La intolerancia hizo escala en Alto Verde.
“Si vemos que vas a trabajar te vamos a denunciar”, reza una nota anónima que dejaron en la casa del penitenciario.
La intolerancia hizo escala en Alto Verde.
Así como hay caso de médicos, enfermeros y demás personal de salud que, por temor al contagio del Covid 19, están siendo acusados injustamente, ahora le llegó el turno a un guardiacárcel (un hombre de 36 años) que vive en el citado distrito costero.
La primera luz de alarma se encendió durante la mañana del miércoles, cuando un hermano del penitenciario descubrió que sobre una reja de la casa donde viven (en la manzana 3), alguien había colocado un papel. Y al acercarse para ver de qué se trataba descubrió lo peor.
* “Por qué no te quedas en tu casa? Los vecinos no queremos contagiarnos de nada. Todos los días vas y venís con barbijos, pero no nos asegura que no te contagies. Si vemos que vas a trabajar te vamos a denunciar”.
Como es lógico suponer, apenas unos minutos después, el guardiacárcel (que se encontraba en su lugar de trabajo) ya estaba al tanto de lo que había sucedido.
Y pasado el mediodía, cuando retornó a su casa, se encontró con un grupo de vecinos que lo estaban esperando. “Me decían que no habían sido ellos los que dejaron la nota, que no habían visto nada, que estaban tan sorprendidos como yo”, dijo el agente en diálogo con El Litoral.
Pero el incidente no terminó allí.
“Es que durante la noche del miércoles el tema prosiguió en un portal de noticias donde una mujer se lanzó a acusarme públicamente. Ella decía que sabía que a mí me había dado positivo un análisis de Covid 19. Que me iba a denunciar y a hacer un juicio”, narró el afectado.
“Le aclaré que yo jamás me hice un análisis. Lo que nos hacen a todos los trabajadores penitenciarios, por protocolo de seguridad, es tomarnos la temperatura cuando ingresamos. Eso es todo”, precisó.
“Primero le respondí por privado. Pero luego lo puso en público. Le pedí que se retracte porque todo lo que está diciendo es mentira. Y todo esto no solo me duele a mí, sino que está afectando mi trabajo y mi familia”, agregó.
“Lo único que quiero es estar tranquilo. Anoche casi que no puede dormir. Estoy siendo injustamente atacado. Me duele la falta de empatía. La gente no tiene noción de cómo es mi trabajo. Quiero llevar algo de paz a mis compañeros de trabajo y también a mi familia. Hace 10 años que soy penitenciario y jamás me tocó pasar por algo así”, sentenció.
Tras tomar conocimiento de los hechos, la Fiscalía Regional se contactará con la víctima a los efectos de determinar los pasos a seguir