Faltan muy pocos días para que la Orquesta Sinfónica de Santa Fe sea protagonista de un concierto que ocupará un espacio importante en su historia: el que tendrá lugar este domingo 25 de agosto a partir de las 11 de la mañana en el Teatro Colón de la ciudad de Buenos Aires.
En la ocasión, los músicos ejecutarán un repertorio conformado por obras que datan de fines del siglo XVIII y principios del XIX: la Obertura Coriolano, Op. 62 y la Sinfonía Nº 2 en Re mayor, Op. 36. de Ludwig van Beethoven y la Sinfonía concertante en Si bemol mayor y el Concierto para trompeta y Orquesta en Mi bemol mayor de Josep Haydn. La presentación será bajo la dirección del maestro Walter Hilgers, titular de la orquesta. Y participarán en calidad de solistas invitados Peter Dörpinghaus (trompeta), Fernando Gentile (violoncello), Hernán Garreffa (oboe), Fabián Contreras (fagot) y Gonzalo Beltrán (violín). Cabe señalar que el viernes a la noche estos mismos músicos estarán en Santa Fe y actuarán en el Centro Cultural Provincial (ver aparte). En las horas previas, el propio Hilgers respondió una serie de consultas de El Litoral relacionadas con los preparativos para el domingo.
—¿Qué aspectos relacionados con la sonoridad se deben tener en cuenta al actuar en un espacio cómo el Teatro Colón, que posee una acústica tan particular? ¿Es la primera vez que conducirá a un ensamble musical allí o ya lo hizo otras veces?
—El Teatro Colón de hoy, inaugurado el 25 de mayo de 1908 con la ópera “Aída” de Giuseppe Verdi, es uno de los teatros de ópera más famosos y populares del mundo, donde las orquestas, solistas y directores más famosos fueron invitados y los serán en el futuro. Wilhelm Furtwängler describió al Teatro Colón como el mejor y más bello teatro de ópera del mundo y es un gran honor para la Orquesta Sinfónica Provincial de Santa Fe y para mí actuar allí. Por supuesto, los teatros de ópera están diseñados principalmente para representaciones de ópera en términos de acústica, y eso se aplica al Teatro Colón. Hace muchos años estuve allí con el Ensamble “German Brass” en el gran escenario, como director todavía no tuve el honor de dirigir allí. El día del concierto, haremos un ensayo con la orquesta antes del concierto para familiarizarnos con la acústica. En ese ensayo descubriremos qué dinámicas son apropiadas desde el pasaje más tranquilo hasta el punto más fuerte y es posible que tengamos que ajustar las articulaciones de ciertos pasajes a las condiciones del Teatro.
—¿Cuáles creen que serán los desafíos más importantes para la Orquesta de cara a este concierto? ¿Cuánto tiempo de trabajo de preparación lleva?
—Actuar en el Teatro Colón es en sí mismo un gran desafío y una motivación para todos los involucrados y estamos ansiosos por este concierto. Cuatro ensayos en Santa Fe, más el ensayo general en el Teatro están programados para este concierto. Previo al Colón, presentaremos la Obertura Coriolano, op. 62 de Beethoven, la Sinfonía concertante en Si bemol mayor de Haydn y la Sinfonía Nº 2 en Re mayor, op. 36, también de Beethoven el 23 de agosto en el Centro Cultural Provincial en Santa Fe; y el Concierto para trompeta y Orquesta en Mi bemol mayor de Haydn se realizó en nuestro décimo concierto, el pasado 16 de agosto.
—¿Qué características tienen las obras de Beethoven y Haydn que la Orquesta interpretará el 25 de agosto?
—A partir de 1770, especialmente en Viena, se desarrolló un estilo musical muy específico, al que ahora nos referimos como Clasicismo Vienés. Tres grandes nombres lo representan: Joseph Haydn, Wolfgang Amadeus Mozart y Ludwig van Beethoven. Éste último, el más joven de los tres compositores, ya entra en la transición al romanticismo. El período principal del clasicismo vienés fue entre 1780 y 1830 y las obras que se realizarán el 25 de agosto se escribieron exactamente en ese momento, específicamente entre 1792 y 1807.
—Desde su rol como director ¿Cuánto tiempo estudia y prepara obras como éstas? ¿Se toma en cuenta, además de las cuestiones estrictamente musicales, el contexto en que los compositores las escribieron?
—El tiempo de preparación depende de la complejidad de la “partitura” y la fase de preparación puede variar de unos pocos días a varias semanas. Antes de comenzar con el estudio de la partitura, por supuesto, primero me ocupo de los antecedentes de la creación del trabajo a ejecutar.
—Este año la Orquesta tuvo varios invitados de jerarquía nacional e internacional ¿Qué proyectos tiene para los próximos meses?
—Sí, es cierto que este año ya hemos recibido a varios artistas nacionales e internacionales de renombre y habrá más personalidades musicales interesantes llegando a Santa Fe para el final de la temporada. Después del concierto en el Teatro Colón, concluiré las óperas de Wagner “Das Rheingold” y “La despedida de Wotan y la magia del fuego” de la ópera “Die Walküre” el 20 de septiembre con el solista Alfonso Mujica (bajo/barítono) y en la segunda parte de ese mismo concierto, interpretaremos una sinfonía, raramente tocada, de 1869 de Anton Bruckner, erróneamente llamada su “Sinfonía Cero”. Originalmente, Bruckner, quería lanzar esta obra como su segunda sinfonía, pero luego decidió que no debía publicarse. Afortunadamente, por decirlo de algún modo, se publicó después de su muerte. Es una obra interesante que aún no lleva la firma de las famosas grandes sinfonías de Bruckner. En el concierto final de la temporada citaremos a Tchaikovsky, interpretando “Entracte & Waltz” de la ópera “Eugene Onegin” y “Swan Lake Suite” en la primera parte del concierto, y en la segunda, dos obras de de Modest Mussorgsky: “Night On Bald Mountain” y “Garden Scene” de la ópera “Boris Godunov” y por último, “Danzas de Polovtsian” del “Príncipe Igor” de Alexander Borodin.
El próximo viernes, 23 de agosto, a las 21, la Orquesta Sinfónica Provincial de Santa Fe se presentará en el escenario del Centro Cultural Provincial (Junín 2457) para ofrecer su undécimo concierto de temporada en lo que va de 2019. La entrada, como siempre, será gratuita y libre.