Arreglo de luminaria
Arreglo de luminaria
DELIA DI COSIMO
“Mi mensaje es para la Municipalidad y la Dirección de Alumbrado Público: los vecinos de calle 4 de Enero al 2900 entre Crespo e Hipólito Yrigoyen solicitamos el arreglo de la luz de mitad de cuadra (altura 2951 aproximadamente,) que falta hace muchos días. Se ha hecho varias veces el reclamo (N° 37039), sin resultado. Muchas gracias”.
Sacar la basura más temprano
UNA VECINA
“Sr. intendente: le solicito que modifique el horario de sacado de basura en horas de la noche. Estamos viviendo momentos de mucha inseguridad. Acabo de escuchar el triste caso de un señor, al que no es la primera vez que le pasa: lo asaltaron cuando volvía a entrar a su casa. Gracias por el espacio”.
Reflexión
ERCILIO FERRI
“Los hombres no son como los describen quienes los idealizan, cristianos u otros utopistas. Ni por aquellos que los quieren muy diferentes de lo que de hecho son y siempre han sido y no pueden evitar ser. Los hombres, en su mayor parte, parecen ingratos, lascivos, falsos, cobardes y codiciosos, arrogantes y ruines. Su impulso natural es ser insolentes cuando sus negocios prosperan y abyectamente serviles cuando la adversidad los golpea. Les importa poco la libertad. El hombre le dice más que la realidad y las colocan bien abajo de la seguridad, la propiedad o el deseo de venganza. Esto último, el gobernante puede proporcionarlo en un grado razonable. Los hombres son fácilmente corrompibles y muy difíciles de curar; responden tanto al temor como al amor, ante el cruel Aníbal y el justo y humano Escipión. Si estas emociones no pueden combinarse, el temor es lo más confiable, siempre que esto no se vuelva en odio, que destruye el mínimo de respeto que los súbditos deben conservar para aquellos que los gobiernan”.
Granja La Esmeralda
ANDRÉS
“Comienzan las vacaciones de invierno y pregunto: ¿la granja La Esmeralda está abierta al público? y si es así, ¿en qué horario y cuál es el precio de la entrada? Es un espacio muy amplio, ideal para ir a pasear con los chicos, sin que la gente se amontone. Pido que el diario nos informe al respecto”.
Paro de colectivos
MANUEL MIÑO
“Tuvimos casi una semana de paro de transporte urbano e interurbano. Silencio absoluto, tanto del gobernador Perotti como del intendente Jatón. Nadie dice nada. ¿Qué pasa con los que tenemos que trabajar o movilizarnos ante cualquier necesidad? El sector privado no ha parado nunca. Señores del gobierno, tanto provincial como municipal, ustedes llueve, truene, calor o frío, llega fin de mes y cobran; nosotros no. ¿Dónde se ve vuestra preocupación por la ciudadanía? Los que usamos colectivos somos el jamón del sandwich, no somos ricos ni pobres. Somos clase media que necesitamos de dicho transporte y ustedes no hacen nada. Y la pregunta del millón, intendente Jatón: Alumbrado Público municipal ¿existe, está funcionando o fue privatizado?, lo mismo Vialidad municipal ¿está arreglando baches, está funcionando la planta de asfalto o qué? Por favor, decídanse a gobernar”.
“La bella Olivia”
GUADALUPE GABUARDI DE BORGONOVO
“Quiero felicitarlos por la foto de Cazadores publicada el sábado 27/6, con el título ‘La bella Olivia’, de Roque Montenegro. Me encantó esa nena. Yo soy una abuela de 80 años y me gusta mucho la Página del Lector, todo lo que publica y las fotos. Le mando un especial saludo a los papás de esa hermosa beba, Olivia”.
Llegan cartas
El juego en la era del zoom
MIGUEL ÁNGEL REGUERA
Angie desde la video llamada me dice Veo-Veo, a lo que debo responder obligado: ¿Qué ves? Es claro que no tengo la menor idea de lo que está en su rango visual y que aventuro una derrota. La aristocracia del juego en la era del Zoom no es simple, requiere equipos, Internet que funcione, dinero para acceder a las últimas novedades y a la play “mil y tantos”, porque las de un dígito ya empiezan a quedar obsoletas. El juego plantea metas u objetivos, enseña reglas a cumplir, aplica sanciones a los infractores y a los que pierden (antes se las llamaba “prendas”), permite reconocer que hay “otro” que juega, sirve para socializar y desarrollar capacidades intelectivas, psico-motrices, cognitivas, mnemotécnicas, etc. Por supuesto que no están en el mismo nivel el dinenti, la perinola, el yo-yo, el balero, el trompo, la rayuela y el elástico; que la lucha de pulgares, dígalo con mímica, la batalla naval o los palitos chinos. Pero estos juegos infantiles de antaño, sí tienen en común su carácter democrático, igualitario. No hay que ser rico para jugar a las canicas o bolitas, ni ser demasiado pobre para el Antón Pirulero, la Farolera, el Patrón de la vereda, la gallina ciega o destacarse en una carrera de embolsados. La tan ensalzada meritocracia, tiene su fundamento en la igualdad del punto de partida y estos juegos lo tenían y lo mantienen. En el ludo todos poseemos cuatro fichas, en el piedra, papel o tijera todos jugamos a un tiempo con la mano, la margarita se deja adivinar amores sin preguntar linaje alguno y un palo de escoba se puede montar por jinetes de barrios con calles de tierra, asfalto o pavimento. El papel permite hacer barcos o aviones indistintamente y la madera puede ser tanto una espada como un techo o un puente sobre unas piedras. El avance tecnológico es imparable, pero a la par del desarrollo de este paradigma, cabe preguntarse si el paradigma moral debe acompañar ese avance en silencio o llamar la atención sobre una nueva aristocracia del juego, donde los menos interactuarán con sus pantallas, en grupos cerrados, donde el campo de juego y el patio de juegos, ya no sea refugio de mayorías ansiosas de ser felices al compartir experiencias, conocer diferencias, aprender otros colores y gustos. Veo-veo me dice Angie, sentada frente a mi mesa, y desde la abuela, pasando por el tío solterón, las primas y los vecinos que están de visita se preparan para jugar, “un juego que jueguen todos”.