Luis Osvaldo “Coni” Cherep es periodista desde hace años en la ciudad de Santa Fe y fue funcionario durante el gobierno socialista. Actualmente, está abocado por completo a la puesta en marcha de un nuevo proyecto de comunicación, una productora audiovisual de contenidos periodísticos que tiene su estudio en calle 1° de Mayo al 2100, en el sector sur de la zona céntrica. A pocos días del estreno, su empresa fue blanco de un extraño robo, con ribetes que permiten sospechar un atentado intimidatorio.
“Todavía no sabemos bien cómo pasó. Lo que sí puedo decir es que el lunes, entre las 16.30 y las 19, alguien atravesó dos puertas de rejas o saltó por los techos y luego barreteó la puerta de REC (así se llama la productora). Rompió dos cerraduras para entrar y sólo se llevó una notebook. Es muy llamativo. El pasillo tiene más de 30 metros y este es el último de cuatro departamentos. No tocaron otra puerta. Sólo la nuestra. Yo conozco este lugar desde hace muchos años, porque era la casa de mi abuelo. Nunca hubo asaltos acá, hasta ahora”, manifestó Cherep.
“Al lado de la notebook -agregó- había un montón de cosas de mucho más valor: una consola, la computadora de estudio, micrófonos profesionales. Uno de los cajones abiertos estaba lleno de herramientas, un botín para cualquier ladrón... Pero no se llevaron otra cosa. Tampoco desordenaron. Se tomaron su tiempo para desenchufar la máquina y llevarla con cuidado. La notebook tenía diez días de uso y sólo contenía archivos vinculados a la musicalización”.
El caso está siendo investigado por la fiscal Mariela Jiménez, quien ya dispuso una serie de medidas.
“Yo no tengo ningún elemento como para poder acusar a nadie. Sería muy osado de mi parte hacerlo. Lo cierto es que todo se da en un contexto de mucha tensión política. Estoy publicando cosas que pueden molestar a algunas personas, a algunos sectores. Puede que mi opinión cause irritación. Yo no puedo decir que sea un atentado o una intimidación. Afirmarlo sería irresponsable, pero hasta los investigadores concuerdan en que es un hecho con esas características”, expresó el periodista.
Para Cherep, el daño material es lo de menos. “Tuvimos que arreglar la puerta, pusimos cámaras y alarma. A la notebook la repusimos inmediatamente, gracias al secretario general del gremio Luz y Fuerza, a quien no conocía. Se enteró de lo que había pasado y nos obsequió un equipo nuevo. Lo que sí preocupa mucho es la audacia de alguien que hizo algún tipo de inteligencia. ¿Cómo sabía que no había nadie? Eso nos pone en un lugar de temor... la idea de que pueda volver. El periodista también agradeció las reacciones de solidaridad que generó el hecho. “Mucha gente me llamó. Me asusté mucho con lo que pasó, aunque algunos sectores crean que estas cosas pueden ser autogeneradas por algún tipo de especulación. Y pienso que si esto me pasó a mí, que tengo la suerte de tener muchos conocidos y ser una persona pública (el Concejo emitió un comunicado, la Cámara de Diputados de la provincia también), qué le puede suceder a otros colegas. Si esto fue un aviso, pueden pasar cosas más graves aún. Ojalá sea un robo común y se pueda demostrar. Me dejaría más tranquilo, pero la pregunta es qué pasa si no es así. No se puede naturalizar hechos como este, porque se estaría dejando abierta una peligrosa puerta. No se puede permitir”, concluyó.