En Santo Tomé ya juraron los nuevos concejales que resultaron electos en las últimas elecciones generales, los que se sumaron al flamante cuerpo deliberativo local en reemplazo de los ediles salientes. En el multitudinario acto desarrollado el pasado 5 de diciembre en las instalaciones del Concejo santotomesino, el recinto recibió a Guillermo Rey Leyes y Natalia Angulo (Frente Progresista Cívico y Social); Julián Ilchischen y Angel Piaggio (Partido Justicialista); y Florencia González (Cambiemos). Completaron sus mandatos Martín Giménez (quien pasará a ser el futuro secretario de Gobierno municipal), Alejandra Chena, Rosana Zamora, Roberto Schmidhalter y Miguel Weiss Ackerley. De esta manera, el nuevo cuerpo quedó constituido por los nombrados, más Gabriela Solano (FPCyS), Rodrigo Alvizo (Peronismo), Mity Reutemann y Fernando “Turco” Alí (ambos de Cambiemos).
En el transcurso de la Sesión Preparatoria también se decidió quien presidirá el órgano durante el próximo período ordinario, resultando electa la periodista local Gabriela Solano. Durante la votación existieron dos mociones: la del FPCyS, proponiendo a la nombrada Solano para conducir el Concejo Municipal, y la del Partido Justicialista que sugirió a Alvizo. Finalmente la primera obtuvo la mayoría de los votos, reuniendo 7 de los 9. El dato de color es que sorpresivamente, el histórico referente peronista, Ángel Piaggio, decidió no acompañar la propuesta de su partido y votó por la edil frentista. En tanto, el ex intendente se adjudicó la Vicepresidencia Primera y Fernando Alí la Segunda.
Guiños y rosca
Con esta nueva conformación el nuevo Concejo de Santo Tomé quedó dividido en tres fuerzas políticas, cada una de ellas constituida por tres ediles. Así, la búsqueda de consensos entre el FPCyS, el PJ y Cambiemos será un verdadero desafío de cara al trabajo a concretar durante el 2020, siempre teniendo en cuenta diversos factores. Muchos de ellos giran en torno a la reelecta intendenta Daniela Qüesta. Uno de ellos refiere a la reciente decisión del Ejecutivo Municipal de desdoblar las áreas de Obras y Servicios Públicos en dos secretarías separadas. Esta determinación de la gestión hace suponer que en un año de cambio de signo político a nivel nacional (que apunta a una recuperación económica lenta que demoraría, por lo menos, más de dos años), la obra pública no tendría un gran impulso. Por ende, el trabajo de Qüesta se focalizaría en reforzar los servicios públicos esenciales que debe cumplir el municipio. Seguramente su ejecución y eficiencia será tema de discusión en el Concejo.
Otro de los componentes a analizar es lo que sucederá con la presidencia del cuerpo, en manos de Gabriela Solano. Si bien forma parte del Frente Progresista, no pertenece al “riñón” directo de Qüesta. Por tal motivo, en caso de que en determinadas cuestiones las aguas queden divididas en tres y haya que desempatar, los ojos se posarán sobre la doble votación de la comunicadora -en su carácter de cabeza del cuerpo- para hallar una decisión final. También hay que evaluar las primeras muestras de diferencias dentro del PJ, con el guiño de Angel Piaggio hacia Solano al momento de la elección de la presidencia, en vez de acompañar con su voto a Alvizo, su par del partido, quien habría quedado muy molesto por esta actitud. Indudablemente las negociaciones entre el Ejecutivo, el Concejo y sus integrantes serán clave en un año en el que el reciento local motorizará la “rosca” política de Santo Tomé.