Carlos es comerciante y vive en barrio Sargento Cabral desde hace 60 años, su edad. “Nací acá. Siempre fue un barrio tranquilo, pero ahora es tierra de nadie. Reforcé las cerraduras, tengo todo enrejado... pero igual me robaron otra vez. No se puede seguir así, no obstante a pesar de todo tenemos que seguir”, se lamentó este martes.
Su vivienda, ubicada en la cuadra de calle Lavaisse al 1800 fue blanco de delincuentes durante la madrugada del pasado domingo, cuando él y su familia no se encontraban en la ciudad.
“Me tuve que volver. Barretearon la puerta, las dos cerraduras. Destrozaron el marco. Adentro, era todo un verdadero desastre. Estaba todo dado vuelta. No sólo es el robo en sí, sino la impotencia que te genera que se te metan en la casa. Sólo se llevaron algunas cosas de valor. Creo que no pudieron sacar más porque un vecino los vio y se tuvieron que ir rápido, por las dudas”, contó la víctima.
“La policía acá no existe. No pasa un patrullero. En esta zona los robos son permanentes. Entran a las casas, asaltan a motociclistas, de todo. Pareciera que uno se tuviera que armar para defenderse, porque nadie te protege. El que labura tiene que vivir entre rejas e igualmente está inseguro. No es la primera vez que me roban así. Hace unos años ya pasó algo muy similar. Hice la denuncia, pero todo quedó en la nada... no tengo ni ganas de radicar la denuncia en esta oportunidad”, disparó Carlos.