El sector agropecuario argentino implementó -desde la cero hora de este lunes y hasta las 24 del jueves 12 de marzo- un cese de comercialización de granos y hacienda para faena, la primera medida de fuerza en la gestión de Alberto Fernández, una acción que no se daba hace exactamente 5 años.
La protesta se produce en una semana clave: en medio de Expoagro, una de las mega muestras del campo; y atravesada por el 12° aniversario del inicio de la pelea contras las retenciones móviles.
También se produce con el ruralismo dividido, ya que mientras CRA, SRA y Coninagro alientan el paro desde Federación Agraria Argentina liberaron a sus representados para que cada uno actúe según su preferencia. Más explícita fue la Federación de Cooperativas Federadas que consideró el reclamo como “una medida netamente política, que no expresa el mandato de las bases”.
Por el momento no hay acciones previstas en la provincia de Santa Fe por parte de los ruralistas locales, quienes a través de las sociedades rurales han manifestado ante Carsfe la adhesión al paro. Fuentes del sector indicaron a Campolitoral que se encuentran trabajando para concretar una reunión de la Mesa de Enlace provincial. Mientras tanto están programadas algunas reuniones informativas con productores. Una será en la tarde este lunes a partir de las 19 en la Sociedad Rural de Rafaela con la presencia del presidente de CRA, Jorge Chemes. Otra, a la misma hora, se producirá también en la rural de Reconquista. “No estamos de acuerdo con el sr presidente de la Nación cuando dice que el campo siempre quiere ganar, lo que queremos es no siempre perder”, manifestaron desde la cabecera de General Obligado en la invitación cursada a los productores. “Queremos escucharlos a ustedes, y debatir sobre la actual situación y lo que nos depara un futuro produciendo a pérdida y ser excluidos de la zona productiva del país. No es nuestra vocación vivir en las rutas ni la confrontación permanente, sin embargo tampoco ser los hijos bobos de un entramado social que toma como normal los subsidios políticos y la expoliación al sector productivo”, invitaron.
Mientras tanto, el Movimiento Nacional de Productores Autoconvocados inició este lunes un “casillazo” con la partida desde Charata (Chaco) y Pehuajó (Buenos Aires) de sendas caravanas de casillas rurales que, al cumplirse 12 años del anuncio de la Resolución 125, confluirán mañana en San Nicolás para celebrar una asamblea y decidir la estrategia para lo que consideran será una lucha prolongada contra el gobierno nacional.
“El casillazo surge de la necesidad de visibilizar la Asamblea; empezamos hace dos meses a organizarla y parecía una locura, pero hoy es una realidad”, dijo en plena marcha desde Villa Minetti Carlos Fernández Favaron. El convoy, compuesto por unos 14 vehículos entre casillas, cisternas de agua y combustible, tenía previsto arribar en la tarde de este lunes a Arocena (departamento San Jerónimo), donde se sumarían más participantes. Pero por las demoras en el arranque estimaron que pernoctarán en Nelson y el martes continuarán hacia San Nicolás. En Rosario también se acoplaría una columna con manifestantes llegados desde Córdoba. “Los hacemos para sumar a la unidad; que la Mesa de Enlace sepa que tiene nuestro respaldo, pero también que debe estar a la altura de las circunstancias”, resumió el productor.
Previo al inicio de las acciones, CRA emitió un comunicado en nombre de “las entidades de la Comisión de Enlace que han resuelto expresar su disconformidad con las medidas anunciadas” por el gobierno nacional, en el que solicitan a las bases el cese de comercialización de granos con destino a industria y exportación, y de ganado vacuno para faena, desde las 0h del día Lunes 9 de Marzo hasta las 24h del día Jueves 12 de Marzo. Y aclaran que “quedan exceptuados de esta medida los productos perecederos y, dada la inminencia de estas medidas, pedimos que continúe el normal desarrollo de las actividades programadas con antelación tales como exposiciones, remates, etc”.
También se dirigieron al “público en general”, a quienes informan que “esta decisión no provocará aumentos sobre los precios ni desabastecimiento”, sino que “es una manera de hacer escuchar el largo reclamo, ya que con esta carga tributaria no podemos producir y, de persistir esta situación, el futuro de la familia agropecuaria se verá muy comprometido”.
Desde Federación Agraria Argentina manifestaron que “el sector no resiste más carga impositiva y si bien destacamos la segmentación lograda como política pública, la misma no representa el espíritu de frenar el desarraigo y que más productores queden fuera del sistema productivo”. Sin embargo no adhieren orgánicamente al paro, sino que prefirió “resguardar la unión de la entidad y deja a sus bases libres de acción”.
A pesar de la medida de fuerza, el ingreso de hacienda al Mercado de Liniers alcanzó este lunes una cifra extraordinaria. Mientras lo normal, durante los últimos meses, fueron entradas no mayores 200 animales para un lunes para la rueda de negocios de hoy se acumularon 2.516 cabezas.
Divididos, como la última vez
Hace exactamente 5 años que parte de la Mesa de Enlace lanzó el último paro agropecuario, durante el mandato presidencial de Cristina Fernández de Kirchner. Lo convocaron SRA, CRA y Coninagro, tal como ahora, con la ausencia de Federación Agraria Argentina, por entonces al mando de Omar Príncipe.
Aquella vez también fue un cese de comercialización de granos y hacienda en rechazo de la política oficial hacia el agro. Y fue la primera ocasión en la que se implementó una medida sin la adhesión de una entidad.