"Si, ya sé. El título es demasiado largo, pero no se me ocurre otro después de terminar de ver por tercera vez el documental “Nisman: el fiscal, la presidenta y el espía”, escribió la vicepresidenta, en un texto que publicó en su propia web. "Primero - continúa- quiero hacerme cargo de mis prejuicios acerca de lo que uno esperaba que iba a hacer un documentalista inglés en una plataforma estadounidense con un tema como el de Nisman. Comprobé que se puede ser inglés, producir para EEUU, pero tener objetividad y honestidad intelectual".
Con respecto a lo que más le llamó la atención del documental, aseguró que fue una frase que decía algo como “una investigación, un expediente no se puede basar en expectativas, se basa en hechos y en pruebas”. "Creo que esa fue mas o menos la frase o, lo que es más importante, el concepto", opinó, al tiempo que consideró que "el documental “Nisman: el fiscal, la presidenta y el espía”, es de una calidad excepcional".
"Lo que pudo lograr Justin Webster que no es abogado, ni juez, ni tiene responsabilidades institucionales: mostrar los hechos con objetividad, sin omisiones de testimonios y circunstancias, sin inventar hechos que no existieron y menos aún desarrollar hipótesis y relatos sin pruebas que los sustenten y que, al hacerlo, las conviertan en verdades (...) Por el contrario, nada como Comodoro Py y parte del Poder Judicial para producir ficciones, dirigidas y guionadas en detalle por los servicios de inteligencia -nacionales y extranjeros- y difundidas por los medios de comunicación hegemónicos. Lástima que estos directores y estos guionistas no ganarán el único premio al que debe aspirar la verdadera Justicia: descubrir la verdad y darla a conocer", sugiere.
Leé el texto completo haciendo clic aquí.