Vecinos de Iriondo reclaman por mayor seguridad y mejoras barriales en general
Se trata de un grupo autoconvocado, que realiza reuniones períodicas en las que se exponen los problemas del barrio y tratan de ver de qué forma pueden solucionarlos. Entre otras cosas, sufren reiterados hechos de inseguridad (la mayoría por falta de iluminación), inconvenientes derivados del mal estado de las calles y la proliferación de microbasurales.
Pablo Aguirre Convocatoria. Vecinos del barrio Iriondo, reunidos en el Club Juventud Unida. Requieren del apoyo de la mayor cantidad de gente posible para poder hacer sentir sus reclamos. Insisten con la necesidad de que reactive la obra del plan integral de mejora barrial.
Vecinos autoconvocados del barrio Iriondo de Santo Tomé vienen realizando reuniones periódicas, en las que abordan los distintos problemas que aquejan a dicha zona (ubicada al noroeste de la ciudad) y a la vez establecen los pasos a seguir, para encontrar la solución que cada uno de ellos amerita. Días atrás, justamente, se llevó a cabo la tercera de estas convocatorias, la segunda que se realizó en las instalaciones del club Juventud Unida (la primera vez se reunieron en una casa de familia), institución deportiva situada en la conjunción de las calles República de Chile y Corrientes, a pocos metros del predio de Cha Roga. Durante el desarrollo de esta actividad, de la que también participaron los concejales Florencia González y Julián Ilchischen, el grupo acordó realizar una reunión cada veinte días y mantener un encuentro de similares características con todos los ediles cuando estos inicien el periodo de sesiones de este año.
Consultada por El Litoral, María Inés Martínez, una de las referentes de los autoconvocados, aclaró que las reuniones son hechas para que el vecino pueda exponer abiertamente los diversos problemas por los que atraviesa el barrio, como ser la falta de iluminación, los hechos de inseguridad y el mal estado de las calles. “Tenemos pocas luminarias y eso implica inseguridad”, expresó Martínez. La verdad, dijo, “es que la inseguridad que estamos sufriendo en esta zona de Santo Tomé está muy presente, con episodios a cualquier hora del día”. “Por eso una de las cosas que reclamamos es que las fuerzas policiales hagan un patrullaje más intensivo, ya que realmente no se puede salir y a toda hora pueden darse robos o asaltos”, explicó la vecina. “Nos levantamos para ir a trabajar y tenemos que cuidarnos que nos no pase nada”, agregó.
Pablo Aguirre Emblemática. Esquina de Corrientes y República de Chile. La remodelada fachada del antiguo almacén de ramos generales, es un vestigio de la rica historia de unos de los barrios más tradicionales de Santo Tomé. Los problemas actuales.
Emblemática. Esquina de Corrientes y República de Chile. La remodelada fachada del antiguo almacén de ramos generales, es un vestigio de la rica historia de unos de los barrios más tradicionales de Santo Tomé. Los problemas actuales. Foto: Pablo Aguirre
Problemas que se agudizan
Cuando se le preguntó a Martínez por el plan integral de mejora barrial, una obra que actualmente lleva entre cinco y seis meses sin solución de continuidad y que en su momento motivó la correspondiente cobertura de parte de este medio (ver Antecedente), manifestó que la respuesta del municipio sigue siendo la misma, que es un problema interno de la empresa constructora a cargo de los trabajos (es decir Ponce Construcciones). “La obra está paralizada, no hay ningún avance, y eso repercute en la vida de los vecinos, sobre todo en lo cotidiano, porque llueve, por ejemplo, y no pueden salir de sus casas”, acotó María Inés.
Con las lluvias, siguió explicando, “quedamos aislados de la ciudad, totalmente, porque no entran los remises ni las ambulancias”. “Ni siquiera los autos particulares podemos sacar”, amplió. “Hace poco la intendenta dio a conocer el plan de sesenta días de acción, el que por ahora no está a la vista en Iriondo, porque seguimos en la misma situación de antes, ligada a la obra”, prosiguió. Después recordó el tema de la basura, otro de los puntos tocados en la nota anterior:
El problema, dijo, es que a medida que pasa el tiempo se van haciendo cada vez más grande y más olorosos, como “uno muy grande en calle Juan José Paso y Santa Fe, a pocos metros de la Dirección de la Policía Municipal”. Ese, aclaró, “se fue agigantando más y más, por lo que ahora ya es un basural enorme, en el que no se puede estar cerca por los olores y mucho más con este calor”. Como grupo autoconvocado, los vecinos de Iriondo participaron de las manifestaciones realizadas frente al Concejo y el Palacio Municipal semanas atrás. “Fuimos con otros barrios autoconvocados de la ciudad y esperamos que con la visibilidad de los problemas de Santo Tomé el municipio haga algo al respecto”, redondeó.
Para interiorizarse acerca de la problemática del barrio Iriondo y del plan integral de obras previsto para el sector (que incluye mejoras en Villa Libertad y Santo Tomás de Aquino), puede leerse “Santo Tomé: vecinos preocupados por la parálisis en una obra de mejoras barrial”, nota publicada por El litoral en su edición del 27 de enero de 2020. El referido emprendimiento, presupuestado originalmente en 142 millones pesos (a ser financiados en un 77% por la Nación y en un 23% por la Provincia), forma parte del Plan Nacional Santa Fe Hábitat.