El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pagó finalmente el total del vencimiento de capital del bono BP21 por 250 millones de dólares. El mandatario no logró las adhesiones necesarias al “reperfilamiento”, por lo que de no saldar la deuda, su administración habría entrado en “default”
Según Kicillof, un fondo de inversión -llamado Fidelity- “no quiso entender la situación financiera de la provincia” y no adhirió a la propuesta inicial. “Estamos denunciando esta actitud, la estamos repudiando”. Aseguró que si la provincia se ve impedida de crecer por sus vencimientos de deuda, no podrá “nunca” afrontar los pagos para cumplir en tiempo y forma con los acreedores.
“El punto central de la cuestión es comprender y recordar por qué estamos acá. Yo asumí hace un mes y algo y me encontré con que este año, y los siguientes hay una cantidad de vencimientos de deuda infernal”, dijo el mandatario bonaerense.
Precisó en ese sentido que sólo este año hay vencimientos por el equivalente a más de 3.000 millones de dólares: “Es un montón de plata que la provincia no tiene, porque dejaron una situación muy complicada en la caja”.
“Hay que ir llevando esta cuestión de la deuda, buscándole una solución, sin por eso como pasaba antes no arreglar las escuelas, o que sigan fundiendo los negocios, las pequeñas y medianas empresas, que la gente no pueda irse de vacaciones porque suben las tarifas”, afirmó Kicillof.
“Les pedimos a los bonistas que esperaran a que avanzara un poco el trabajo que está haciendo (el ministro de Economía) Martín Guzmán en la Nación, y tuvimos una respuesta espantosa”, se quejó.