aires y afronta, en dos vuelos diferentes y con algunas horas de diferencia entre uno y otro, el viaje a Maracaibo con escala y espera en Panamá, que demandará alrededor de 24 horas de viaje.
Alguna vez se criticó la organización de los viajes en Colón, pero esta vez hay poco que reprocharle a los dirigentes. La Conmebol, con las fechas dispuestas, perjudicó a Colón y a Independiente, pero en el caso de Independiente tiene la salvedad de que jugará como local. En cambio, Colón irá al país más complicado desde todo punto de vista —sobre todo en cuanto a la logística— y de esto recién hubo confirmación en la mañana del viernes.
Si bien la dirigencia manejaba, desde el mismo martes a la noche en que Zulia consiguió la clasificación para los cuartos de final en Lima, que el partido se podía jugar en el transcurso de esta semana. Pero la fecha se oficializó el viernes y ya este lunes había que poner en marcha al plantel para llegar con suficiente tiempo de antelación a Maracaibo, una de las ciudades de Venezuela más afectadas por la terrible crisis que atraviesa dicho país.
La llegada a la ciudad de disputa del encuentro será este martes a la siesta, con lo cual habrá 48 horas de recuperación. Las prácticas más fuertes se hicieron en Santa Fe, en realidad la de este lunes por la mañana. La de mañana será regenerativa y el miércoles también habrá pelota quieta y lo que habitualmente se hace en los días previos a los partidos.
De hecho que luego de la derrota del otro día ante Huracán, de la mala imagen que dejó el equipo en gran parte del cotejo en el Tomás Ducó y de algunas circunstancias que el técnico evalúa y que tienen que ver con lo táctico y estratégico para estos primeros 90 minutos de un choque eliminatorio como el que arrancará el jueves, se avizoran cambios en la formación.
El 4-3-2-1 con el que se viene jugando últimamente podría tener alteraciones. El flojo rendimiento de algunos jugadores llevaría a Lavallén a realizar cambios de nombres y quizás de esquema. Aquellas apreciaciones al principio de este artículo, cuando se habla de las condiciones climáticas que tendrá que afrontar Colón, serán tenidas en cuenta por el técnico para realizar el partido más inteligente posible. Porque cuando se jugó el encuentro de ida entre Zulia y Sporting Cristal, la temperatura llegó a los 39 grados a la misma hora en la que se jugará el encuentro.
A propósito, vale resaltar que el horario de las 16 (las 17 de nuestro país) se debe a que la ciudad atraviesa por una profunda crisis energética y no se asegura el suministro de electricidad.
Por lo pronto y ante el desafortunado momento personal que vive Burián por el terrible accidente de su hermano, quedó Hass en el lista de viajeros a Venezuela que está integrado por los 17 (sacando a Burián) que firmaron planilla en cancha de Huracán, más Hass, Schmidt y Celis, que no habían viajado a Buenos Aires y se suman ahora a los que irán a Maracaibo.
El plantel profesional retornará a Santa Fe iniciando su viaje el viernes, también vía Panamá aunque esta vez con llegada a la ciudad de Rosario y no a Buenos Aires, lugar de la partida.
El partido siguiente que tendrá que afrontar será, precisamente, la revancha ante Zulia, programada para el jueves 15 en el Brigadier López, a las 21.30, ya que este fin de semana no habrá fecha de Superliga por las Paso nacionales.
El uruguayo Andrés Cunha será el árbitro del encuentro que tendrá lugar el jueves a las 16 (las 17 de nuestro país), en el Pachencho Romero de Maracaibo.