El gobierno provincial entregó 17 viviendas en el barrio Acería

El gobernador Miguel Lifschitz entregó este martes 17 viviendas a familias del barrio Acería de la ciudad de Santa Fe. Las casas, al igual que otras 18 entregadas en junio pasado, se enmarcan en un máster plan delineado por la Secretaría de Estado del Hábitat para transformar urbanísticamente a la zona.

“Desde el inició de la gestión mantuvimos la idea de trabajar activamente en todos los barrios de Santa Fe, sin mirar si le correspondía al municipio o a la provincia, sino tratando de ayudar a los vecinos para que pudieran vivir mejor”, explicó Lifschitz.

“En cada uno de los barrios pensamos y proyectamos distintos tipos de acciones según las características y los problemas, pero cada vez que llegábamos a Acería parecía que no alcanzaba para resolver los problemas. Después de pensar distintas propuestas llegamos a la conclusión de que había una sola solución posible para cambiar la realidad de este barrio, que es la que estamos implementando: construir viviendas nuevas porque iba a ser mucho más costoso intervenir los edificios existentes que estaban muy deteriorados y con vicios de origen que no podíamos resolver”.

“Por eso nos decidimos por esta solución de fondo, un cambio total del barrio: construir nuevas unidades que están proyectadas de otra manera, de dos pisos, con otra calidad y forma, respetando espacios libres para tener lugar para el esparcimiento y juego de los niños; y de a poco ir tirando abajo los edificios antiguos”, agregó.

“Estamos a mitad de camino. Lamentablemente los cambios políticos a veces interrumpen estos procesos que son largos, pero está todo proyectado y presupuestado para que pueda continuar de la misma forma y, en dos años, podamos completar la totalidad de las obras previstas. Es una inversión muy grande, pero que vale la pena, porque es de una vez y para siempre”.

“Esta debe ser una política de Estado, porque más allá de los cambios políticos las obras deben seguir adelante y los buenos proyectos tienen que terminarse”, concluyó Lifschitz.

UNA REALIDAD QUE SE PUEDE PALPAR

El secretario de Estado del Hábitat, Diego Leone, señaló que “hoy tiene que ser un día de alegría para barrio Acería. Esto es parte de un proceso, de una dura decisión del gobernador, porque nosotros como Estado, estamos para construir no para demoler, y tomamos la decisión política de construir nuevas viviendas y demoler lo inhabitable, porque una vivienda digna tiene que ver con tener una casa, pero también con tener luz, agua y cloacas”.

“Este proyecto lo presentamos hace dos años y medio, lo planteamos en tres años, porque es muy grande, y en total tenemos que construir 400 viviendas; faltan construir 70 de la primera etapa de 100, y esperamos que el próximo gobierno siga con esta política de Estado, porque vivir dignamente es su derecho”, agregó.

“Transformen esta casa en un hogar, este fue el objetivo que tuvimos con las 3500 viviendas que construimos en toda la provincia en estos cuatro años, porque atrás de una casa hay una familia que está esperando vivir dignamente”, concluyó Leone.

Por su parte, el intendente electo de la ciudad de Santa Fe, Emilio Jatón dijo que “hoy es un día para reivindicar a aquellos que toman decisiones. Hoy es uno de esos días para sentirse contento”.

“Es impresionante el cambio del barrio en los últimos dos años. Esto es algo que se propuso Miguel Lifschitz y con un gran equipo lo viene logrando. No es una decisión de esas que se toman de un día para el otro, porque decían que sacar la gente y darle casas nuevas en este lugar era imposible. No es una ficción, es una realidad que se puede palpar”, agregó.

Por último, Jatón remarcó que se evidencian los cambios: “Va a desaparecer el viejo barrio Acería con esos monoblock inhabitables que no podían concebirse como viviendas y que habían sido olvidados por los Estados”.

PRESENTES

Del acto, realizado en el nuevo complejo habitacional (Grandoli y Azcuénaga), participaron también, la diputada provincial Clara García; y el director provincial de Vivienda y Urbanismo, Lucas Crivelli, entre otras autoridades provinciales.

TRANSFORMACIÓN URBANA

El proyecto surgió en respuesta al relevamiento realizado en noviembre de 2016 que arrojó como resultado diferentes niveles de deterioro en las unidades habitacionales existentes y la necesidad de reparación integral o demolición de los edificios que presentaban deficiencias estructurales.

Con este diagnóstico, se decidió comenzar, en una primera etapa, la construcción de 102 unidades habitacionales de un total de 436, realizar obras de infraestructura urbana y poner en marcha la recuperación y puesta en valor de los espacios públicos existentes.

Actualmente, el proyecto avanza en las tradicionales manzanas donde están los monoblocks que ya empezaron a demolerse, luego de reubicar a los habitantes que esperan la finalización de las nuevas casas. Este sector está delimitado por las calles Matheu, Cafferata, Azcuénaga, Edmundo Rosas y Viñas, y suma cuatro manzanas contiguas al barrio comprendidas entre Azcuénaga, Edmundo Rosas, Ayacucho, Grandoli y Cafferata.

Se calcula que la inversión provincial para este proyecto demandará un total de más de 500 millones de pesos y un plazo de obra de cincos años.

Como parte del proyecto integral, en junio de este año, la provincia puso en funcionamiento el Alero Sportivo Cultural, con el objetivo de brindar un espacio público que permita el encuentro de vecinas y vecinos de todas las edades, fomentando la convivencia, la solidaridad y el desarrollo de actividades lúdicas y culturales.