En un contexto donde la incertidumbre gana cada vez más terreno, no es sencillo imaginar cuál es el horizonte de Jaguares, la franquicia argentina que tras la cancelación por la pandemia del Covid-19, quedó no solo marginada del Super Rugby 2020, sino que además no posee parámetros demasiado precisos sobre lo que puede llegar a ocurrir el año venidero.
La reformulación del certamen organizado por Sanzaar, deparó para completar esta inusual temporada, en el SR Aotearoa, en Nueva Zelanda y el SR Australia, en territorio aussie, solamente con la participación de elencos autóctonos, lo que obviamente descartó a argentinos y japoneses.
Pero esto no es todo, ya que Nueva Zelanda enarbola un proyecto 2021 de la competición que podría denominarse Trans-Tasman y que contaría con las cinco franquicias kiwis, cuarto aussies y la restante, de alguno de los países tradicionales del Pacífico Sur (Fiji, Tonga o Samoa).
Si esto llegara a aprobarse, nuevamente no habría actividad para los dos representativos que formaban parte del formato tradicional del torneo; además de todos los sudafricanos.
Sin embargo, son crecientes las críticas de la Australian Rugby Union sobre sus pares neozelandeses en cuanto a ese proyecto, lo que podría derivar en una no aceptación de la propuesta.
Si los cuestionamientos se transformasen en negativa, Australia posee una opción alternativa, que estaría conformado por un certamen con las franquicias propias: Brumbies, Reds, Waratahs, Rebels y Western Province; junto a Jaguares, Sunwolves y Fiji; además de un número aún no determinado de representativos sudafricanos.
Días atrás, el sanjuanino Marcelo Rodríguez, presidente de la Unión Argentina de Rugby, se refirió a la confusa situación imperante en el amplísimo contexto internacional.
* “Se están hablando muchas cosas y no hubo ninguna propuesta formal de ese tipo hasta el momento. El vínculo con Sanzaar está intacto, las decisiones del futuro se toman en conjunto y las alternativas las estamos trabajando mancomunadamente las cuatro naciones. Cada unión trabaja en su propio contexto de reorganización interna, tratando de mitigar el lógico impacto en nuestras competencias internacionales y domésticas, las uniones y los clubes. También evaluando las renegociaciones con los broadcasters de cada país y los sponsors, que son clave para el desarrollo y funcionamiento de la UAR”.
Por su parte, entre australianos y neozelandeses los cruces fueron cada vez más ríspidos, acusándose mutuamente y poniendo en riesgo para posibilidad de un acuerdo definitivo para el futuro inmediato. Casi está de más expresar, que las dificultades económicas generadas a partir de la inacción provocada por la pandemia, surge como elemento de crucial importancia a la hora de argumentar tantas discrepancias.
Volviendo a Jaguares, amén de estar muy atentos a la posibilidad de afrontar alguna competición en 2021, también deben estarlo con relación a factores de crucial relevancia. Como el económico, pensando que la UAR seguramente insistirá en la premisa de autosustento; lo que actualmente irrumpe como bastante improbable.
Pero además, desde lo eminentemente competitivo, no debe olvidarse que en los últimos meses, el plantel que el año pasado tuvo el honor de acceder a la final ante el poderosísimo Crusaders, ha perdido hasta el momento a seis calificados integrantes, partiendo del head coach, Gonzalo Quesada, quien retornó al Stade Francais parisino.
Tres jugadores emigraron a entidades francesas: Guido Petti, al Bordeaux Begles; Marcos Kremer, al Stade Francais y Jerónimo De la Fuente, al Perpignan. En tanto, los dos restantes lo hicieron a clubes ingleses: Matías Moroni, a Leicester Tigers y Matías Orlando, a Newcastle Falcons.
Por último, pensando en que puede ocurrir con la South African Rugby Union, más allá que aún no se a expedido, atendiendo a que la evolución de la pandemia no es nada favorable en ese territorio; parece sentirse muy cómoda con su adhesión a la Liga Celta, competencia europea en la que ya tiene a dos franquicias incorporadas: Cheetahs y Southern Kings.
En síntesis, por ahora, la única noticia positiva para Argentina, es que el 30 de julio venidero, el consejo directivo de World Rugby confirmará la realización del Rugby Championship 2020, entre el 7 de noviembre y el 12 de diciembre, en el que Los Pumas tendrán la chance de reeditar sus tradicionales duelos con los All Blacks, Springboks y Wallabies.