Es imponente, todo es imponente. Caminar por la cancha 1 del predio de Independiente del Valle es como hacerlo sobre un colchón. Tiene alrededor de 12 canchas de fútbol, pero además, le brinda habitación a 120 chicos de las divisiones formativas, más la concentración de la primera y la de Independiente Junior, la sucursal que tiene el club en la segunda categoría y que anda muy bien en el torneo, más la escuela para todos los chicos que juegan en el club. Todo esto lo ideó y lo desarrolló Michel Deller. Y lo hizo de manera vertiginosa, tal cual nos cuenta Oscar Lara, el coordinador general que invitó a los enviados de El Litoral a recorrer el predio y que se jacta de haber visto los más de 500 partidos que ha jugado el equipo desde que se instaló en la serie A de la Liga ecuatoriana.
Justamente en el momento en el que se iniciaba la construcción del predio, se daba el ascenso a la A y este camino que tuvo dos picos extremos: la final de la Libertadores de hace tres años y esta final que se espera con mucha ansiedad en Independiente del Valle.
El gerente general del club es Santiago Morales, un hombre que se instala todos los días en su oficina y recibe el incesante paso de todos los que trabajan en un club que también sorprende por su movimiento. Se hizo un alto en su camino para charlar con El Litoral y para dejar “`picando” cierto descontento en el final de la entrevista por algunas actitudes que, por lo visto, no gustaron.
-¿Cómo se espera esta final, Santiago?
-Con ansias, sabiendo que será complicada pero con la experiencia de haber llegado ya a una final. Ese año, en la Libertadores, eliminamos a Boca y a River. Este es un club joven, estamos desde el 2010 en la serie A. no hemos podido ser campeones. Pero yo marco una gran diferencia con el 2016 cuando perdimos aquella final con Nacional de Medellín.
-Que en esa ocasión soñábamos con jugarla, pero no nos propusimos ser campeones. Hoy es distinto, todos hablamos de ser campeones en Independiente del Valle: los dirigentes, los jugadores, el cuerpo técnico y la gente.
-El objetivo y la energía. Vemos que estamos para ser campeones. El único partido en el que jugamos mal y tuvimos problemas, fue contra Unión en Santa Fe. Fuimos con 14 jugadores, sin tres jugadores que habían sido expulsados en la Copa Libertadores sub 20, Unión erró dos penales y nos dejó con vida. Y acá pudimos ganarle. Pero además, con Corinthians hicimos un partido extraordinario en San Pablo y eso nos da un optimismo de conseguir un resultado positivo.
-¿Cuál es el secreto de Independiente?, ¿por qué un club con tan poca hinchada consigue tanto?, ¿es cierto que destinan 1 millón de dólares anuales a las divisiones formativas?
-El hecho de ser nuevos no nos posibilita tener hinchada, porque vos sabés que se puede cambiar hasta de mujer pero no de club. Estamos “atacando” mucho a los niños para ir creciendo en la parte de la hinchada. No hemos ganado nada todavía, pero en las formativas somos campeones todos los años. El éxito viene de la mano del manejo institucional y del objetivo de formar jugadores. Les damos habitación, nutrición, sicólogo y enseñanza. En la selección sub 20 que ganó el Sudamericano y fue tercera en el Mundial, había 12 jugadores de Independiente del Valle, en la sub 17 y la sub 15 hay 9. ¿Qué queremos? Que Ecuador sea campeón del mundo, no Independiente.
-Pero por lo que se vé, la apuesta a las formativas viene de la mano de los recursos económicos…
-El presupuesto general del fútbol del club es entre 6 y 7 millones de dólares, pero el 25 por ciento de eso va a las inferiores y el resto al plantel profesional. O sea que es más de lo que tú has dicho.
-¿Cuánta gente van a llevar a la final del 9 en Asunción?
-Esta final, al principio, se iba a jugar en Lima y eso nos favorecía a nosotros. Pero ahora lo favorece a Colón por la cercanía de Santa Fe con Asunción del Paraguay. Acordamos con Conmebol que nos brinden 700 entradas. Al principio nos daban plateas de la categoría 4 para 10.000 personas, dijimos que no, se habló de 4.000 y al final fueron 700.
-¿Por qué irán tan pocos tratándose de una final?
