Impusieron 30 años de cárcel para un abusador y 12 para un homicida

Dos tribunales pluripersonales pusieron punto final el pasado miércoles a dos debates orales y públicos iniciados la semana pasada en los tribunales locales. Por la mañana, fue condenado a 30 años de prisión un padrastro, acusado por el abuso de dos niñas que estaban a su cargo. Por la tarde un muchacho de 25 años recibió 12 años de castigo por apuñalar dos veces en el tórax a un hombre, delante de su esposa embarazada, en un hecho ocurrido en 2018 en Santo Tomé.

En el primer caso, el tribunal pluripersonal integrado por los jueces Leandro Lazzarini (presidente), Sandra Valenti y Rodolfo Mingarini condenó por unanimidad a Jonatan Adrián Francisco Servidio, de 34 años de edad, como autor de delitos de “abuso sexual con acceso carnal agravado (por la guarda y por ser cometido contra una menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente), en concurso ideal con promoción a la corrupción de menores agravada (por la guarda, la convivencia y por ser la víctima menor de trece años). Los ilícitos fueron atribuidos en concurso real”, informó la oficina de prensa del MPA.


Luego de la lectura de la sentencia, la fiscal Alejandra Del Río Ayala valoró “la decisión del tribunal porque es una pena muy cercana a la que inicialmente habíamos solicitado, que era de 32 años de prisión”. En la misma línea, resaltó que “estamos conformes porque fueron hechos graves que se cometieron durante muchos años (2011-2016) en perjuicio de víctimas de muy corta edad”.


Acerca del monto de la condena, la fiscal indicó que “algunos de todos los parámetros que tuvimos en cuenta para pedir una pena tan elevada fue el hecho de que los abusos se cometieron contra niñas muy pequeñas y en un contexto de mucha violencia”.

Por su parte, su par Celeste Minniti recordó que “la investigación se inició en 2016 a partir de una denuncia radicada por una persona cercana al entorno de las víctimas”. Y agregó que “intervino la Subsecretaría de Derechos de Niñez, Adolescencia y Familia y las menores fueron apartadas del círculo familiar en el que estaban”.

Apuñalado en Santo Tomé

El mismo miércoles por la tarde, otro tribunal, compuesto por los jueces Nicolás Falkenberg, José Luis García Troiano y Pablo Busaniche, sentenció a 12 años de encierro a Ángel Gabriel Oliva (25) por el crimen de Mario Iván Bravo, ocurrido en Santo Tomé en 2018. Tras la lectura del veredicto, la fiscal Ana Laura Gioria, que junto con su par Gonzalo Iglesias solicitaron 20 años de prisión, expresó que “vamos a esperar los fundamentos de la sentencia para conocer qué motivó a los jueces a fallar de esta manera”. La pena también fue impuesta por la autoría de lesiones leves cometidas en perjuicio de otra víctima. Por otra parte, Oliva fue absuelto del delito de evasión de una dependencia policial.

Gioria indicó que “el homicidio sucedió alrededor de las 19 del sábado 14 de julio de 2018 en inmediaciones de calle Centenario al 2.600 de Santo Tomé”. En tal sentido, resaltó que “ocurrió en plena vía pública” y delante de la pareja de la víctima, la cual estaba embarazada y a punto de dar a luz.

“Con una cuchilla tipo faca, Oliva le asestó a Bravo dos puñaladas en el tórax que le provocaron la muerte”, narró la fiscal. Agregó que “minutos después, el hombre condenado utilizó el mismo arma blanca para herir en el antebrazo derecho al cuñado de la víctima fatal”.

Sobre las circunstancias del hecho, Gioria mencionó que se produjo “después de una discusión entre dos grupos familiares y delante de testigos”. Además, manifestó que “Oliva se dio a la fuga luego de perpetrar los ilícitos y fue detenido cinco días después”.

Hermanos condenados

En tanto, dos hermanos -Luis Ángel Hernández (38) y Hugo Benjamín Hernández (21)-, fueron penados con 13 años y seis meses de prisión cada uno por el homicidio de Walter Cristian Salva ocurrido el 24 de febrero de 2018, informó la oficina de prensa del Ministerio Público de la Acusación. Los jueces José Luis García Troiano, Sandra Valenti y Nicolás Falkenberg impusieron dichas penas a los hermanos Hernández en el marco de un juicio abreviado en el que ambos admitieron su culpabilidad como autor y partícipe necesario respectivamente.

“El mayor de los condenados admitió expresamente su culpabilidad como autor del homicidio, mientras que su hermano menor lo hizo como partícipe necesario”, señaló el fiscal Martín Torres, en tanto que “el joven de 21 años también asumió la autoría de amenazas contra una mujer”.

Los hechos ocurrieron el sábado 24 de febrero de 2018 minutos antes de las 7 en una vivienda del barrio Villa Oculta, donde estaban la víctima fatal y siete integrantes de su entorno familiar. Según narró el fiscal, “Hugo Benjamín Hernández y tres personas más -de las cuales dos ya fueron individualizadas- irrumpieron en el domicilio de forma violenta portando armas de fuego”. En tal sentido, recalcó que “llegaron al lugar con la intención de matar a Salva, que estaba durmiendo”.