Tomás Rodríguez
Tomás Rodríguez
Al ser consultado el magnífico adiestrador del Club de Gimnasia y Esgrima, profesor Raúl Strnad, sobre lo que significaba Alicia Boscatto para la natación santafesina y la entidad de la franja afirmó que “a medida que transcurren los años, voy tomando real dimensión de los diferentes nadadores que han pasado bajo mi dirección y descubro respuestas que en su momento me eran complicadas de identificar”.
El profesor Strnad en el curso de su extensa trayectoria conduciendo a los deportistas del Club de Gimnasia y Esgrima, seleccionó, preparó y dirigió a jóvenes que se transformaron en singulares figuras de la natación argentina como Conrado Simón Porta (53” 3/10 a 1/10 del récord de Luis A. Nicolao en 100 libre), Mario Di Lucca, Alicia Boscatto, el malogrado Sebastián Lasave, Gustavo Paschetta, Osvaldo Esnaola, Fabián Ferrari, Celeste Puñet, Agustina De Giovanni, Silvina Theuler, entre otros. Tuvo además un reconocimiento al Prof. Carlos Hurtado —campeón argentino de 1500, en su época de nadador— quien hace muchos años estaba trabajando en el fútbol de Unión y lo recomendó para dirigir la natación de la entidad de la franja.
Destacó que “fueron cientos de deportistas con mayor o menor talento físico e intelectual que abordaban el deporte de acuerdo a sus características y posibilidades. La natación como deporte no es una disciplina simple en estos países del Tercer Mundo que nos ha tocado vivir, donde los recursos económicos generalmente son direccionados a todos aquellos que brindan shows, esparcimiento, negocios, alejamiento de las realidades sociales o bien llamados de distracción”.
Sin embargo, Strnad opinó que “el primer mundo tiene de esto también, pero muchos deportes que por estos barrios no cuadran, triunfan y además hasta son negocios”.
El entrenador gimnasista explicó, en otro tramo, que “no siempre los talentos físicos alcanzan niveles de suma trascendencia, algo más se necesita para acceder a tales dimensiones”.
Al respecto, reconoció que “el intelecto, la capacidad de razonar a otros niveles, la capacidad de resilencia (antes la nominábamos tolerancia o ‘que aguante’, marca de alguna manera como muchos llegan a destacarse en una actividad de aquellos que asoman y sólo son una promesa”.
Más adelante, enfatizó quien fuera entrenador de Boscatto que “muchas veces hemos visto esa palabra ’era una promesa’, pero bueno, a esa promesa, le faltaba algo, era imperfecta”.
No dudó en asegurar que “Alicia Boscatto, tenía más de intelecto y su capacidad para abordar desafíos, enfrentarlos y tratar de dominarlos, tenía más volumen que las herramientas físicas que la naturaleza la había dotado”.
Al destacar la personalidad de su discípula, consignó que “Alicia era pura determinación, era puro empuje, era pura locura por ser alguien en el deporte y que la historia la recordara como una de las mejores deportistas del país, desafiando tanto al cronómetro, a los miles de kilómetros recorridos en su vida, como a las personas que no fueron pocas, trataron de impedírselo. El sistema deportivo y quienes comandaban el mismo, fueron bastante implacables, tratando en una época de generarle obstáculos a su permanente avance y crecimiento”.
El profesor Strnad se preguntó a continuación: “¿Por qué traigo a colación esto?, porque también en esto, extra deportivo, tuvo que pelear y ser muy fuerte y saben que lo pudo y los pudo a todos”.
"En un momento de 1973, clasificada dentro de las cinco mejores del mundo en piscina corta, fue llamada e invitada a nadar en Italia y por Italia. Pero no, ella desistió y quiso quedarse en el Club de Gimnasia y Esgrima de Santa Fe con su entrenador y su equipo. La lealtad a su entorno deportivo, fue inigualable”. Raúl Strnad, entrenador de Alicia Boscatto
Premiada
La Fundación Konex distinguió en Deportes a la nadadora Alicia María Boscatto, a quien dicha organización le concedió en la asamblea anual de 1990 el Premio “Konex de Platino” y le otorgó el respectivo Diploma al Mérito por los 26 títulos argentinos y los dos sudamericanos.
Boscatto se retiró de la natación con la posesión de las plusmarcas argentina y sudamericana de las especialidades 100 y 200 metros estilo pecho, en 1989. Dicha deportista ocupó los cargos de entrenadora del seleccionado santafesino en el Campeonato Nacional de Invierno en 1993 y al año siguiente del equipo de la Confederación Argentina de Natación y fue galardonada por el Hall de la Fama de la Natación Mundial.
Actualmente vive en la ciudad de San Jorge (25.000 habitantes), departamento San Martín, en el centro-oeste de la provincia, trabajaba en una piscina que permanece cerrada por la actual pandemia mundial.
Durante toda su trayectoria deportiva Alicia María Boscatto se caracterizó por ser una notable luchadora, responsable, solidaria con sus compañeros y oponentes, además de amor propio, siendo muy reconocida y admirada por sus colegas, entrenadores y nadadores rivales.
Entre sus numerosas anécdotas, figura que durante sus intensas sesiones de adiestramiento entre 1977 y 1980, en una jornada plenamente activa, en la pileta del Club de Gimnasia y Esgrima, aproximadamente a las 17, su adiestrador profesor Raúl Strnad, la exigió a tal punto, señalándole que de acuerdo a sus condiciones naturales y para asistir a una importante competencia internacional, debía realizar siete “piques” en 2 minutos 43 segundos.
A su término, al comprobar que no había podido obtener dicho registro, salió de la piscina mens-sana, recogió la toalla y se dirigió al camerino femenino, sin saludar ni formular apreciación sobre dicha actuación con el prestigioso entrenador.
En el vestuario, mostró su impotencia, frustración y dolor, llorando en primer término, en forma desconsolada. Tras ello, reaccionó, se preparó psicológicamente y sobre las 19 reapareció en la pileta, mostrando su fuerte temperamento y vergüenza deportiva.
Se lanzó a las aguas, apareciendo sus desplazamientos característicos y brazadas espectaculares, tras culminar el recorrido y tomar conocimiento que el cronómetro se paró en 2’ 40”, le espetó al técnico: “Esta marca es para vos, tenés que saber que tu discípula es la temperamental Alicia María Boscatto, que nunca se arruga y consigue sus objetivos”, concluyó eufórica y con una sonrisa de sus labios.