Las condiciones de estabilidad climática durante la semana permitieron un normal desarrollo y crecimiento de los cultivos, “con la particularidad, de acuerdo a los estados fenológicos de los mismos, de la demanda sostenida de agua útil y procesos de evaporación – evapotranspiración”, dice el informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe.
En general, la actividad que evidenció mayor movimiento fue la cosecha, a ritmo sostenido la del girasol y más lenta la del maíz temprano, que se inició en los lotes más avanzados. Con rendimientos firmes para el primero y muy interesantes para el segundo, indicó el SEA.
El informe semanal señala que se llevan trilladas 108.500 hectáreas de girasol (65% del área sembrada); y que están cultivadas 98.000 ha de maíz temprano; 29.850 ha de arroz; 51.500 ha de algodón; 60.170 de sorgo granífero; 897.500 ha de soja de primera; 538.500 de soja de segunda y 83.600 de maíz tardío.
Los perfiles de suelos continúan transmitiendo tranquilidad y buenas perspectivas para el seguro desarrollo, crecimiento y transcurso de la cosecha gruesa.
Primera semana sin interrupciones en el proceso de cosecha y a ritmo firme con el transcurso de los días. Los departamentos del norte presentaron el mayor grado de avance, un 87 %, en los del centro se logró un 40 % y en los del sur del área de estudio, un 15 %.
No hubo variaciones y se mantuvieron los rendimientos promedios, los cuales fluctuaron entre mínimos de 12 qq/ha y máximos de 28 qq/ha, con algunos lotes de 30 qq/ha, considerados buenos por parte del sector productivo.
Para la campaña 2019/2020, se estimó un rendimiento promedio de 23 y 24 qq/ha.
Un 92 % del cultivo se halló un estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes, un % 6 en estado regular y un 2 % en estado malo. La estabilidad climática y las realidades ambientales, permitieron un normal avance del ciclo del cultivo.
Los primeros rendimientos registrados en el centro – norte del departamento General Obligado, sureste de Vera fueron alentadores, variando entre 55 – 65 qq/ha.
La sanidad detectada fue buena, sin manifestaciones de presencia de enfermedades ni de plagas.
En las áreas de las cuencas lecheras, el ritmo en el proceso de picado – embolsado fue constante y hasta la fecha, lo recolectado con dicho fin, alcanzó el 60 % del total, con un rendimiento promedio que fluctuó entre 11,5 y 13 m/bolsa/ha. con muy buena calidad.
Zonas este-oeste: período en donde la humedad del suelo fue la adecuada, las temperaturas óptimas para el normal crecimiento y desarrollo del cultivo, observándose un adecuado stand de plantas y muy buen control de malezas.
La estabilidad climática y los días soleados favorecerían la calidad de la fibra.
Sin inconvenientes, los cultivares continuaron su crecimiento y desarrollo, en un 80 % en período de floración, con buena disponibilidad de agua útil, stand de plantas adecuado y buena estructura en general, estado bueno a muy bueno de los mismos y no se observaron problemas de malezas.
Finalizó el proceso de siembra de soja tardía (segunda), con aproximadamente unas 538.500 ha implantadas de las 550.000 ha previstas inicialmente, con un incremento de 27.000 ha, en comparación a la campaña pasada.
En los departamentos Nueve de Julio, Vera y General Obligado se sembraron los últimos lotes, algo demorados debido a las condiciones no adecuadas en la cama de siembra: por falta de humedad o por excesos hídricos, según predios o zonas de los mismos.