Por Tomás Rodríguez
El equipo de polo que compitió en París (Francia) en 1924 obtuvo la primera presea de oro en la historia del olimpismo argentino, donde Arturo Kenny se erigió en el primer deportista santafesino que consiguió tan magna distinción. Además Juan Bautista Miles Paso —descendiente del secretario de la Primera Junta de 1810 y miembro de los dos Primeros Triunviratos de 1812 y 1813—, porteño, pero formado en equipos santafesinos de principio del Siglo XX.
Por Tomás Rodríguez
En las luces de París, se produjeron varias epopeyas históricas para nuestro país y los santafesinos estuvieron presentes. Por otra parte, el nadador porteño Victoriano Alberto Zorrilla, se convirtió en el primer campeón olímpico, representando a nuestro país, en el concierto individual, alcanzando además la plusmarca universal en los 400 metros libres, cuando contaba 22 años.
Juan Bautista Miles Paso —nació en Buenos Aires— y junto a su hermano David Benito fue un reconocido hacendado de Cañada de Gómez, provenían de Las Rosas, cuna de grandes polistas argentinos, integrando los mismos equipos de la provincia de Santa Fe de notable jerarquía, siendo propietario además de la famosa estancia Del Sel. Desde 1893 hasta 1923 los conjuntos de Santa Fe lograron adjudicarse 16 campeonatos argentinos. La nómina se detalla seguidamente: 8 North Santa Fe; tres Las Rosas y The Casuals y dos Las Petacas.
Existía coincidencia general del talento y jerarquía, Juan Bautista ganó cuatro Campeonatos Argentinos Abiertos, los dos primeros con North Santa Fe en 1916 y 1917 y los otros dos con Las Rosas en 1919 y 1923; además de los Abiertos de EEUU y Gran Bretaña y representó a Argentina en serie por la Copa de las Américas. Fue un back incomparable, con una defensa maravillosa, acostumbrado a las faenas del campo por su labor de ganadero, además de gran deportista, teniendo en cuenta que se destacó como jugador de gol, tenis y cricket.
Otro excelente jugador de golf y tenis fue el hacendado santafesino Arturo J. Kenny, muy respetado en el concierto nacional y como persona. Fue uno de los jugadores más habilidosos del país en dicha época, infatigable, diestro y rapidísimo en la concepción de las jugadas. Asimismo, con Hurlingham se impuso en Palermo en 1920, 1921, 1925, 1927 y 1929. En esta última ocasión lo acompañó el único polista argentino de origen militar, el coronel Enrique Padilla, también era el único que todavía no había triunfado en el Argentino Abierto de Palermo en el momento de la consagración de París.
Lo conseguía dos años más tarde, integrando el equipo de Hurlingham Martin Iron y en 1929 con Nelson y Kenny, en uno de los equipos más parecidos a “Los Cuatro Grandes del Sur”.
Campeonato histórico
El formato de juego en París 1924 fue un pentagonal formado por Argentina, España, Estados Unidos, Gran Bretaña y el local, Francia. El equipo rioplatense estaba integrado por Juan Diego Nelson, 33 años, 7 goles de hándicap, en posición 2; Juan Bautista Miles Passo, 29 años, 7 anotaciones, jugando de 4 o back; Enrique Padilla, 34 años, seis tantos; seis conversiones, de 3 y Arturo J. Kenny, 34 años, 5 dianas, de uno o delantero. Como suplentes figuraban Guillermo Brooke Naylor y Alfredo Peña Unzué.
Además se enviaron 35 caballos pura sangre que impactaron por su calidad y belleza. De esta forma el equipo titular sumaba 25 goles de hándicap y era sólo superado por Estados Unidos, cuya formación alcanzaba los 26 tantos. Gran Bretaña, por su parte, perdió poderío antes de comenzar debido a que dos jugadores que habitualmente representaban a ese país, pero que estaban afincados en la Argentina, pusieron como condición la de jugar para las Islas en París, salvo en el partido entre ambos países. Se trataba de Luis Lacey, nacido en Canadá y de Johnny Traill, Irlanda, los dos mejores jugadores del circuito argentino y los dos primeros en recibir 10 de hándicap en nuestro país.
