Kirk Douglas tuvo su primer contacto con el mundo de la actuación en la escuela primaria y en el instituto de educación secundaria (Wilbur Lynch High School), donde ganó una medalla por recitar el poema Across the Border. En ese mismo tiempo se inició en la oratoria y el debate, uniéndose al equipo del instituto. A los 17 años terminó la secundaria y quiso matricularse en la universidad, pero su salario de dependiente (por aquel entonces trabajaba en unos almacenes) no le alcanzaba para ingresar. Aun así, Douglas decidió solicitar su admisión en la St. Lawrence University de Nueva York directamente al decano, que le aceptó en la universidad a cambio de que Douglas trabajase allí como jardinero (posteriormente como bedel) mientras estudiase allí. Douglas estuvo en St. Lawrence desde 1935 hasta 1939, donde se graduó en letras con un título de «Bachelor of Arts» (equivalente al actual grado en Filosofía y Letras).
En esos cuatro años de universidad, Douglas además destacó en otras actividades, en especial en lucha libre, llegando ser campeón invicto del St. Lawrence y ganador del "Campeonato de Lucha Libre Universitario". Se dedicó también al debate y al teatro, uniéndose al grupo de teatro de la universidad, The Mummers. Durante un verano participó en un número teatral de una feria, actuando como luchador, como el propio Kirk Douglas describió: «Teníamos un número donde yo era un chico del público que salía al escenario para enfrentarse al campeón. A efectos interpretativos fue un gran aprendizaje».
Tenés que leerFalleció Kirk DouglasTras graduarse en la Universidad de St. Lawrence consiguió una beca en la Academia Norteamericana de Arte Dramático de Nueva York, lugar en el que permaneció hasta 1939, con 23 años de edad. Durante su estancia allí, Douglas impartía clases de arte dramático a los niños del centro y, durante los veranos, trabajaba en teatros veraniegos como actor de repertorio.5 Fueron sus inicios en la actuación como profesional, y fue durante esta época en la que Kirk Douglas adoptó su nombre artístico. Fue también allí, en la Academia Norteamericana de Arte Dramático, donde Douglas conoció a Lauren Bacall.
Douglas centró entonces su objetivo en los escenarios teatrales de Broadway, donde debutó en 1941 en una obra llamada Spring Again, protagonizada por sir Charles Aubrey Smith, y en 1942 participó como regidor en la obra Las tres hermanas de Katharine Cornell. Ese mismo año fue llamado al servicio militar, y se incorporó a la Armada de los Estados Unidos, incorporándose a la escuela de guardamarina de la Notre Dame University, donde se graduó como alférez. Acto seguido fue destinado a la Unidad Antisubmarina 1139, en el océano Pacífico, donde estuvo dos años (1942-1943) como oficial de telecomunicaciones.
Cuando fue licenciado con honores, volvió a Nueva York y en casa de una amiga hojeó una revista (Life), donde aparecía una hermosa modelo y actriz llamada Diana Dill, con quien además había coincidido en la American Academy of Dramatic Arts, y con quien se casaría el 2 de noviembre de 1943. La pareja tuvo dos hijos: Michael y Joel.
Tras varios años de teatro, en 1949 su carrera da un giro cuando interpreta a un boxeador en la película El ídolo de barro, de Mark Robson, donde por su realista interpretación es nominado al Óscar al mejor actor. Douglas había rechazado un papel en El gran pecador, con Ava Gardner y Gregory Peck (y un sueldo de 50.000 dólares), para apostar por la producción de Stanley Kramer y Robson. La película, que ganó un Óscar al mejor montaje, fue la que sirvió a Douglas para mostrar, por primera vez, su carácter a la hora de actuar.
Kirk se hizo conocido por su temperamental carácter y sus ideas de izquierda, que le granjearon enemistades dentro de la alta cúpula de Hollywood y frenaron su carrera y reconocimientos justificados. Pero su carácter no solo le granjeó enemigos; el director de cine Vincente Minnelli dijo que «trabajar con Kirk Douglas en las tres películas que hicimos juntos fue, hasta donde me alcanza la memoria, la colaboración más gratificante y estimulante de mi vida».El mismo director llegó a definir a Kirk Douglas en su faceta profesional: «Kirk Douglas se caracteriza por un vigor y una energía incansable, por su disposición a probarlo todo y por el desinterés absoluto que le merece su aspecto físico. Eso de ser el héroe guapo le trae sin cuidado. Su entusiasmo y su entrega al proyecto son contagiosos»,
Tenés que leerEl desgarrador adiós de Michael Douglas a su padreEn 1951, Diana Douglas solicitó el divorcio a Kirk Douglas, debido a las infidelidades del actor, que tuvo conocidos romances con Pier Angeli, Ann Sothern, Marlene Dietrich, Rita Hayworth, Gene Tierney, Joan Crawford, Patricia Neal, Mia Farrow y Faye Dunaway, como el propio Douglas escribe en su autobiografía.Además, Douglas tuvo romances tras su divorcio con, entre otras, Terry Moore y Debbie Reynolds. El 29 de mayo de 1954, Douglas se casa por segunda vez con Anne Mars Buydens, una agente de prensa a quien conoció durante el rodaje de Act of Love, y con quien tendría dos hijos, Peter y Eric.
