Delfino Flow publicó "Dos x Uno"

Lisandro Plank

Además de haber publicado algunos singles en lo que va del 2020 -"Fiebre", "Enjambre"-, el viernes pasado Delfino Flow colgó en sus redes un nuevo material audiovisual titulado "Dos x Uno". Desde hace mucho tiempo, Emiliano Delfino transita su vida artística por los terrenos de la cultura del Hip Hop, siempre imponiendo su estilo, pero también utiliza el rap y las rimas para coordinar talleres para pibes de diferentes barrios de nuestra ciudad haciendo de la expresión artística un puente que una y mejore la realidad de los asistentes.

En este año particularmente atípico para la actividad cultural, muchos artistas tuvieron que adaptarse a la coyuntura, implementando nuevas estrategias de difusión. Para desandar cómo está siendo su trabajo arriba y abajo del escenario, dialogamos con Delfino.

-¿Cómo estas viviendo este año que puso en jaque la actividad cultural?

-Estamos viviendo un año que puso en jaque el encuentro con el otro, es una situación de constante tensión y lucha porque todo grupo de personas que trabajen en algo, deberán repensar sus estrategias. Y en la cultura del Hip Hop, hay mucho de grupo. Y también se notó mucho en el trabajo de los talleres, que es un espacio que hace seis años que coordino, para lo que tuvimos que repensar muchas cosas. Estos últimos años veníamos trabajando con un promedio de 30 pibes, que nos encontrábamos dos veces a la semana y, a veces, una tercera cuando grabábamos sus producciones. Y ni hablar la cuestión de hacer shows en vivo. Pero bueno, cuando empezó la cuarentena habilitamos una cuenta de Instagram con los participantes del taller para poder comunicarnos y seguir trabajando. Por ejemplo, bajo la consigna que carguen videos de un minuto contando a través del rap y la improvisación cómo estaban viviendo este año, recopilamos un montón de material que da cuenta que los pibes ven en la expresión artística una manera de abordar sus realidades. Yo milito mucho en los talleres esa idea de sacar las cosas que uno siente, exteriorizarlas, sea en forma de rimas, de un poema o una pista de rap, lo importante es poder sacar la voz propia para comunicarse con el mundo desde otro lugar, que es el lugar de producir arte. En cierta forma ese lugar sube la autoestima y hace que los pibes se puedan sentir más livianos y creativos, sacando sus sentimientos y percepciones. Con el tiempo se logra una energía que los ayuda y que si la alimentamos en el trabajo en los talleres se transforma en un estilo de vida.

-¿Cómo ves el panorama a futuro con la pandemia y la cuarentena en nuestro territorio?

-Creo que la virtualidad va a tomar un lugar importante entre nosotros. Yo hace mucho tiempo me di cuenta que mi lugar dentro de la cultura del hip hop estaba arriba y abajo de los escenarios, creo que en el contacto con el otro es donde se empiezan a tejer vínculos que le dan valor a la cultura y al arte. Así que este año, desde el taller de rimas, tratamos de usar las plataformas digitales de una manera más productiva y no solo para mostrar lo que hacemos. Así lo hicimos, como te decía antes y nos está funcionando. Le encontramos la vuelta y pudimos avanzar y seguir creando en conjunto. Pero sigo viendo y sintiendo eso gracias al trabajo en el taller, el arte de rimar está ocupando un lugar muy importante entre los pibes, y se identifican mucho con el género. Resignifican sus expresiones quizás individuales, pero integradas en un modo de reconocerse como pares en una coyuntura social que los incluye y los hermana en sus experiencias de vida cotidiana.

-En este contexto publicaste una nueva canción, ¿Cómo fue el proceso de creación de "Dos x Uno"?

-Un poco con toda esta cuestión de la cuarentena, la primera mitad del año estuve mucho tiempo en casa, entonces aproveché el tiempo para poder trabajar y crear nuevas músicas. Así fue que le dimos formas, con la ayuda diferentes colaboradores, primero a "Fiebre", después a "Enjambre" y ahora fue el turno de "2x1", que si bien era una canción que yo ya tenía trabajada, quise aprovechar este contexto en donde la virtualidad toma un lugar importante, para trabajarlo en forma de una producción audiovisual y publicarlo en las redes. En este último paso trabajamos en conjunto con Nicolás Sarudiansky, de WoodBox Estudios, como tantas otras veces y por lo que estamos notando tuvo buena recepción en el público.

-¿Lo estás pensando como parte de un nuevo disco?

-Sinceramente, con la coyuntura que estamos viviendo estoy pensando en otro tipo de trabajo. Yo ya saqué varios discos en el formato tradicional, con muchas canciones en cada uno y ahora me parece que la movida viene por otro lado. Y ni hablar de los tiempos que se necesitan para pensar en su producción. Así que estoy pensando más en la publicación de singles que es un poco el formato que está tomando la actividad cultural en este contexto y que te permite un poco más de agilidad. Entonces por el momento me está funcionando más trabajar de a canciones solas, armarlas, grabarlas mezclarlas editarlas y publicarlas. De todas formas, sigo esperando el momento de que podamos volver a reunirnos, trabajar en grupo y poder en su momento condensar algún trabajo discográfico más tradicional.

-¿Cuáles son los proyectos para lo que queda de este año tan atípico?

-Desde lo artístico, voy a seguir con esta dinámica de publicar canciones sueltas, o singles, sumándole en algunos casos producciones audiovisuales. El hecho de tener que estar más tiempo en casa casi que me obliga a trabajar en crear nuevas piezas, para salir de la negatividad se vuelve crucial la creación artística. Y por el lado de los talleres, como te decía, vamos a tratar de seguir manteniendo el vínculo a través de las plataformas digitales y más adelante veremos qué se puede hacer con las creaciones de los pibes. En años anteriores hacíamos muestras, pero por como viene la mano, es difícil pensar en ese tipo de espacios de encuentro con las restricciones que acarrear la pandemia.