Los británicos decidieron no convocarlos y hacer un equipo formado con oficiales de caballería. Antes de esta determinación, Juan Nelson, el capitán argentino, estaba convencido del triunfo británico. El torneo de polo se desarrolló entre el 28 de junio y el 12 de julio de 1924 en Garches-Saint Cloud y la distribución de los partidos fue bastante curiosa; arrancó con una victoria de EE.UU. sobre el local, 13 a 1, en la jornada de apertura. Tres días más tarde, el 1 de julio, los estadounidenses volvieron a golear, esta vez a España, 15 a 3, ante no más de 2.000 personas, un día más adelante, superaron con amplitud a otro de los candidatos, a Inglaterra, 10 a 2, aunque los ingleses llegaron sobre la hora, cansados a Francia, dirigiendo el juego el argentino Juan S. Nelson.
Argentina todavía no había debutado en los Juegos Olímpicos y Estados Unidos tenía en su haber tres triunfos consecutivos y amplios, convirtiéndose en el más serio aspirante a la presea dorada.
La campaña
La primera presentación de Argentina estaba prevista para el 2 de julio, se debió aplazar por 48 horas debido a una intensa lluvia, venciendo el 4 de ese mes a España, 16 a 2, , con seis goles del santafesino Kenny, 5 de Nelson, 3 de Miles Paso y 2 de Padilla. Al día siguiente, Gran Bretaña venció a Francia, 16 a 2 y todavía soñaba con la obtención de alguna presea.
El 6 de julio fue la fecha del partido clave, entre norteamericanos, en su última actuación y argentinos. “Vamos a enfrentar a uno de los mejores equipos de la actualidad. Existe la posibilidad de que seamos derrotados, pero hemos de ofrecerle seria resistencia al encuentro más recio y difícil que hayan tenido en su vida”, les anticipó Kenny a sus compañeros. El clima fue caluroso, húmedo y una llovizna se desató apenas comenzó el juego, actuando el equipo argentino con la misma formación. El tanto de la victoria fue lograda por Nelson cuando restaba un minuto para terminar el partido, cuando estaban igualados en cinco goles. Tres tantos anotó dicho polista y uno los otros tres jugadores, mostrando a la formación argentina en inmejorable posición de llegar al oro, aunque todavía faltaban dos cotejos, pero todo dependía de ellos.
A su turno, Gran Bretaña, el 7 de julio venció sin mayores sorpresas a España, 10 a 3 y puso presión para el resultado final de la competencia, si lograse una victoria contra Argentina se produciría un triple empate. Sin embargo, “Los Cuatro Grandes del Sur” derrotaron a los británicos 9 a 5, dando un paso importante para la obtención de la medalla dorada. Sólo bastaba una victoria sobre el débil conjunto francés y ésta se produjo el 12 de julio, en el cierre del campeonato, por 15 a 2, con el ingreso de Brooke Naylor por Miles en la alineación celeste y blanca.
De esta manera, la selección argentina derrotaba a las grandes potencias del polo mundial y se llevaba la medalla de oro, la primera para el medallero olímpico histórico del país. En total fueron cuatro triunfos con 46 goles a favor y 14 en contra. El segundo puesto y la presea plateada para Estados Unidos y la de bronce le correspondió a Gran Bretaña.
En Notre Dame
Juan Diego “Jack” Nelson, la máxima figura argentina y autor del último gol en el resonante triunfo de la Argentina sobre la poderosa formación de Estados Unidos, por 6 a 5 y Thomas Hitchkock, del conjunto norteamericano, considerado uno de los mejores polistas de todos los tiempos, visitaron en forma simultánea, en horas de la mañana de dicho enfrentamiento, la bella Catedral de Notre Dame, para pedir buena suerte para sus respectivos planteles.
Cuando se encontraron a la salida de la emblemática catedral, el notable jugador argentino le dijo al renombrado astro estadounidense “cada uno rogó por su equipo. Es evidente que, celestialmente, estamos empatados”, respondiéndole solamente con una sonrisa la gran figura del hasta entonces, bicampeón olímpico.