El padre policía del adolescente asesinado de un balazo en la espalda por un subcomisario, en Guadalupe Oeste, aseguró que su hijo "nunca tuvo antecedentes" y que "no se puede permitir que se tome justicia por mano propia".
El padre policía del adolescente asesinado de un balazo en la espalda por un subcomisario, en Guadalupe Oeste, aseguró que su hijo "nunca tuvo antecedentes" y que "no se puede permitir que se tome justicia por mano propia".
Walter Saucedo, también agente de la Policía santafesina, dijo en declaraciones a Cable y Diario que “no justifico ni a mi hijo ni a cualquiera que tenga este tipo de accionar, por mis valores”. Sin embargo, señaló que “esto no significa que haya argumento que justifique el accionar del personal policial”.
Asimismo, sostuvo que la fiscalía ve que la mujer le hace entrega de un dinero, una suma inferior a doscientos pesos por voluntad propia, porque se compadece de Lautaro, que toma el dinero y se va, sin representar ningún tipo de peligro ni de riesgo.
Tirado en el piso luego de recibir el disparo, Lautaro le pidió disculpas a su papá, “me dijo ‘perdoname pa, perdoname’, yo me di cuenta que él había hecho algo que yo jamás aprobaría”.
En cuanto a la causa en la que está imputado el subcomisario que disparó, quien está detenido como acusado del delito de homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por alevosía y por haber abusado de su función, el padre de Lautaro destacó que los fiscales Ezequiel Hernández y Martín Torres "están haciendo todo a su alcance para tratar de ver qué se va a resolver".
El policía que disparó realizó dos llamados en los cuales notificó que hubo “enfrentamiento”. “No existió ningún tipo de enfrentamiento y además en ninguna de las dos llamadas advirtió que había una persona herida” dijo el padre de Lautaro.
"Yo también en algún momento pedí mano dura cuando a Lautaro lo asaltaron en una esquina poniéndole un destornillador en el cuello. La vida me ha enseñado mucho. Por sobre todas las cosas soy un fiel creyente en la justicia, creo en las fuerzas policiales más allá de que haya miembros que a veces tachen la investidura policial y haya situaciones en las cuales la justicia es puesta en balanza por la opinión pública” sentenció Walter.
Con énfasis, sostuvo que ni desde adentro ni desde afuera de la fuerza policial se debe permitir tomar justicia por mano propia.
Sobre la mujer a la que su hijo intentó robar, lamentó aún no haber podido hablar con ella: “me gustaría abrazarla y decirle que lo lamento mucho como papá responsable de Lautaro y en nombre de Lautaro también”. Y concluyó destacando que “ella quiso ayudarlo, le entrega dinero de su propia voluntad”.
De acuerdo a la investigación, el episodio, que fue registrado por las cámaras de seguridad de la zona, ocurrió en la esquina de Belgrano y Risso, en el barrio Guadalupe Oeste, donde el joven de 17 años abordó a una mujer para robarle.
En ese momento, se ve que el subcomisario Olivares, vestido con ropa de civil, observa lo que pasaba y se acerca para impedir el asalto, tras lo cual dispara hacia al joven, que estaba de espaldas a él y a unos 50 metros de distancia, sin dar la voz de alto.
A raíz del disparo, el chico resultó gravemente herido y fue internado en el hospital Cullen, donde fue compensado y luego derivado a hemodinamia pero, pese a los esfuerzos, falleció unas cinco horas después.
El policía fue detenido y en una audiencia imputativa acusado de homicidio triplemente agravado.