El santafesino detrás de "La vieja guardia", el exitoso film de Netflix
Leandro Fernández es el creador, junto al guionista Greg Rucka, del cómic en el cual se basó la película que protagoniza Charlize Theron. Trabajó para Marvel y DC Comics y fue nominado al Eisner Award. Detalles de una historia que arrancó con las lecturas infantiles de El Tony y llegó hasta un rodaje en el desierto marroquí.
Gentileza Leandro Fernández El artista durante el rodaje del film.
A sus 47 años, Leandro Fernández puede darse por satisfecho en términos profesionales. Es que los personajes que dibujó en su casa de Granadero Baigorria, cerca de Rosario, hoy se encuentran en Netflix. Leandro es el creador, junto al guionista Greg Rucka, del cómic “La vieja guardia”, que la distribuidora de contenidos audiovisuales por streaming convirtió en una película que tiene como protagonista a la actriz Charlize Theron y está disponible para los usuarios desde el pasado 10 de julio.
Consultado respecto a las sensaciones que tuvo al ver el film, explicó que superó sus expectativas. “Siento que estoy viviendo una experiencia que quizás nunca me hubiera atrevido a soñar, por la forma en que se dieron las cosas, de manera tan positiva e impresionante. A lo largo de toda mi carrera, cada vez que creaba una historia, me decía a mí mismo ‘qué lindo sería si hicieran una película de esto’. Y cuando me di cuenta lo estaban haciendo”, manifestó.
Algo que Leandro valora mucho es el respeto que tuvieron tanto la directora del film (Gina Prince-Bythewood) como los productores respecto al material original, que hasta se tradujo en el cuidado de detalles como el diseño del hacha de la heroína y del vestuario. “Así y todo, siempre traté conservar una especie de cuidado de hacerme demasiadas ilusiones con el producto final, sobre todo por tener presente el testimonio de autores que después no están conformes con las adaptaciones y se la pasan despegándose de ellas. Temía verme en esa situación, pero me encontré en el lugar opuesto. Obviamente que la película es algo que tiene vida propia, pero como creador no puedo estar más agradecido, porque conserva la esencia de la obra original”, destacó.
Además de estar presente en el rodaje del film en Inglaterra (en los estudios Shepperton) y en el desierto de Marruecos, Fernández tuvo algunas intervenciones directas en el filme: realizó todos los dibujos y bocetos que aparecen en pantalla. “Hay un personaje que es el artista del grupo. Tiene un libro de bocetos donde, en un momento de la historia, hace un dibujo. Y querían que ese dibujo fuera mío, clara señal de vínculo hacia el artista original. También en el set trabajé haciendo esos dibujos para la cámara. Cuando se ven las manos del personaje dibujando, en realidad son las mías”, contó.
El orgullo que siente Leandro por la película no es caprichoso: es la primera vez que una creación suya llega a la pantalla. Pero también se relaciona con un hecho extra fílmico, que lo marcó. “Parte de lo que es la campaña de la película consistió en convocar a referentes de la ilustración y del cómic de distintas partes del mundo para que hagan sus propias versiones en un póster homenaje a la película. Hay artistas muy buenos, por ejemplo Milo Manara, a quien admiro desde antes de mi comienzo en la profesión. Es uno de los autores por los cuales terminé dibujando historietas”, relató.
La historieta, desde el principio
Leandro es oriundo de Casilda, donde pasó la niñez, la adolescencia y terminó la secundaria. Luego se fue a Rosario a estudiar Diseño Gráfico, pasó algunos años en Barcelona y luego volvió a Argentina para radicarse en Granadero Baigorria. Justamente, su relación con la historieta proviene de sus orígenes casildenses. “Tiene que ver mucho con la generación a la que pertenezco. Cuando nosotros éramos chicos, la historieta estaba en todos lados, no era algo de fanáticos o lectores exclusivos. Vos ibas a la peluquería o al médico y había historietas. Era un lenguaje común. Todo el mundo las leía”, contó. En efecto, su primera formación en el rubro fue con El Tony y D’artagan. “Tenían historias muy variadas. Las abrías no sabías con que te ibas a encontrar”, evocó. También las películas de aquellos tiempos (principios de la década del ‘80) que vio en alguna de las dos salas que funcionaban en Casilda incidirían luego en su universo creativo. “Uno iba al cine como plan, sin saber con qué se iba a encontrar. Así me topé con ‘Highlander’, que tiene una temática similar a la que tocamos en ‘La Vieja Guardia’: cuando entré a verla, ni sabía de qué se trataba. O con ‘Depredador’, que entré a ver pensando que era una película de guerra, para encontrarme con otra cosa distinta”, recordó.
Proyectos en marcha
Hoy el trabajo de Leandro está del todo focalizado en la historieta “La vieja guardia”, concebida para tres volúmenes. “La película está sobre todo basada en el primer volumen. Acabamos de terminar el segundo, cuyo último número salió el mismo día que la película, y estamos por empezar a trabajar en el tercero. El proyecto ahora es, sobre todo, terminar cierto material extra del segundo y empezar el tercero, que llevará mucho trabajo. Es algo grande y bastante extenso”, explicó.
La película “La vieja guardia” está centrada en un grupo de mercenarios inmortales liderado por una guerrera llamada Andy que ha luchado para proteger el mundo durante siglos. “No es la primera vez que se toca el tema de la inmortalidad. De hecho, es un mito que se remonta hasta los orígenes de la historia humano, en su ambición para no morir. Pero en el contexto actual, la historia que pensó Greg es muy interesante. Es que en el presente, en la ciencia se está hablando de extender los límites de la vida humana más allá de los períodos naturales. No se si está hablando de la inmortalidad, porque sería muy ambicioso, pero si de extender los ciclos de vida muchísimo más allá de lo que la naturaleza permite. Entonces en este marco, el cómic plantea una nueva mirada”, reflexionó Leandro.