Santa Fe ejecuta lo que Nación financia

El parate de obras de ocho jardines santafesinos a mediados del año pasado derivó en una serie de cambios en las condiciones de su construcción; pero, además, provocó un largo intercambio de aclaraciones por parte de las carteras educativas de Nación y Provincia. Mientras los coletazos de la crisis económica demoran el deseo de padres y madres, y las localidades beneficiarias aguardan que las administraciones afinen el lápiz para llegar a un feliz acuerdo, ambos ministerios volvieron a otorgar novedades al respecto de estos espacios educativos. Durante lo que va del mes, y pese a nuevos cruces, los anuncios parecen indicar que las obras ven una luz al final del túnel: la Provincia ejecutará lo que la Nación financiará.

En principio, la construcción estaba a cargo del ministerio de Educación de la Nación como parte del ambicioso plan de “Tres mil jardines”. La cartera educativa denunció, a mediados de 2018, una serie de incumplimientos por parte de las empresas contratistas y anunció la suspensión en algunos acuerdos. Así, algunos jardines -entre ellos los ocho de Santa Fe- quedaron a medio completar y otros en un incipiente estado de construcción.

Pasados algunos meses sin notificación sobre si habría o no reanudación, el ministerio de Educación de Santa Fe solicitó ser quien se encargue de la nueva contratación -previa licitación, también local-. La administración central dio el visto bueno y el acuerdo fue firmado en abril de 2019.

Hasta ese momento, todo claro. Luego, los entredichos. Quizás por los celos propios de campaña, los dos ministerios mostraron sus preocupaciones por los detalles que la prensa informaba. Así, una sucesión de explicaciones se interpusieron sobre los mencionados jardines escolares, que se encuentran a la espera de las manos obreras.

Continuidad provincial

Durante la mañana del miércoles de la semana pasada, la ministra Balagué encabezó el acto de apertura de sobres con ofertas para las licitaciones de los ocho jardines en territorio santafesino. Allí, se enfatizó en que la gestión fue realizada “como nos habíamos comprometido”, recordando que el gobierno nacional rescindió los contratos de las obras que las empresas constructoras dejaron “a medio construir o, en algunos casos, con un avance menor al 10%”.

Además, se indicó que con los equipos de Infraestructura de ambos ministerios se decidió dividir las obras en dos grupos, “para darles continuidad con distintos métodos de construcción”: los más avanzados continuarán el formato y los recién iniciados serán construidos según los prototipos de ejecución provincial.

En definitiva, el gobierno santafesino elevó los pliegos de continuidad, relicitó las obras y se comprometió a completar la inspección correspondiente con envíos de informes mensuales de los trabajos a Nación. Una decisión acertada ya que -tal como consideró la ministra en el acto- los inmuebles “son una necesidad del nivel inicial” y las obras son “tan importantes para las comunidades”.

Sostenimiento nacional

Por parte del gobierno nacional aclararon cuál fue el motivo de suspensión de las obras: “Tuvimos que rescindir por incumplimientos desmedidos y abandono por parte de la empresa contratista. Ante esos incumplimientos el Estado Nacional debía resguardar los fondos públicos, por eso se multó primero a la empresa y luego se le rescindieron los contratos con culpa”, señaló Manuel Vidal, jefe de Gabinete del Ministerio de Educación.

En respuesta a las declaraciones de Balagué, Vidal explicó qué fue lo que sucedió con las obras rescindidas y cuál es la situación actual de ellas: “El convenio firmado en abril de este año establece con toda claridad la rescisión de obras a la empresa UTE Escarbajar /Bahía Blanca; como así también cuáles son las competencias de las partes. que se requieran para la culminación de estas obras”, adviritió el funcionario nacional.

Asimismo, sostuvo que los fondos estarán garantizados para la culminación de las construcciones, tal como fue pactado. Para esto indicó que se realizará una transferencia de fondos, sin que Santa Fe tenga que poner dinero propio. Y agregó que la resolución sobre el formato de la operatoria se tomó, también, “para generar mano de obra local con empresas de la zona”.