La noticia publicada por el Telegraph Sport inglés había causado un gran impacto: Francis Baron (ex Ceo de la Rugby Football Union), expresó en la entrevista que había propuesto a World Rugby la realización de un certamen similar a un Mundial, para realizar en junio-julio de 2021 en Gran Bretaña.
Como inequívoca y rápida respuesta, el ente que rige los destinos del rugby universal emitió horas atrás un comunicado, rubricado por su presidente, Sir Bill Beaumont, asegurando que no existe ninguna intención de abordar esa iniciativa.
* “World Rugby desea manifestarse sobre la propuesta de Francis Baron, quien sugiere la organización de un evento internacional en el Reino Unido en 2021, para aliviar el impacto que la crisis del Covid-19 provocó a nivel global. La organización no tiene la intención de llevar a cabo tal proyecto. Todas las partes involucradas continúan avanzando con discusiones productivas, con la finalidad de alcanzar una estrategia de ayuda financiera global inmediata y la optimización del calendario internacional, los cuales impulsarán el éxito deseado para la Rugby World Cup 2023 en Francia”.
La iniciativa del ex dirigente inglés, estaba conformada por una competición llamada “Coronavirus Cup of World Rugby”, que se disputaría entre junio y julio del próximo año, con la participación de 16 seleccionados, procedentes de los Hemisferios Norte y Sur. Contendría 31 partidos, distribuidos en diferentes estadios de Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda. Y según el propio Baron, el evento permitiría una recaudación de unos 250 millones de libras, que serían destinadas a las diferentes organizaciones del mundo del rugby, con el objetivo de combatir las respectivas crisis económicas generadas por la pandemia.
Siguiendo con la crisis sanitaria que afecta a gran parte del mundo, es oportuno consignar que World Rugby aprobó una decena de reglas opcionales, con la finalidad de ofrecer a las Uniones afiliadas que lo deseen, una serie de opciones para reducir el riesgo de transmisión del coronavirus.
Se trata de pruebas opcionales y temporales, que fueron identificadas tras un detallado análisis de mas de 60 partidos. Están disponibles para las Uniones y competencias que las requieran; siempre que las mismas estén acordes a las disposiciones gubernamentales respectivas.
Se estima que las pruebas podrían reducir la exposición al contacto en el scrum, en más del 30%; reducir la exposición al contacto en el ruck, por hasta 25% y reducir el contacto en el maul, al menos un 30%.
Las reglas temporarias relacionadas al scrum, tackle, ruck y maul, fueron aprobadas dentro de un pack de medidas de higiene para combatir el Covid-19. Cada medida apunta a reducir la exposición individual acumulativa en esas situaciones de juego, que son en líneas generales, las que presentan riesgos más alto de transmisión.
Las Uniones interesadas ppodrán solicitar implementar una o más de estas enmiendas temporarias, tanto a nivel de elite o rugby comunitario, según sus necesidades dentro de la Guía de Regreso a la Actividad de WR, publicada este mes.
Las pruebas están alineadas a las guías de la Organización Mundial de la Salud, que determina que el mayor riesgo de contagio llega con la acumulación de quince minutos de contacto estando a un metro de una persona infectada. Más allá de todo tipo de consideraciones y recomendaciones, World Rugby reafirma su postura de que el deporte solo debe regresar cuando sea seguro y apropiado hacerlo, en línea con las directivas del gobierno de cada uno de los países involucrados.
Por último, es oportuno consignar que las pruebas en cuestión, fueron definidas por el Grupo de Revisión de las Leyes, compuesto por entrenadores, jugadores, referees, médicos y especialistas de las leyes, siguiendo el análisis detallado de 60 partidos.
Básicamente, ofrecen límites a las opciones de scrum, sin reseteos; limitan la cantidad de jugadores que se unen a rucks y mauls; reducen el tiempo de la pelota en la base de los scrums y rucks, de cinco a tres segundos; además de permitir un sólo movimiento por maul.
Obviamente, además de las leyes en el campo de juego y las intervenciones de los referees, se recomienda una serie de medidas de higiene para entrenar y jugar en línea con las guías de la OMS y World Rugby, como por ejemplo: limpieza obligatoria de manos y cara antes y después de partidos; limpieza regular de las pelotas utilizadas, antes, durante y después de los partidos; uso individual de botellas de agua o elementos de hidratación y evitar reuniones y celebraciones que involucren contacto.
El propietario de la franquicia Western Province, Andrew Forrest, manifestó la aceptación para formar parte del Super Rugby Australia, certamen que se desarrollará en doce semanas, entre el 3 de julio y el 19 de septiembre venideros.
De este modo, hasta ahora son cinco los representativos involucrados; mientras que la organización del torneo no descarta la inclusión de Sunwolves, la franquicia nipona que integra la Conferencia Australiana en el Super Rugby tradicional, que oportunamente rechazó la participación en la competición generada como consecuencia de la interrupción provocada por la pandemia de Covid-19.
* “Estamos muy contentos de que Western Force se haya incorporado al Super Rugby AU y esperamos lanzar los elementos finales de la competencia, incluido el sorteo de la temporada a su debido tiempo. Seguimos en diálogo con Sunwolves sobre su posible participación, pero ahora sabemos que tenemos cinco equipos asegurados y continuaremos nuestras conversaciones con Fox Sports y nuestros socios comerciales en los próximos días”, anunció Rob Clarke, Ceo interino del certamen.
* “El regreso de Western Force es una gran historia y estamos agradecidos por el apoyo de Andrew Forrest. Entendemos que las decisiones tomadas por la ARU en 2017 fueron dolorosas para los fanáticos y los jugadores de Force; por lo que nos encantaría continuar trabajando a futuro, con la finalidad de innovar y revitalizar el rugby en todo el país”, concluyó.