En diciembre de este año se cumplirán 20 años desde que la asociación civil “La Casa del Sur” abrió sus puertas hacia la comunidad santafesina. Durante este tiempo la Institución se caracterizó por llevar adelante actividades y propuestas abiertas para Santa Fe y toda la región. Es cierto que con el paso de los años han ido cambiando las lógicas y las realidades, y por ende el rol y las actividades que ha llevado adelante la entidad, pero lo que no cambió es el norte de colaborar con la comunidad en su conjunto, a través de la educación y de la cultura.
Desde diciembre de 1999, la Casa ubicada en San Jerónimo 1133 empezó a tomar vuelo mediante una larga lista de actividades. Talleres lúdicos para chicos, clases de bailes, de idioma, de costura, entre otros, campañas de recolección de juguetes y vestimenta, fiestas patrias, comenzaron a darle movimiento al largo pasillo que atraviesa la Institución de calle San Jerónimo. Paralelamente, nacía un Instituto de Estudios Sociales, que se encargaba de realizar estudios en distintos barrios de la ciudad para conocer de forma pormenorizada las diferentes realidades que atravesaban los santafesinos, y con esa información poder brindar propuestas y ayudas acorde a las necesidades que existían.
Los años 2000, con sus dos inundaciones (2003 y 2007) que dejaron a más de un tercio de la ciudad bajo agua y miles de santafesinos que lo fueron perdiendo todo, expusieron a la pobreza institucional y al rol del Estado en una imagen tan cruda como la realidad. En ese contexto, las propuestas culturales y educativas con un fuerte contenido solidario hicieron permanecer y contar con el respeto hacia La Casa del Sur no solo de la sociedad sino de los actores dirigenciales y políticos del momento. El crecimiento de la entidad fue acompañado por los distintos gobiernos municipales y provinciales, sin importar el color político, y de la mano de la comunidad, afianzando una propuesta que consumó una idea clara y contundente de un espacio amplio, plural y con contenido humanista.
Con el paso del tiempo y mediante las diferentes presidencias de La Casa del Sur en la actualidad la preside Mariano Ratto- se fueron llevando a cabo proyectos a largo plazo que funcionaron en algunos casos como motor para decisiones políticas posteriores. Un ejemplo es el rol que tuvo la Asociación como Miembro Fundador de la Red Argentina por el Desarme, una organización nacional que tenía como objetivo reducir la tenencia de armas de fuego por parte de la sociedad civil.
La Casa del Sur conoció el trabajo realizado en Mendoza y comenzó con un ciclo de talleres y una campaña para concientizar a los santafesinos. Posterior a esto, el municipio y el Concejo Municipal tomaron la campaña como propia y continuaron un camino que había comenzado a través del empuje de una asociación civil.
La lista es larga y no alcanzará el espacio para enumerar las actividades que se realizaron a lo largo de estos 20 años, pero sirve para describir el compromiso que tuvo y tiene La Casa del Sur con la educación y la cultura en Santa Fe. Otro de los ejemplos es el Convenio con el Hospital Mira y López, mediante el cual la asociación se encargó de brindar capacitación a las familias de los pacientes sobre alimentación saludable, higiene y salud. También, se realizaron talleres trabajados en conjunto con la Biblioteca Mitre, encuentros de lectura infantil, obras de teatro, muestras de arte, exposiciones anuales de la Escuela Mantovani, encuentros de diálogo y debate sobre temas diversos, apoyos escolares, entre otras actividades.
Ana Frank y el Espacio Surgir
Un nombre que se vincula en el inconsciente colectivo de los santafesinos a la hora de hablar de La Casa del Sur es el de Ana Frank. En el año 2001 la muestra “Ana Frank, una historia vigente” llegó a la Provincia de Santa Fe por primera vez y lo hizo en La Casa del Sur. Por el formato físico de la misma y por la realidad internacional que se vivía en ese año en particular fue innovador y llamativo, que una asociación civil se “ponga al hombro” una propuesta verdaderamente superadora a lo conocido en Santa Fe.
Ese año fue el comienzo de un largo vínculo entre La Casa del Sur y el Centro Ana Frank Argentina, con diversas muestras y actividades que llegaron a la ciudad y posteriormente se expandieron por toda la provincia. Más de 15.000 chicos pasaron a través de los años por estas muestras, que contaron desde el comienzo con la novedad de aprovechar la presencia de las muestras para formar a jóvenes de diferentes barrios como guías voluntarios, brindándoles contenidos y conocimientos para que posteriormente lo trasladen a sus pares. Así, confluían los adultos capacitadores con el entusiasmo de los jóvenes que hoy, ya adultos, reconocen públicamente lo enriquecedor de la experiencia que atravesaron.
En la actualidad, en la sede de La Casa del Sur funciona el Espacio Educativo Surgir, una propuesta de educación no formal avalada por el Ministerio de Educación, mediante el cual “se abordan problemáticas actuales mediante Ciclos de talleres, formaciones y jornadas de capacitación donde se invita a los visitantes a experimentar instancias de formación y expresión transitando experiencias grupales de aprendizaje colaborativo”, como describe la metodología detallada en su sitio web. Insistir con el método de la Comunicación No Violenta para mejorar las relaciones y el trato mediante el trabajo en grupos de pares. En otras palabras, continuar el legado de seguir educando, pero con innovación y técnicas superadoras a tiempos anteriores.
Desde 1999 a 2019 pasaron 20 años, pero para La Casa del Sur fue mucho más lo que pasó. Cientos de personas, miles de jornadas llenas de vida, entusiasmo y solidaridad, y un reconocimiento merecido de la sociedad con una asociación que cumplió, cumple y seguirá cumpliendo con su rol, el de tender una mano cuando se necesita, pero también el de brindar herramientas y conocimiento a los santafesinos para seguir buscando una sociedad mejor.