La semana pasada, vía zoom, los directivos de Rosario Central montaron una rueda de prensa por cuestiones más que obvias: apuntaron que el grueso de los cheques "rebotados" correspondían a compromisos incumplidos por el tema fútbol, direccionados hacia tres grandes núcleos. Un futbolista cuyo nombre prefirieron reservar y dos clubes. "Uno de esos clubes es Unión de Santa Fe, un proveedor de futbolistas en los últimos tiempos hacia Arroyito", filtraron.
El tema en cuestión son los pases sistemáticos de jugadores del Tate a Rosario Central: la "Bomba" Diego Zabala, el popular Emanuel Brítez y finalmente Damián Martínez. Parece, realmente, el Cuento de la Buena Pipa: los auriazules postergan sus compromisos y otra instituciones deudoras también lo hacen con Rosario Central, rompiéndose inexorable la cadena de pagos.
En charla con Zapping Sport de Rosario, el vicepresidente Ricardo Carloni confesó que entre las propuestas a Unión aparece la chance de poder cederles futbolistas. "A Unión le dijimos que si necesitaban algún jugador de nuestra casa y el jugador quiere ir a Santa Fe no tenemos ningún problema y, sino, ante el primer ingreso extraordinario vamos a solucionar el inconveniente. Lo que debía ingresar por Gil ya estaba calzado con este tema, pero la problemática es que todos están con problemas y desde Arabia también nos pidieron refinanciar", aseveró.
El atraso del "Combo" de los "canallas" para con el "Tate" superaría el millón de dólares. "Ya cambiamos varias veces las fechas de los cheques", comentan. Pero, a la vez, hablan de una estrategia de Luis Spahn: "Que sigan estirando, total el dólar sigue subiendo". Como si no hubiera apuro o desesperación por intimar al cobro de los rosarinos de Central.
Incluso, por lo que se habría deslizado en alguna reunión, ese monto que le debe Rosario Central a Unión es el que el presidente tiene reservado para intentar cerrar el supuesto negocio inmobiliario para la compra de un predio deportivo, una de sus claras promesas de campaña electoral, donde Luis Spahn fue electo con el 65 por ciento de los votos de los socios.