Fue candidato en tres ocasiones a un Premio Óscar de la Academia, aunque nunca lo ganó debido a sus tendencias izquierdistas conocidas; sin embargo, fue galardonado en 1996 con un Oscar honorífico por sus 50 años de dedicación a la industria del cine.
Muchas películas en las que trabajó son épicas, pero la más famosa y destacable es su actuación en Espartaco, de Stanley Kubrick, junto con las no menos magistrales actuaciones de Peter Ustinov, Charles Laughton, Laurence Olivier y Jean Simmons.
Otra de sus famosas actuaciones y para la que fue candidato al Mejor Actor por tercera vez fue en El loco del pelo rojo, donde caracteriza al pintor Vincent Van Gogh y donde actuó Anthony Quinn. Curiosamente, Quinn sí ganó la estatuilla, como Mejor Actor secundario, por unos pocos minutos de actuación.
Dio a cada uno de sus filmes una marca distintiva donde la fuerza de sus actuaciones daba a cada film un renombre. De hecho, se decía de él que daba lo mejor de sí en papeles que requiriesen un temperamento fuerte o una poderosa presencia, y que, en actuaciones más simples, su trabajo resultaba forzado. Douglas, además codirigió varias películas y sostuvo un singular pleito con Stanley Kubrick por la producción de algunas de sus películas, lo que le restó fuerza en Hollywood y de hecho le sesgó en todas las nominaciones a premios.
Intervino tanto en comedias como en dramas y ha encarnado personajes duros pero de fondo muy vulnerable: El ídolo de barro (M. Robson, 1949), Brigada 21 (W. Wyler, 1951), Cautivos del mal (V. Minnelli, 1952), Otra ciudad, otra ley (J. Kanew, 1986), Oscar (J. Landis, 1991), Diamonds (1999). Ha participado en numerosas producciones para televisión y en 1988 publicó su autobiografía, El hijo del trapero.
En 1996, la Academia le concedió el premio Óscar honorífico, en recuerdo del cincuenta aniversario de su debut en la gran pantalla. Douglas recibió el galardón de manos de Steven Spielberg. Douglas, que apenas podía hablar, dijo: «Veo a mis cuatro hijos. Están orgullosos del viejo hombre. Yo también estoy orgulloso. Orgulloso de haber sido parte de Hollywood durante cincuenta años».
Fue uno de los actores más longevos de Hollywood. El 13 de febrero 1991 sobrevivió a un accidente en helicóptero en el que fallecieron dos personas. En 1994 le sobrevino una trombosis leve que le provocó serios problemas psicomotores (paraplejia). Y en 1996 sufrió una apoplejía que le privó del habla y le dejó prácticamente paralizado. A pesar de ello, habitualmente se le ve junto a su hijo Michael Douglas en algunos eventos del medio.
En 1981, el presidente Jimmy Carter le impuso la Medalla Presidencial de la Libertad por «trabajar como emperador de buena voluntad» y «compartir con otros pueblos su amor por el cine y por su patria». En 1982, Douglas, centrado en su labor social, prestó declaración ante el Congreso para informar sobre conductas discriminatorias y maltrato a ancianos, tema sobre el que había escrito un editorial en el New York Times. Ese mismo año fue invitado por Muhammad Zia-ul-Haq, presidente de Pakistán, a visitar hospitales de la Cruz Roja y campos de refugiados afganos.
En 1983, el actor ganó el Premio Jefferson por sus servicios a la comunidad, y en 1986, mientras presentaba los actos del centenario de la Estatua de la Libertad, fue galardonado con la Medalla de Honor de la Isla de Ellis, por «alcanzar el éxito sin dejar de defender los valores de su minoría». La American Academy of Dramatic Arts le galardonó con un premio en el que puede leerse: «Su talento empieza en la planta de sus pies y acaba en un espíritu que puede llegar más allá de las estrellas». Igualmente, en 1989, Douglas obtuvo el premio D. W. Griffith Career Achievement Award, y en 1991 el AFI Lifetime Achievement Award. Kirk Douglas fue también nombrado Caballero de la Legión de Honor en 1985, por sus servicios artísticos al país galo.
Los Simpsons: el legendario “Oblígame”
Pero entre sus papeles hubo uno muy particular: la animación que le hicieron en 1996 en la serie "Los Simpson".
Durante el capítulo “El día que murió la violencia”, el actor fue invitado para interpretar al vagabundo Chester Lampwick, quien es el verdadero creador de "Tomy y Daly" (la serie de dibujos animados que se transmite en Springfield). Cuando Douglas interpretó a este personaje tenía 50 años y grabó junto a Nancy Cartright quien daba voz a Bart Simpson; en el libro que ella escribió titulado "Mi vida como un niño de diez años" contó que para la escena en la cual Lampwick le dice a Bart que él había creado "Tomy y Daly", una de las líneas de Douglas debió ser repetida tres veces, ya que no él no podía leer bien su libreto.
El episodio que pertenece a la séptima temporada relata la historia de un creador a quien le robaron su obra maestra, que ahora se transmite en televisión sin que él sea reconocido. Bart lo ayuda a recuperar el crédito, por lo que Chester Lampwick tiene que vivir junto a la familia Simpson por un tiempo sin que ellos estén muy de acuerdo. El imperativo “¡Oblígame!” que Douglas le dice al abuelo Abraham Simpson durante una discusión se hizo emblemática entre los fans de las serie de Matt Groening.