Ya no hay más tiempo para nada. A Los Pumas no les queda otra que ganar. El escollo que tiene por delante, es de los más complicados: Inglaterra, uno de los firmes candidatos a destronar a Nueva Zelanda como los mejores del mundo.
El seleccionado argentino de rugby debe ganarle a su par inglés para, de esa manera, mantener sus posibilidades intactas de meterse entre los ocho mejores del torneo.
Ya no hay más tiempo para nada. A Los Pumas no les queda otra que ganar. El escollo que tiene por delante, es de los más complicados: Inglaterra, uno de los firmes candidatos a destronar a Nueva Zelanda como los mejores del mundo.
El partido se juega este sábado desde las 5 de la mañana de nuestro país (las 17 en Japón) y será arbitrado por el mejor réferi de la actualidad, el galés Nigel Owens.
Sin dudas, y tal como lo vienen reflejando jugadores y cuerpo técnico en cada una de las atenciones a la prensa, es “el partido más importante de los últimos cuatro años”.
Por delante, está el difícil seleccionado de Inglaterra, dirigido por el australiano Eddie Jones, el primer entrenador que tiene el “equipo de la Rosa”, que es extranjero. Jones, estratega y un gran estudioso del juego, sabe por donde pasará el partido desde lo técnico, es muy estructurado pero efectivo, y además sabe cuando “chicanear” a sus rivales.
Este viernes, se realizaron los últimos movimientos en conjunto en el "Prince Chichibu Memorial Ground" (habitual escenario donde son locales los Sunwolves en el Súper Rugby), y luego los pateadores (Benajmín Urdapilleta y Emiliano Boffelli), fueron hasta el Tokyo Stadium para probar a los palos, esto último a modo de Captain Run.
De punto
El seleccionado argentino de rugby, “tiene todas las de ganar” o el que lo quiera leer de otra manera, “no tienen nada por perder”. Esto, hablando pura y exclusivamente de sus chances de meterse en los cuartos de final.
Después sí, en caso de perder ante los ingleses, y cumplido el trámite con Estados Unidos, será el tiempo de armar las valijas, volver a casa y hacer todos (jugadores, staff y dirigentes), los balances correspondientes a cada uno.
Ojalá esto último no pase, y mañana estemos armando una crónica de la “histórica victoria de Los Pumas en Tokio”.
Para eso, Argentina deberá tener un partido casi perfecto o, mínimamente, extender en minutos lo bueno que se hizo en el segundo tiempo con Francia y en la primera etapa ante Tonga. Además de ser efectivos y mejorar, y mucho en defensa. Si Argentina logra eso, sumado a la “mística” habitual y que la adversidad los puede hacer un poco más fuertes, puede llegar a complicar a los ingleses.
La suerte está echada
Ahora, para quienes están en Argentina, a poner los despertadores para acompañar a Los Pumas. Ellos se encargarán de dejar todo en la cancha para llegar lo más lejos posible.