Dura sanción para un jugador de Australia en el Mundial de Rugby
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El jugador del Seleccionado de Australia, Reece Hodge, fue suspendido por tres semanas en el Mundial de Rugby que se desarrolla en Japón por un tackle peligroso sobre el fijiano Peceli Yato. Fue durante el partido que ambos equipos disputaron el pasado sábado, y que terminó con triunfo para los Wallabies por 39 a 21.
La acción que involucró al wing de 25 años se produjo en el minuto 25 del partido desarrollado en Sapporo, y fue citado a declarar ante el tribunal de disciplina, en cuyo comité está el argentino José Luis Rolandi, ex árbitro y dirigente de la Unión Argentina de Rugby. También lo integran el neocelandés Nigel Hampton, y el ex entrenador internacional escocés Frank Hadden.
Los miembros del comité se encargaron de ver el incidente desde todos ángulos posibles ofrecidos por las cámaras de TV, hecho por el cual Yato debió ser evaluado para descartar posibles lesiones en la cabeza.
Se consideraron todas las evidencias, incluidas las ofrecidas por la representación legal del jugador, tras lo cual el comité entendió que se trató de una acción de juego ilegal y que correspondía una tarjeta roja por un tackle alto.
Los puntos sobresalientes de la resolución indican que se trató de un tackle alto, lo que se considera una falta, ya que hubo contacto con la cabeza y esto conlleva un serio riesgo para el oponente. No obstante, se interpretó que si bien fue una acción riesgosa, no fue deliberada por quien la cometió.
Inicialmente, de acuerdo al reglamento, a Hodge le correspondían seis semanas de suspensión, pero el castigo se redujo a tres semanas, para lo cual se tuvo en cuenta la excelente foja disciplinaria de Hodge en su carrera como jugador, su buen comportamiento y su actitud durante la audiencia.
De esta manera, el jugador de los Melbourne Rebels no podrá jugar para Australia hasta el 11 de octubre venidero, por lo que se perderá los tres partidos restantes del grupo (ante Uruguay, Gales y Georgia). Recién podrá volver en los cuartos de final, instancia a la que seguramente arribarán los Wallabies.