El Tribunal Superior de Justicia de Hong Kong, máxima instancia judicial del territorio, decidió este viernes dejar en suspenso una semana el fallo que declaró anticonstitucional una ley impulsada por el gobierno para prohibir las máscaras en las protestas que afectan a la ciudad, por lo que la normativa continuará en vigor durante ese tiempo.
Por este fallo, la ley estará vigente este domingo, cuando se celebranlas elecciones a consejos de distrito, una jornada en la que cientos de policías antidisturbios velarán para garantizar la normalidad, informaron los medios locales.
Tras el primer fallo anunciado por el Tribunal Superior, el Departamento de Justicia hongkonés pidió a los dos jueces que lo habían dictaminado que mantuvieran la ley "válida y con efectos legales" hasta que se llegue a un "veredicto final".
Según indicaron fuentes jurídicas citadas por la agencia de noticias EFE, el plazo de una semana que mantiene la decisión en suspenso es el tiempo para que el gobierno local presente un recurso de apelación formal, algo que ya ha anunciado que hará.
Las autoridades chinas cuestionaron la independencia judicial de Hong Kong tras la decisión del Tribunal Superior, que declaró anticonstitucional la ley, en vigor desde principios de octubre y con la que el gobierno local buscaba facilitar el trabajo de la policía en las protestas que afectan a la ciudad desde junio.
Según Beijing, es el Legislativo chino -y no la Justicia hongkonesa ni cualquier otro órgano- quien debe decidir si las leyes locales se ajustan o no a la Ley Básica, la carta magna local.
Y subrayó que la ley de la época colonial de la que se sirvió el gobierno hongkonés para prohibir el uso de máscaras sí está en línea con la Ley Básica, al contrario de lo que opina el Tribunal Superior de Justicia.
La norma consideraba delito el uso de máscaras en manifestaciones, bajo penas de hasta un año de cárcel y multas de hasta 25.000 dólares hongkoneses (casi 3.200 dólares); en caso de no retirarlas si lo pedía un agente, las penas eran de seis meses de cárcel y 10.000 dólares hongkoneses (1.275 dólares).
Hasta el 7 de noviembre, la policía arrestó a 247 hombres y 120 mujeres ante la sospecha de haber infringido la regulación, de los que 24 han sido llevados ante la Justicia.