Dirigentes de Juntos por el Cambio de Santa Fe solicitan la flexibilización de actividades económicas -sosteniendo las medidas sanitarias y de distanciamiento social- con el objetivo de proteger la salud de los santafesinos, pero también cuidar los puestos de trabajo y las Pymes.
En una misiva dirigida al gobernador Omar Perotti por parte de José Corral; y al intendente Emilio Jatón por los concejales Inés Larriera y Carlos Pereira, se propone que las actividades comerciales minoristas en general, la construcción privada, albañilería, peluquería, etc., vuelvan a funcionar con las mismas condiciones que lo vienen haciendo, por ejemplo, los supermercados, negocios vinculados al rubro alimentario, ferreterías y farmacias. Y para eso, propone la implementación de horarios reducidos y escalonados -que deberán ser instrumentados por los gobiernos locales- para evitar el congestionamiento en el transporte público.
“Hemos ingresado en una etapa de ‘Cuarentena Administrada’, en donde hay que seguir insistiendo y trabajando para sostener las medidas de distanciamiento social y sanitarias que han resultado exitosas; pero se vuelve necesario flexibilizar ciertas actividades con el objeto de resguardar la continuidad de las fuentes de empleo y las Pymes, y evitar una crisis económica de consecuencias impredecibles”, sostienen los dirigentes de Juntos por el Cambio.
Se señala además que lamentablemente la ayuda económica prometida desde el gobierno nacional a los sectores que han debido suspender sus actividades se ha demorado, no ha llegado o lo ha hecho en forma insuficiente. “Hoy, los ingresos de los sectores asalariados vinculados a la actividad privada, se encuentran seriamente resentidos afectando el sustento diario de muchas familias; pero también se juega la continuidad de cientos de miles de empleos en todo el país y la supervivencia de miles de Pymes que no pueden afrontar el pago de salarios, impuestos y alquileres. Asimismo, autónomos, cuentapropistas, emprendedores y profesionales han visto seriamente restringidos sus ingresos, no habiendo recibido ninguno de los planes de subsidios del gobierno nacional”, apuntan.
Luego indica que en la Provincia de Santa Fe, donde en las últimas 48 horas no se han reportado casos positivos, “nos encontramos con un panorama donde más de 320 localidades no han registrado contagios de COVID-19. Otras ciudades han tenido alguna circulación comunitaria -por cierto restringida-; y otras, como en el caso de la Santa Fe Ciudad, llevan hasta el lunes 18 días sin casos positivos, habiendo completado más de un ciclo de contagio (14 días)”.
En ese punto, los dirigentes de Juntos por el Cambio aseguran que “es posible y necesario la habilitación paulatina de ciertas actividades económicas de bajo riesgo, haciéndolo con prudencia y bajo la premisa de que se realicen cumpliendo estrictos protocolos que respeten todas las medidas que se han adoptado hasta el momento, relacionadas con el distanciamiento social, higiene, y usos de protectores y barbijos”.
Remarcan luego que “estamos convencidos que las actividades comerciales minoristas en general pueden comenzar a funcionar, bajo las mismas condiciones que lo vienen haciendo supermercados, negocios vinculados al rubro alimentario, ferreterías y farmacias. Es decir, cumpliendo los protocolos relacionados con el distanciamiento de los clientes, evitando la concentración del público y manteniendo el uso de barbijos o máscaras faciales”. En ese sentido, marcan que “hay que considerar que la gran mayoría de estos comercios implican niveles de concentración de clientes muy inferiores a los que registran los supermercados; por ejemplo: tiendas, librerías, mueblerías, electrodomésticos y tantos otros rubros se encuentran en mejores condiciones que las grandes superficies para administrar la afluencia de clientes, el ingreso y la atención de los mismos”.
En la nota a Omar Perotti, por parte de José Corral; y a Emilio Jatón por parte de Inés Larriera y Carlos Pereira, se sugiere que las nuevas aperturas “se deberían autorizar -en una primera etapa- en horarios de atención al público restringidos: 5 ó 6 horas; a partir de las 10 u 11 horas de la mañana, de manera de evitar que en el transporte público confluyan en el mismo horario con quienes concurren a trabajar a bancos, supermercados, rubros alimentarios y farmacias; y siempre en horario corrido, como forma de evitar que los propietarios y empleados deban trasladarse ida y vuelta dos veces en el día”.
Asimismo, desde los gobiernos locales “se deberá promover un menor uso del transporte público por colectivos (en las ciudades que cuentan con el mismo); promoviendo como forma de traslado la caminata, la bicicleta, la moto y automóvil, y quienes tengan la posibilidad económica de hacerlo: taxis y remises. Y se deberá incrementar la cantidad de colectivos en circulación, hoy sumamente restringida por la escasa cantidad de pasajeros diarios”.
En la nota se sostiene que “se deberían autorizar todas las actividades relacionadas con pequeñas reparaciones tanto en hogares como en empresas, vinculadas con plomería, instalaciones eléctricas y de gas, y arreglos de albañilería; todas ellas bajo estrictos protocolos de higiene y distanciamiento que deberán ser aprobados por las autoridades sanitarias”. Y que al igual que lo han comenzado a hacer otras provincias (caso Entre Ríos) se debería habilitar la actividad de contadores y abogados, bajo condiciones de atención al público restringidas.
“Con relación al rubro de la construcción creemos necesario avanzar en forma urgente entre el Estado, las empresas y el sindicato de obreros, con el objeto de fijar protocolos que permitan retomar gradualmente esta actividad, al estilo de lo que ya se viene haciendo con las obras públicas de los Estados”, señala la nota.
Por último, ciertas actividades vinculadas con la salud y el cuidado personal deberían ir también retomándose, tal el caso de kinesiología, podología, peluquería y cosmética. “Al respecto también es fundamental que las autoridades sanitarias acuerden con sindicatos, cámaras empresarias y colegios profesionales las pautas de higiene a seguir y los protocolos vinculados con la atención al público. En este sentido, desde estos sectores han venido trabajando y presentando a autoridades provinciales y locales los lineamientos y condiciones que se comprometen a cumplir”, remarcan desde Juntos por el Cambio.
Por último, indican que, “como lo señalan especialistas y epidemiólogos, hasta tanto no se encuentre una vacuna, el riesgo de que los contagios así como pueden reducirse durante ciertas etapas, pueden volver a incrementarse en otras, según como se manejen los criterios vinculados con el aislamiento y la habilitación de actividades. Por lo tanto, es necesario ir autorizando actividades económicas bajo la premisa de la intermitencia, es decir, que en momentos donde los contagios claramente se encuentran a la baja -como sucede hoy en Santa Fe- se puede flexibilizar la apertura; pero si los casos llegan a repuntar en ciertos momentos, se deberá volver atrás con estas medidas”.