Los ministros de Economía Walter Agosto y de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos, Esteban Borgonovo seguían con negociaciones -al cierre de esta edición- con legisladores de ambas Cámaras.
Esta vez el gobernador decidió comenzar la pulseada con las Cámaras -donde no tiene las mayorías- con reuniones de dos enviados con jefes de los bloques.
Los ministros de Economía Walter Agosto y de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos, Esteban Borgonovo seguían con negociaciones -al cierre de esta edición- con legisladores de ambas Cámaras.
En la sala de reuniones de la presidencia del Senado, los enviados del gobernador Omar Perotti expusieron sus razones, y sus números, a parte de los doce jefes de los bloques de Diputados y a los tres del Senado. El dato saliente es que no concurrieron al encuentro los integrantes del interbloque mayoritario de la Cámara baja, es decir del Frente Progresista, Cívico y Social que lidera el ex gobernador Miguel Lifschitz. Otros diputados igualmente opositores, en cambio, sí aceptaron concurrir al encuentro.
A puertas cerradas y con un paquete de tres asuntos clave para el primer año de gestión de Perotti, los ministros volvieron a la carga con los fundamentos más fuertes del Ejecutivo para que sea declarada la Emergencia Económica y Financiera en Santa Fe, aunque la principal traba para que ese proyecto avance está en Diputados, que tiene 28 bancas frentistas.
En cambio, tienen algunas chances más de ser tratados los otros dos asuntos que pide la Casa Gris para ser tratados este jueves 26 y -eventualmente- el viernes 27: una reforma a la ley tributaria para actualizar los impuestos inmobiliario urbano y rural y sobre los ingresos brutos que pagan las cerealeras.
Del mismo modo, una norma que parece difícil que los legisladores le nieguen al gobernador, para adherir a Santa Fe a la legislación nacional en materia fiscal, tras la salida acordada por el presidente Alberto Fernández y los gobernadores respecto de la salida del llamado Consenso Fiscal.
En el peronismo del Senado de doce integrantes -pero dividido entre perottistas y senadores que solo se identifican con el NES- había representantes de ambos sectores en la reunión. Todos acordaron hablar sin la presencia de los periodistas y aunque utilizaron el ámbito institucional del Legislativo.
Tan grande fue el celo de los interlocutores (y seguramente sus desconfianzas mutuas) que a la reunión no la pudieron cubrir ni los fotógrafos y camarógrafos de los medios de comunicación, además de los periodistas que esperaban pasadas las 13.30 horas que termine el encuentro que se inciara dos horas y media antes.
No hay un solo artículo en ninguna de estas leyes en el que exista algo como un ‘superpoder’ ”. Esteban Borgonovo, ministro de Gobierno.