Hoy, a las nueve y media de la noche de este jueves 15 de agosto, hay que olvidarse de todo. De lo bueno, de lo malo y de lo feo, igual que en la película. Como si fuera un play-off de NBA, “no hay mañana” para Colón y el Zulia de Venezuela. No hay dudas que será un “doce contra doce”, con ese viejo código del potrero que “nadie puede quedar afuera, hoy pateamos todos”. El dueño de casa, en su histórico partido 40 del historial internacional Conmebol, tendrá un jugador más por la multitud que toma la Copa como las vacaciones a la dura rutina de la Superliga, donde este equipo hace un año que no gana de visitante y medio año que no gana en Santa Fe. Increíble pero real: ese mismo equipo puede quedar entre los cuatro mejores de la Sudamericana.
Los dos dos saldrán con el pecho inflado y la mirada en alta. El dueño de casa porque, a pesar de las penurias del promedio, quedó como el único representante del fútbol argentino en la competición. La visita porque este novato Zulia franquiciada ya hizo historia en Venezuela: nunca un equipo caribeño llegó tan lejos en un torneo sudamericano de clubes.
El jugador extra que tendrá Colón será, como a lo largo de su historia, el empuje de su gente. “#Todos juntos los damos vuelta” fue el disparador de los “Sabaleros” en las redes sociales. Por fin lo entendieron los dirigentes, que decidieron aplicar la “argentinidad al palo” con el costo de los tickets: no sólo que bajaron los valores sino que aplicaron un hot sale para que el socio active un “2x1” que generó largas filas desde ayer en la sede sabalera. La cancha, como en las viejas galas, estará al palo en tres de los cuatro lados porque la cabecera sur, donde está el obrador con los detalles finales para el cerrado del anillo alto.
Ese será, sin dudas, la mejor figura de Colón para ganar. El hincha, una vez más, el “Jugador Número 12”. Del otro lado el Zulia, apeñas respaldado por un puñado de dirigentes y allegados ubicados en un palco sur, también tendrá “ayudín”: el reloj volará a su favor y será de arena para los once rojinegros.
“El público juega a favor del local y en contra del local; a nosotros no nos afecta para nada”, dijo Francesco Stifano, el entrenador del Zulia que sabe de las necesidades y obligaciones de Colón.
Los dos saben como resolver positivamente este tipo de circunstancias marginales en la Copa Sudamericana. Colón se lo dio vuelta en casa a los uruguayos y ganó la serie que había arrancado 0-1 con Argentinos. Zulia sabe ganar por penales (así eliminó al boliviano Nacional de Potosí) y se siente cómodo de visitante ganando 1-0 la ida, ya que eliminó a Palestino en Chile y al Sporting Cristal de Perú en Lima.
Está claro que esta noche saldrán a dar vueltas por el Cementerio varias frases armadas para la ocasión : “No hay que buscar el segundo gol antes que el primero”; “No es necesario hacer el gol en el primer minuto, el partido tiene 90”; “No hay que desesperarse”.
Zulia jugará con los mismos once titulares que se conocen de memoria y se recitan en Marcaibo. Colón, con las complicaciones del llamado “Riesgo DT”, también implementó un paquete de medidas:
— 1) Leo Burián por “Nacho” Chicco bajo los caños
— 2) El “Chelo” Estigarribia de “3” en lugar de Gastón Díaz
— 3) Nicolás Leguizamón en reemplazo de Matías Fritzler
Es posible que Colón mecanice algunos movimientos: que Lértora vaya de “tapón-tapón” al lado de los centrales (Olivera-Acevedo) para resguardar la defensa en el megacanje de las mandadas de los marcadores de punta, más que nada Alex Vigo por derecha. O sea: Lértora atrás, Bernardi al medio para limpiar el carril y el “4” viajando siempre por la banda.
Al menos esta vez Colón saldrá con dos puntas y eso ya supone, a priori, una señal de cómo entender el partido para el dueño de casa. Hay una idea clara de “trabajar” el 0-1, aunque muchos hubiéramos esperado una apuesta más punzante. Ejemplo: “Pulga” y dos delanteros (Morelo-Legui ó Sandoval-Legui); o bien Chancalay desde el vamos en la posición que sea (carril izquierdo o punta abierto).
Llegó la noche del gran día. No hay mañana para Colón y Zulia en el Cementerio. No es un grande el petrolero venezolano pero hay deseo de sepultura copera. Serán, desde las 21.30, doce contra doce. El jugador 12 de Colón, la gente. El jugador 12 de Zulia, el reloj. La gran incógnita de estos tiempos nuevos pasa por saber para quién jugará el VAR en el imponente anillo del Salado.