El Seleccionado Argentino de Básquetbol comenzará este sábado ante Corea del Sur, a transitar su camino en el Mundial China 2019, que se extenderá hasta el 15 de septiembre, con el objetivo de pasar de ronda y ratificar la obtención de la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Lima.
El equipo nacional, conducido por el bahiense Sergio Santos Hernández, ya no ostenta el mote de candidato que supo tener desde el 2004, cuando se consiguió el oro en los Juegos Olímpicos de Atenas y hasta la edición olímpica de Londres 2012.
Sin embargo, la nueva generación, que en su mayoría estuvo en el plantel de Río de Janeiro 2016, alberga la esperanza de terminar entre los ocho mejores.
Liderado por el campeón olímpico y ex NBA Luis Scola en la pintura y en la base por la dupla de Real Madrid, Facundo Campazzo -llegará limitado por un esguince en el tobillo derecho-, y Nicolás Laprovíttola, protagonizará un duro grupo B con Rusia, Nigeria y Corea del Sur.
De allí saldrán dos de los clasificados para los octavos de final, de los que participarán la mitad de los 32 equipos que inician el torneo.
Es fundamental la vigencia de Scola (39 años), al que se lo vio en buena manera durante los amistosos previos. En especial, en la aplastante victoria ante Rusia (85 a 64), en la que aportó 13 puntos; como así también en la caída del martes ante España (84 a 76), con su buen trabajo defensivo frente a rivales de primera línea y con sus 24 tantos.
“En líneas generales estamos bien. Esta es una selección joven, que tiene ritmo, juega básquetbol moderno y tiene jugadores que están tratando de ganarse su lugar, hacerse un nombre y lo están haciendo muy bien”, expresó Scola.
Además del capitán, la ilusión nacional pasa por Campazzo, a pesar de su lesión por la que arribará con lo “justo” desde lo físico, ya que aporta la verticalidad necesaria para el básquetbol moderno.
El crecimiento de Laprovíttola, quien dejó atrás las dudas luego de una gran temporada con la camiseta de Joventut de Badalona -finalizó como MVP de la Fase Regular de España-, y la confirmación en su rol dentro del campo, refleja que el punto fuerte de Argentina estará en la base, desde donde se genera el básquetbol.
El aspecto más flaco del representativo nacional pasa por los rebotes en su propio tablero y su falta de altura en comparación a rivales de la talla de Rusia, Lituania, España y Estados Unidos, entre otros.
Este inconveniente se ha visto en las últimas presentaciones y será, junto con las pérdidas, algo a resolver si pretende meterse entre los ocho.
Finalmente, el ataque se mostró fluido, con buenos movimientos de balón y sin egoísmo para generar espacios a la hora de ejecutar las ofensivas planeadas.
A pesar de ello, los porcentajes de los tiros externos fueron en general bajos, dado que los especialistas (Patricio Garino, Nicolás Brussino y Gabriel Deck) estuvieron sin fineza.
Argentina integrará el Grupo B junto con Rusia, Nigeria y Corea -rival del debut el sábado 31, a las 9.30 (hora argentina).
El plantel que conduce Sergio Santos Hernández, está integrado de la manera que se detalla a continuación.
Bases: Facundo Campazzo (Real Madrid), Nicolás Laprovittola (Real Madrid) y Luca Vildoza (Baskonia de España).
Escoltas: Nicolás Brussino (Zaragoza de España) y Lucio Redivo (libre).
Aleros: Máximo Fjellerup (San Lorenzo), Patricio Garino (Baskonia de España) y Gabriel Deck (Real Madrid).
Internos: Luis Scola (libre), Agustín Cáffaro (San Lorenzo), Marcos Delía (Fuerza Regia de México) y Tayavek Gallizzi (Regatas Corrientes).