Hubo un paréntesis en el crecimiento de los contagios por coronavirus en Rafaela

Juan Carlos Scalzo

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De acuerdo al relevamiento que lleva a cabo el Ministerio de Salud de la Provincia, el Departamento Castellanos ocupa el tercer lugar entre los más infectados por el virus causante de la pandemia, luego de Rosario y La Capital. En la jurisdicción del centro-norte santafesino todos los contagiados tienen residencia en su ciudad cabecera, pero dos de ellos se encuentran internados en centros médicos de las provincia de Córdoba y Buenos Aires.

La cronología de los casos indica que el primero fue detectado el sábado 21 de marzo (una mujer, que ya obtuvo el alta médica) y tres días después se informó que otras dos personas más eran portadoras de coronavirus. El 28 de marzo, la cifra dio un saltó con los resultados de 4 test que dieron positivos.

Dos días más tarde, apareció uno más y al día siguiente otros tres. En la primera jornada de abril no hubo novedades, pero en la segunda se supo de cuatro infectados más, llevando el número a 17 (en los reportes oficiales se publicaban 18, pero se contaba el resultado de una contraprueba que volvió a dar positivo). A partir de ahí y hasta el último martes no conocieron nuevos resultados casos de contagios por CoViD-19 lo que provocó una sensación de tranquilidad, aunque sin relajamiento alguno de parte de las autoridades gubernamentales y funcionarios de la salud locales y provinciales, debido a que se aguardaban los resultados de una docena de hisopados que fueron enviados para analizar a los laboratorios habilitados.

Un dato a tener en cuenta es que desde el domingo 1º de marzo hasta el viernes pasado regresaron a Rafaela 1.214 personas que debieron realizar el aislamiento social, preventivo y obligatorio en función del Decreto establecido por el Gobierno Nacional. De ese total, 779 ya cumplieron con la cuarentena de rigor y todavía quedan 435 que deben permanecer aislados y se espera el resultado de una decena de test que fueron enviados a los laboratorios habilitados.

Control conjunto

En la mañana de ayer, el Concejo municipal rafaelino autorizó, en sesión extraordinaria, al departamento Ejecutivo a redireccionar fondos para la atención de las necesidades que impone la pandemia del coronavirus. Para ello, el Cuerpo legislativo tuvo que votar la modificación de dos Ordenanzas: la que estableció la Emergencia de Salud Pública y la de Obras Menores. Ésta última aportará recursos cercanos a los $ 40 millones, y serán gestionados ante la Secretaría de Integración y Fortalecimiento Institucional del Gobierno de la Provincia de Santa Fe.

Por la primera, la gestión que encabeza Luis Castellano, podrá realizar la compra de forma directa de bienes e insumos necesarios para hacer frente a la emergencia, entre ellos camas y equipamiento para los Centros de Aislamientos, dispuestos en los clubes 9 de Julio, Ben Hur y Atlético. Por la segunda, podrá afectar a gastos corrientes los recursos que envía la Provincia para Obras Menores.

Como paso previo, a la extraordinaria, hubo un encuentro en el despacho del Intendente Luis Castellano con la mayoría de los concejales, y funcionarios de su gestión, en la que se consensuaron los proyectos que fueron aprobados en la víspera, y se acordó también la participación de las ediles Alejandra Sagardoy y Marta Pascual, ambas del bloque de Juntos por el Cambio, para que fiscalicen toda contratación o compra que se efectúen en el marco de las dos Ordenanzas.