Tomás Rodríguez | [email protected]
(Especial para El Litoral)
El 8 de enero de 1995, a las 17.30, se anunciaba la noticia que conmocionó al universo deportivo, el deceso de Carlos Monzón (52 años), considerado el más grande boxeador argentino de todos los tiempos, en un siniestro vial ocurrido en jurisdicción del paraje Los Cerrillos, cerca de Santa Rosa de Calchines.
Tomás Rodríguez | [email protected]
(Especial para El Litoral)
Hace un cuarto de siglo, el 8 de enero de 1995, pasadas las 17.30. el periodista Oscar Fruttero anunciaba por LT 9 Radio Brigadier López una infausta noticia que conmocionó al universo deportivo, el deceso de Carlos Monzón, a los 52 años, considerado el más grande boxeador argentino de todos los tiempos, en un trágico siniestro vial ocurrido en jurisdicción del paraje Los Cerrillos.
El accidente automovilístico aconteció en una recta de la RP Nro 1 “Teófilo Madrejón”, a unos 10 kms. metros de la localidad de Santa Rosa de Calchines, a 50 kms. de la ciudad de Santa Fe.
El Renault 19 de color gris que conducía Monzón volcó cuando el ex campeón mundial perdió el control luego de haber mordido la banquina, dando siete tumbos. El cadáver de Monzón presentaba un gran hematoma en la zona del cuello, lo que hacía pensar que el malogrado deportista se desnucó.
El inolvidable campeón regresaba desde la localidad de Cayastá, donde había disfrutado de libertad (desde las 20 del viernes 6 hasta las 20 del domingo 8) y se dirigía precisamente desde la casa de campo de su amigo Motura (donde habían almorzado un cordero asado) a la Unidad Penitenciaria Nro 2 de Las Flores, donde se alojaba durante la semana. En febrero de ese fatídico año se iban a cumplir las tres cuartas partes de la pena.
La condena
Faltaba poco tiempo para obtener la libertad condicional, tras la muerte de su pareja, la modelo y vedette uruguaya Alicia Muñiz, nacionalizada argentina, el 14 de febrero de 1988, en el chalet de Pedro Zanni 1567, en el barrio residencial de La Florida de Mar del Plata, el Tribunal lo condenó por homicidio simple a 11 años, cumpliendo la pena en las unidades de Batán y Junín de Buenos Aires, y de Las Flores de esta capital.
Sus acompañantes
Monzón estaba acompañado por su amigo, el empresario Gerónimo Motura, de 60 años, que también falleció en el siniestro; y una mujer, Alicia Guadalupe Fessia, de 35, quien en un primer momento se encontraba herida en el hospital de emergencias “José María Cullen”, con numerosos cortes y traumatismos, recuperándose en los días posteriores del siniestro vial.
Motura era cuñado del entonces jefe de la Unidad Regional Uno de la policía santafesina, Juan Venencia; y Alicia era viuda de Jorge, uno de los hermanos de Monzón, quien también murió en un accidente automovilístico.
Saratti
El productor agropecuario Alberto Saratti, del paraje Los Cerrillos, halló el Renault 19 volcado sobre una zanja, con los tres cuerpos a unos 50 metros del automóvil, y fue quien trasladó a la mujer hasta un centro asistencial de la zona.
Saratti confesó: “En un primer momento no reconocí a esa gloria del deporte argentino, recién cuando escuché que otros vecinos que estaban conmigo decían: ‘¡Es Carlitos Monzón, es Carlitos!’, me di cuenta de quién era, y los vecinos que llegaban al lugar estaban impactados y la mayoría comenzaban a llorar”.
Reconocimiento
El cuerpo permaneció depositado hasta las 22.30 del domingo en la morgue del Hospital Rural Nro 10 de la localidad de Santa Rosa de Calchines, donde fue reconocido por su segundo hijo varón, Abel Ricardo. Desde el lunes 9 de enero fue velado en el vestíbulo central del Palacio Municipal de esta capital.
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