Por Javier Díaz
A los 42 años, el arquero sabe que la prolongada inactividad por el parate obligado del fútbol le hará imposible volver con la intensidad que impone la Primera División de la Liga Santafesina. "Me hubiera gustado irme más adelante, dejando a Nuevo Horizonte en la 'A'", lamentó.
Por Javier Díaz
Cuántas historias como la de Ariel Douchín quedarán en el deporte amateur cuando esta pandemia sea parte del pasado. Cuántas "carreras" llegarán a su fin de manera inevitable a causa de una tan prolongada como inesperada inactividad provocada por la situación sanitaria. Cuántos más de esos que practican un deporte a nivel competitivo pero sólo por amor al juego se verán obligados a decir "basta", sabedores de que su físico no les permitirá regresar en las condiciones adecuadas.
Con 42 años, Ariel Douchín se disponía allá por marzo a comenzar una nueva temporada en la Primera División "B" de la Liga Santafesina. Esperaba ansioso que llegara el encuentro entre Nuevo Horizonte y Nobleza, por la primera fecha del por entonces ya programado torneo Apertura, para comenzar a desandar lo que -soñaba- sería el arduo camino del "Turquesa" de regreso a la máxima categoría. Pero un virus popularmente conocido como Covid-19 tenía otros planes. Y "Diente", como vaya uno a saber cuántos otros deportistas aficionados más, se vio forzado a decir "hasta acá llegué".
-¿Cuándo tomaste la decisión y dijiste "no juego más"?
-Cuando vi que se cancelaba la temporada. Tomé esa decisión porque, después de tantos meses sin hacer nada, volver a entrenar va a costar el doble y, para colmo, las personas grandes como yo corremos mucho riesgo de lesionarnos. Lamentablemente tuve que decir "hasta acá llegué" porque el cuerpo no me va a dar para volver a entrenar cuatro días a la semana y con la intensidad que exige la Primera División.
-¿Imaginaste que iba a ser así el momento del retiro?
-La verdad nunca pensé en cómo iba a ser mi retiro, pero sin dudas no me esperaba que fuera este año. No quería retirarme así, me hubiera gustado irme más adelante y dejando a Nuevo Horizonte en la "A", que es donde tiene que estar.
-No es la primera vez que te escucho decir que tu materia pendiente es no haber ascendido con Nuevo Horizonte y estuviste cerca de lograrlo, ¿qué faltó?
-Sí, es cierto, dos veces estuve cerca de ascender con Nuevo Horizonte y las dos veces nos tocó perder por penales. Creo que faltó un poquito de suerte. Porque, para mí, en el fútbol es clave tener un buen equipo y un poquito de suerte también. Y nosotros teníamos buen equipo, si no, no hubiéramos jugado la final.
-¿Qué es lo que más valorás de tu paso por el fútbol?
-Lo que más valoro es la cantidad de gente que me hizo conocer el fútbol, muchos son ahora muy buenos amigos y otros son conocidos.
-Y de todos los momentos que te habrá dejado tu paso por la Liga, ¿con cuál o cuáles te quedas?
-Los momentos que más me quedaron fueron el campeonato de la "A" con La Perla y la Copa de Campeones que ganamos, también con La Perla. El primer año que estuve en Independiente de San Agustín perdimos la Reválida con Central San Carlos y también vivimos momentos que no me los olvido más.
-En la Senior jugás de "9" y también lo hiciste en Primera... ¿cómo es ver el fútbol en el lado de la cancha opuesto al que estás acostumbrado?
-Sin dudas son dos puestos totalmente diferentes. Pero tal vez lo que más impacta es que cuando estás abajo del arco, si cometés un error es gol en contra; en el arco tenés que estar concentrado los 90 minutos. Jugando de delantero podes errar un montón de goles y nadie se acuerda. Por otra parte, hay mucho más roce y desgaste físico.
-Si tuvieras que volver a elegir, ¿te quedás con el arco o con la "9"?
-Me quedo con el arco, sin dudas. Los arqueros somos distintos… ¡hasta salimos a la cancha vestidos diferentes al resto!
-¿Vas a seguir ligado a Nuevo Horizonte más allá de como hincha?
-Sí, al club voy estar ligado toda mi vida, porque me brindó todo, ahí me enseñaron muchas cosas y me dieron la oportunidad de que me conozca mucha gente.
-¿Te gustaría ser DT en algún momento?
-Me gustaría, pero hay que tener tiempo para poder estudiar y tener el título. Seguro que estudiando voy a poder aprender más de lo que ya te enseña el día a día de un entrenamiento o un partido. Ahí se aprende mucho, como también aprendí de los entrenadores que tuve a lo largo de mi carrera, como el caso de Tobaldo y el "Piojo" Zibecchi.
-¿Te arrepentís de algo?
-De lo único que me arrepiento es no haberme dedicado al fútbol de pibe, porque creo que siempre tuve las condiciones y las ganas de aprender muchas cosas. De eso y de no haber ido a probarme a un club del fútbol profesional.