Hubo una vez en la que Hugh Grant jugó a ser político. Era 2003 e interpretaba al primer ministro británico en la comedia navideña Love Actually. Su personaje, más que dedicarse a los asuntos de Gobierno, estaba más interesado por su vida amorosa.
Hubo una vez en la que Hugh Grant jugó a ser político. Era 2003 e interpretaba al primer ministro británico en la comedia navideña Love Actually. Su personaje, más que dedicarse a los asuntos de Gobierno, estaba más interesado por su vida amorosa.
Ahora, el actor, de 59 años, sí que muestra un compromiso por los temas que afectan a su país y decidió abrigarse, salir a la calle y mostrar la mejor de sus sonrisas para ir puerta por puerta pidiendo el voto para los liberal-demócratas en las elecciones generales del Reino Unido el próximo 12 de diciembre.
Grant estuvo paseando este lunes por Pimlico, un exclusivo barrio de Londres, acompañado por el exdiputado Chuka Umunna, que tras dejar su escaño como laborista en el Parlamento británico ahora se postula como candidato del partido Liberal Demócrata. El intérprete tiene claro su objetivo en esta cita electoral: los conservadores deben salir del gobierno. "Nunca me he involucrado en una campaña electoral en mis 59 años, pero estamos afrontando —no quiero parecer dramático— una emergencia nacional", dijo en declaraciones a los medios.
Como otras celebridades, Grant se posicionó en contra del Brexit y considera que una mayoría conservadora los terminará sacando "de la Unión Europea (UE) y de una manera casi caótica". No confía en que "un año sea suficiente para llegar a un nuevo acuerdo con la UE" y pronostica que los últimos meses de 2020 serán un desastre para el país. "Quiero aportar mi granito de arena para tratar de prevenir esa catástrofe", explicó.
El hecho de ir tocando timbre de las casas londinenses no supone una novedad para el actor. "Solía vender extintores de puerta en puerta. Era muy bueno. También vendía fundas para perchas. Eran geniales. Podría volver a hacer eso", contó entre risas.
Preguntado si se ve ejerciendo como político, Grant tiene claro que no es el más indicado para acatar órdenes: "Quería ayudar en estas elecciones y esa era la idea que pasó por mi mente. Pero pensé que tendría que luchar por seguir la línea política del partido. Creo que soy muy viejo y muy orgulloso para obedecer". Su función es simplemente "golpear el tambor para la votación táctica".
Las últimas publicaciones en el perfil Twitter de Grant evidencian que los británicos se están preparando para unas nuevas elecciones y él está preocupado por el futuro del país. Sus mensajes muestran que el actor no tiene ninguna simpatía por Boris Johnson, el actual primer ministro británico.
A finales de noviembre, el intérprete subió una imagen que recogía declaraciones que Johnson hizo en febrero de 2016, meses antes de la votación del Brexit, demostrando que el político se contradice a sí mismo: "Irse causaría una incertidumbre comercial, mientras el gobierno se enredó durante años en un proceso de negociación de nuevos acuerdos, desviando así la atención de los verdaderos problemas que no tienen nada que ver con Europa".
Pero este no es el único mensaje que dedicó al político, al que también se dirigió por redes sociales con insultos, enfadado por destruir los valores por los que luchó su abuelo en las dos guerras mundiales y mostrando su preocupación por el futuro de sus hijos.