“Hay que gobernar hasta el último día. Lo digo con todo respeto al señor gobernador y al que puede entrar. Transición no es una palabra válida”. Carlos Vergara -Uocra Rosario- no anduvo con vueltas para reclamar a Miguel Lifschitz por la paralización de obras en la provincia. “No vengamos con el cuento de la transición; que me digan ‘nos quedamos sin plata’ y vemos a dónde vamos a ir a tocar el bombo”.
El gremio habló en la sede de la patronal. Fue en la delegación local de la Cámara Argentina de la Construcción; estaban allí también Renato Franzoni, el anfitrión, y Germán De Vincenzo, titular de la entidad en Rosario. Unos y otros coincidieron en los efectos de la ralentización o incluso paralización de la obra pública en Santa Fe.
A nivel provincial -según datos del Ieric- se perdieron 3 mil puestos de trabajo en 9 meses. En el país son 40 mil puestos menos. “Son trabajadores directos para la madre de las industrias, que afecta a 112 rubros más, recordó Vergara respecto del efecto multiplicador que la construcción tiene en el universo de los insumos, así comercio y servicios.
El directivo de Uocra reconoció que “el gobernador ha cumplido” hasta hace algunos meses. Pero advirtió que “lo que estamos viendo es que en este proceso, la gobernanza tiene que ser hasta el último día. Cuando suba Perotti iremos a discutir con Perotti, pero hay obras que se pararon y trabajos que se cayeron. Eso es lo que venimos a decir; hay un problema de trabajo, familias que se quedaron sin ingresos.
“Hay que gobernar hasta el último día. Lo digo con todo respeto al señor gobernador y al que puede entrar. Tenemos que tener una estrategia en común; si ellos (por los empresarios) no pueden continuar con su empresa, nosotros no podemos sostener al trabajador. No vengamos con el cuento de la transición”, insistió.
Con enojo de tonos bien administrados, el sindicalista explicó que “se trata de personas que trabajan, que ponen el hombro, hay que ser más serio. Yo no le puedo decir a los trabajadores cuando salimos de acá: miren, esto es un problema de transición... después nos agarran las fiestas, las vacaciones. La gobernanza debe seguir hasta el último día”.
Al apuntársele que una política de Estado necesita continuidad, y que fue el propio equipo del gobernador electo el que pidió a Lifschitz que detenga licitaciones, Vergara insistió en que “con Perotti iré a hablar el día que asuma” y que si el actual mandatario plantea “que nos sentemos los tres, que lo llame él. Yo no podría contestar” por el pedido del rafaelino, señaló; pero se preguntó: “Mientras tanto, ¿qué hacemos con la chapa agujereada?”.
“Todavía no tenemos claramente la información respecto de las obras que se están ejecutando. La preocupación pasa por ver cómo se van a pagar, sobre todo las obras que se han hecho a último momento”.
La queja corre por cuenta de Ricardo Olivera, presidente del PJ provincial y diputado electo. En diálogo con LT 10, dijo que el 10 de diciembre se verá la situación real y a partir de allí se tomarán las decisiones respecto de los pagos y la continuidad de la obra pública.
“La comisión está comunicando que no tiene toda la información que se solicitó, la información precisa respecto a los compromisos no está o está parcialmente”, advirtió.
A la vez, insistió en que la presentación del presupuesto 2020 debería estar a cargo del gobierno de Perotti: “Lo lógico es que esto lo haga el gobierno que viene”.
Empresarios en emergencia
“El Consejo Federal, hace tres semanas, declaró al sector en emergencia a nivel nacional. Julio Crivelli (titular de la Cámara Argentina de Comercio) le planteó el tema al presidente Mauricio Macri y al electo mandatario Alberto Fernández”, dijo Renato Franzoni.
El titular de la delegación local de la CAC reconoció que “la macroeconomía nos afecta a todos”, y consintió ante la pregunta que existen plazos de 30 a 45 días en el pago de certificados de obra. “Más que el atraso en pagos, el mayor problema es la escasa evolución de la obra pública”, generalizó diplomáticamente.
Franzoni reconoció que en la administración Lifschitz la obra pública “fue uno de los bastiones”, pero también señaló que “no tenemos forma de seguir sosteniendo los niveles de empleo y producción, ni a lo que hemos apostado que es invertir en nuestras empresas, en equipamiento y personal”.
Sobre la transición comentó que “tuvimos diálogo con personas que fueron designadas por Omar Perotti. Nos hemos reunido básicamente para comentar la situación; fue un diálogo informal en el que planteamos nuestra preocupación”.
Sin especificar detalles, coincidió con el gremio en el sentido de que “el volumen de obras se achicó mucho” y “no tenemos un programa; hay una preocupación de las empresas y del sector obrero”.
Sobre el ajuste a nivel nacional, Franzoni planteó que “el recorte del presupuesto fue a fines de 2017”. Y lo evaluó como “una equivocación, porque estamos lejos de ser un gasto, sino que hace al bienestar en escuelas, rutas, hospitales...”.
Explicó el empresario que hasta el momento se ha convenido con el sindicato las suspensiones rotativas con las que se “reparte” el costo de la crisis. “Pero la ley pone un límite a las suspensiones”.
Respecto de la necesidad de concertar entre los actores ante un presupuesto en crisis, el empresario remarcó que “tenemos que tratar de que la obra pública sea constante, que haya una política de Estado. Más allá de los cambios de gobierno, no podemos de estar en estos vaivenes, con volúmenes decrecientes en forma rápida” como los que tuvo Santa Fe, que hasta hace no muchas semanas atrás “era una excepción en el país” por su nivel de actividad.