La entrega de los Nobel de Literatura 2018 y 2019, este próximo martes 10 de diciembre en Estocolmo, a la polaca Olga Tokarczuk y al austríaco Peter Handke, tendrá como telón de fondo una protesta contra el autor, acusado de minimizar el genocidio de Srebrenica, protagonizada por familiares y víctimas de la masacre ejecutada en 1995 por fuerzas serbobosnias que asesinaron a unos 8.000 varones musulmanes.
Los cuestionamientos a Handke surgieron en 1996, a partir de la publicación del libro "Un viaje de invierno a los ríos Danubio, Sava, Morava y Drina, o justicia para Serbia" (1996), denunciado de panfletario y de desconocer la matanza ordenada durante el gobierno del presidente serbio Slodovan Milosevic (1941-2006), condenado en La Haya por crímenes de lesa humanidad.
Las tensiones contra el otorgamiento del Nobel a Handke surgieron apenas conocido su nombre, con peticiones de que le retiren el premio, de que dimita o de que los miembros de la Academia Sueca boicoteen la ceremonia, recordó Teufika Sabanovic, cuyo padre y una decena de familiares murieron en Srebrenica.
Supervivientes de la matanza, madres de las víctimas y una decena de oradores -que repasarán lo que vieron y vivieron en Bosnia esos días- se concentrarán en la plaza Norrmalstorg de Estocolmo.
Mientras que un grupo pequeño se apostará frente a la Sala de Conciertos de Estocolmo, donde el rey Carlos Gustavo entregará los premios, informó la agencia de noticias EFE.
Una vez anunciado el ganador del Nobel 2019 (junto a la ganadora del 2018, definición que se había suspendido por el escándalo de abuso sexual y malversación de fondos), la Academia Sueca publicó un comunicado respaldando a Handke.
El documento lo describía como "un autor provocador que se expresó de modo inadecuado y poco claro en cuestiones políticas, aunque no tiene en sus escritos nada que implique un ataque a la sociedad civil o al respeto por la igualdad de las personas".
Titulado "Por supuesto que no vamos a premiar a un defensor de la guerra" y publicado en la página web del Dagens Nyheter, el diario con mayor tirada de Suecia, el texto llevó la firma del secretario permanente de Academia Sueca, Mats Malm, y del académico Eric Runesson.
"Lo acusan de relativizar la masacre por referirse a otras masacres cometidas durante la guerra. Es difícil ver cómo eso implica restarle importancia a los hechos especialmente crueles del genocidio de Srebrenica", afirmaron en el artículo.
En el comunicado recordaron que el mismo año en Handke fue al entierro de Milosevic para despedirlo, en 2006, el diario alemán Süddeutsche Zeitung publicó declaraciones del escritor afirmando que lo ocurrido en Srebrenica fue el "mayor crimen contra la humanidad en Europa tras la II Guerra Mundial".
Respecto de la presencia de Handke en el funeral del líder serbio, a quien había visitado en La Haya durante el juicio por crímenes de guerra en los Balcanes, los académicos señalaron que si bien esa decisión "puede haber resultado insensata no existe prueba de que haya glorificado o negado las matanzas".
Al conocerse el fallo del Nobel, autoridades de la Academia Sueca señalaron que: "Este no es un premio político, Handke es un autor enorme".
El autor, por su parte, rechazó haber cuestionado la matanza de Srebrenica, al afirmar que su obra matizaba la imagen internacional de los serbios como "malvados" y de los bosniomusulmanes como "buenos".
Con información de Télam.