La explicación de la Dra. Stella Cuevas, especialista en el tema
Covid, anosmia y el ABC de cómo deben realizarse los tests de olfato
La pérdida súbita del olfato y del gusto son un síntoma clave para la detección de casos “altamente sospechoso” de Covid-19. La experta recomienda que en las pruebas se utilicen sustancias odoríferas (aromáticas) y no pungentes (que producen sensación de ardor), como el vinagre.
Pablo Aguirre En lugar de utilizar en los tests de olfato sustancias pungentes (como se hace en controles de los accesos a la ciudad), la experta recomienda las sustancias aromáticas.
El 16 de abril, los criterios del Ministerio de Salud de la Nación para la definición de un caso sospechoso de Covid-19 eran fiebre, tos, odinofagia (dolor de garganta) y dificultad respiratoria. El 8 junio, se confirmó que la anosmia (pérdida de olfato) y la disgeusia (alteración del gusto), siempre que aparecieran súbitamente en el término de 72 horas, indicaban un caso “altamente sospechoso” de esta enfermedad. Este fue el llamado “criterio número 4”. Se indicaba aislamiento para personas que manifestaran esta sintomatología, con toma de muestra para diagnóstico por hisopado PCR.
La confirmación de esa relación estrecha entre el Covid-19 -tras portar el Sars-Cov-2, o coronavirus- y un síntoma concreto, llevó a activar en los controles interjurisdiccionales los tests de olfato, junto a las tomas de temperatura. Pero, ¿en qué consiste la anosmia desde la explicación de base científica? ¿Cómo afecta el virus al receptor neuronal de lo que se huele? Si este síntoma está estrechamente asociado a un Covid positivo, ¿se realizan correctamente los test de olfato en la ciudad y provincia?
El Litoral consultó a la Dra. Stella Maris Cuevas, otorrinolaringóloga, experta en olfato y alergista (ver Perfil) para despejar las dudas. La especialista no dudó en asegurar que la alteración de estos dos sentidos (olfato y gusto) indican algo claro: “Si en este momento de pandemia alguien pierde abruptamente el olfato, y a su vez el gusto (disgeusia) se está ante un caso altamente sospechoso de Covid-19. El paciente debe ser aislado y se le tiene que realizar el hisopado”, dijo, en diálogo con este medio.
Oler con el cerebro
Los olores ingresan por la vía nasal y se ‘enganchan’ en las células olfatorias. “El epitelio olfatorio tiene tres células: las células basales, las microvillares -o de sostén- y las olfatorias de primer neurona. Son las únicas neuronas que están fuera del cerebro. Esas células son las más importantes, porque en el extremo anterior tienen un receptor olfatorio que es el dañado por el coronavirus. Como el virus daña a ese receptor, los estímulos químicos (que son los olores) no pueden llegar al cerebro, que es el lugar donde se huele: no se huele con la nariz, sino con el cerebro”, precisó Cuevas.
Pero además, las papilas gustativas (dulce, salado, ácido, amargo y agrio, umami) se pueden ver condicionadas por la afectación del virus en el organismo: “El olfato da el 80% del sabor”, argumenta la experta.
Con todo, en los pacientes afectados con Covid-19 es altamente probable que se manifieste anosmia, y de la mano viene la alteración en el gusto. “Estos pacientes no son asintomáticos, porque la anosmia es un síntoma. Entonces, hablamos de pacientes sintomáticos -aclaró Cuevas-. Y la anosmia no es un síntoma común y cotidiano; ahora adquirió relevancia porque apareció como síntoma asociado al Covid-19, en medio de la pandemia”. Sólo el 5% de población mundial tiene anosmia, que puede ser congénita (una persona que nació sin olfato), o por haber padecido traumatismos craneoencefálicos, entre otros casos.
Gentileza Cuevas: En la relación entre anosmia y el Covid-19, la pérdida del olfato es abrupta y súbita .
Cuevas: “En la relación entre anosmia y el Covid-19, la pérdida del olfato es abrupta y súbita”.Foto: Gentileza
Prueba abreviada
-¿Cómo sería un test de olfato realizado en forma correcta?
-Se moja un hisopo (o un cartoncito de ésos que se utilizan para muestras de perfume) en agua, y se embebe en un pote que contenga canela en polvo, por ejemplo. Ese hisopo de algodón se le debe acercar a la persona a testear a dos centímetros de la nariz, la cual debe realizar dos inhalaciones suaves. No debe hacer inhalaciones fuertes. Luego, se le pregunta a esa persona: ¿Olió o no olió? Es muy sencillo: si dice que olió, ese hisopo se descarta en una bolsa. Si la persona dice que no olió, entonces tiene que ser rápidamente aislada e hisopada (se le toma una muestra de secreción nasal). Porque pasa a ser caso sospechoso. Eso es lo que se llama prueba de olfato abreviada, que se está usando en la provincia de Corrientes.
-En la provincia y la ciudad de Santa Fe, los pruebas de olfato en los límites interjurisdiccionales se hacen con un hisopo de algodón embebido en agua con alcohol o vinagre. ¿Es correcto ese procedimiento?
-El vinagre, por ejemplo, es una sustancia pungente (es decir, que producen sensación de ardor o picor, irritación o cosquilleo, como la lavandina, o el alcohol). Porque el vinagre estimula el quinto par craneal, que es el nervio trigémino. Y lo que se necesita saber es solamente si el paciente huele o no huele. Si tenés buen olfato y te acercás a oler el vinagre -por ejemplo- reaccionás y lo repelés: alejás la cara. Es que al ser una sustancia pungente hace que se rechace, como un acto reflejo.
Entonces, lo que recomiendo es que en los tests de olfato se utilice es una sustancia odorífera (es decir aromática, como vainilla, coco, canela, limón). Porque ahí se está “poniendo a prueba” al nervio olfatorio.
“No es necesario preguntarle a cada persona a la que se le hace el testeo olfativo qué es lo que huele, sino preguntarle si huele o no”, subrayó Cuevas, e insistió en que lo más efectivo en las pruebas de olfato es la utilización de sustancias aromáticas (por eso, la canela como un ejemplo), en lugar de las pungentes.
El porcentaje
Según los datos que se estiman en la actualidad, entre el 30 y el 85% de los infectados por el nuevo coronavirus presentaron alteraciones de olfato y de gusto. “Aunque aún no existe evidencia científica suficiente, se espera que el Sars-Cov-2 afecte a la capacidad olfativa de forma similar a otras anosmias virales”, dice Cuevas.
Perfil
La Dra. Stella Maris Cuevas (MN 81701) es médica otorrinolaringóloga, experta en alteraciones del olfato y del gusto. También es alergista. Ex presidenta de la Asociación de Otorrinolaringología de la Ciudad de Buenos Aires (AOCBA).