Utilizaban "información privilegiada" para entraderas en zonas rurales

El fiscal Alejandro Benítez imputó este miércoles a un policía acusado de encabezar -junto a otro hombre- una asociación ilícita que se valió de la información de cambios de guardias y “zonas liberadas” para concretar media docena de entraderas en propiedades de la zona rural de los departamentos La Capital y Las Colonias. Hasta ahora son cinco los detenidos, y hay un número igual de personas pertenecientes a la banda aún sin identificar.

Diego Sebastián Gil (42) y Julio Ramón Helguero (38) serían los jefes del grupo, encargados de la coordinación de los -al menos seis- ataques a diferentes establecimientos y casas de familia de San Agustín, Colonia San José y zonas aledañas (Las Colonias); pero también en las afueras de Santo Tomé y Sauce Viejo (La Capital). El primero, miembro de las fuerzas de seguridad, es para la fiscalía quien proveía información relacionada con la presencia de la policía en las distintas zonas.

Tres jóvenes de entre 19 y 22 años fueron también imputados, estos en carácter de “miembros” de la banda, ante la jueza de la IPP Rosana Carrara. Se trata de Alexis Joel G., Celeste Magalí B. y Alexis Damián Figerero. Este último, representado por el abogado Juan José Patiño, consintió la prisión preventiva en vistas de un posible acuerdo de juicio abreviado. Lo mismo hizo Helguero, cuya defensa técnica está en manos del penalista Martín Peón.

En el caso de los tres miembros restantes de la asociación ilícita, sus defensas técnicas están en manos de los Dres. José Ignacio Mohamad -por el policía Diego Gil-, Héctor Tallarico -por Celeste B.- y Mario Guedes del Servicio Público de la Defensa (SPPDP) -por Alexis G.-. El fiscal Benítez solicitó una audiencia para tratar las medidas cautelares, ya que pedirá la prisión preventiva para cada uno de los imputados. La misma se celebrará el viernes en horario a confirmar por la Oficina de Gestión Judicial (OGJ).

“Marcaban propiedades”

La banda criminal está acusada de haber cometido seis entraderas entre el 10 de abril y el 7 de mayo, y utilizando la información de “la presencia policial de la zona”, “determinaron los momentos y horarios a llevar a cabo los delitos y marcaban propiedades”.

La primera fue en una empresa que se encuentra en inmediaciones a la Autopista Santa Fe-Rosario, en la que en horas de la madrugada del 10 de abril un grupo armado irrumpió en el lugar y “luego de reducir y atar al guardia” se apoderaron de computadoras y diversas herramientas, como una sierra circular y una amoladora.

El 25 de abril asaltaron dos casas aledañas, ubicadas en el kilómetro 6 de la ruta 19, hasta donde se trasladaron en una camioneta Hilux. En la última vivienda golpearon y dejaron atado al morador para que no diera aviso a la policía.

El 1° de mayo la banda atracó un tambo de Colonia San José, donde al menos seis personas armadas entraron forzando la puerta y redujeron a la familia del tambero exigiendo dinero.

Cara descubierta

Tres días más tarde volvieron a marcar una casa, esta vez en el kilómetro 9,5 de la Ruta 19, donde luego de romper una ventana de blindex “ingresaron con armas de fuego escopetas y carabinas. Luego de exigir dinero, dos cómplices comenzaron a discutir descubriéndose las caras, “siendo advertidos por el propietario de la vivienda”.

El último golpe lo dieron una semana atrás, el jueves 7 de mayo, aproximadamente a las 0.25 de la madrugada en el km 141 de la autopista. Allí “siete personas armadas forcejearon con el propietario, hasta dispararon a los pies del mismo”, que logró escapar hacia dentro de su hogar. Los delincuentes intentaron ingresar pateando la puerta y rompiendo la ventana, y hasta le dispararon a la perra de la familia, a lo que el dueño de casa respondió con un disparo de advertencia “lo que motivó que se dieran a la fuga”, completo el fiscal.

De las numerosas entraderas se llevaron un botín de alrededor de 66 mil pesos, 4 mil dólares, cuchillos, escopetas, múltiples celulares y computadoras, electrodomésticos, cámaras digitales, herramientas, medicamentos y hasta una colección de monedas de metal.

Del mismo barrio

El punto común entre los cinco imputados es su lugar de residencia, ubicado en el barrio Las Vegas de Santo Tomé, donde el lunes 11 de mayo la Agencia de Investigación Criminal (AIC) allanó 14 vivienda y arrestó a diez hombres y una mujer, de los cuales cinco quedaron detenidos a disposición de la Justicia.