-De Quito a Asunción hay 3 vuelos diarios, uno por Panamá, otro por Lima y el otro que da una vuelta larga. Se complica mucho conseguir los vuelos y ni hablar del hotel, que la capacidad está agotada. ¿Cuántos cupos podíamos conseguir, 50 por cada vuelo?, si tú haces la cuenta verás que es muy difícil que podamos llevar mucha gente. Habrán muchos que vendrán de Argentina porque los tenemos a Pellerano, Bieler y Schunke, otros de España por el técnico, otros de Colombia por Dájome y de Panamá por Torres.
-¿Le llama la atención la cantidad de gente que llevará Colón?
-No, para nada. Veo fútbol de Primera División de Argentina y hasta de cuarta categoría. Viajamos mucho para ver cómo trabajan, sabemos cuánta pasión hay en Argentina. Muchos irán y regresarán el mismo día, esto es algo que nosotros no podemos hacer. Hace dos meses que tuvimos en Asunción una reunión con los 8 semifinalistas de las dos copas, y había 7 entre brasileños y argentinos y un ecuatoriano. Para nosotros un motivo de orgullo. Y en esa reunión, los dirigentes de Colón nos comentaban que se habían ido en auto a Asunción y que al término de la reunión se volvían de inmediato. La realidad es que a nosotros nos quedó a contramano esta final.
-¿Apetece saber que el campeón jugará, casi con seguridad, el Mundial de clubes de 2021?
-Aquella vez en esa reunión que te comenté, nos habían explicado en la Conmebol la posibilidad del Mundial. En 2016, cuando perdimos la final, si se jugaba la final de Nacional con Chapecoense, que quedó frustrada por el accidente de los jugadores, nosotros hubiésemos jugado la Recopa. Hoy el premio por ser campeón es extraordinario. Todos estamos soñando con ese partido del 9 y nos tiene muy inquietos. Ya estamos ahí, a un pasito, y el jugador trata de cuidarse para jugar esa final y ganarla. Existe un grupo muy sano, compacto, está bien parado para llegar a esa final.
-¿Escuchó alguna versión sobre un pedido que podría realizar Colón para cambiar los porcentajes teniendo en cuenta que habrá mucha más gente de Colón que de Independiente?
-¿Te referís a la recaudación?.
-Todos podemos pedir, pero las reglas están claras y no hay por qué cambiarlas. Si la final era en Lima, nosotros no íbamos a reclamar nada por llevar más gente. Nosotros jugamos en el Atahualpa ante Corinthians con 40.000 personas. Y esa cantidad habría ingresado al estadio si se jugaba ida y vuelta… Esto está claro: 50 por ciento de la recaudación para Conmebol y 25 por ciento para cada club. Pero hubo más rumores…
-Sí, más rumores… Se habla de que dirigentes de Colón tuvieron reuniones con gente de Conmebol, en Asunción, fuera de las reuniones en conjunto que se hicieron. Nos llegaron comentarios desde todas partes. Yo también lo crucé a Alejandro Domínguez en el ascensor, nos saludamos, estuve con la gente de la organización. Pero cuestiones protocolares, nada fuera de la formalidad. Y hay otra cosa también...
-Sorpresivamente, me encontré con que se cambió el orden de los vestuarios. Nosotros, en el sorteo, quedamos como el equipo A y por lo tanto usaremos el camerino local. Y resulta que nos mandaron la notificación de que íbamos al camerino visitante. Enseguida hicimos el reclamo y nos dijeron que no nos preocupásemos, que estaba todo como se había dado en la primera oportunidad.
-… Mira, ahora te enseño los papeles para que veas que no le miento… Cada uno saca sus conclusiones, pero yo voy a decir algo: siempre, pero siempre, en la vida triunfa el que trabaja por el lado correcto.
-¿Y cómo es su relación con los dirigentes de Colón?
-Mira, en la reunión de la Conmebol charlamos mucho y me cayó muy bien la persona de seguridad, creo que Carlos Frioni es su nombre.
-Bromeaba con gente de Santa Fe, se vé que llamaba a algunos amigos que tiene de Unión y les decía que estaba conmigo y que la final va a ser con el equipo que eliminó a Unión en la primera fase.
-¿Está molesto por lo que ha pasado?
-Sí, claro… No me pareció bueno, ni sano. Si hay algo que se decide y se informa, ¿por qué hay que cambiarlo?, ¿a qué fueron los dirigentes de Colón a Asunción del Paraguay?
-Es que hubo inconvenientes con la masiva venta de entradas que originó un caos importante, Santiago…
-Está bien… Sólo les digo que las cosas se deben decidir adentro de una cancha, con fair play, con juego limpio y por derecha, haciendo las cosas de manera correcta. Porque insisto, el que triunfa es el que va por el camino correcto.