A solo cuarenta días de las elecciones de Estados Unidos, el presidente y candidato a la reelección, Donald Trump, presentó su plan económico para la minoría negra en el país. Además, prometió designar al Ku Klux Klan (KKK) como una organización terrorista y declarar feriado el Día de la Libertad, cuando se conmemora el fin de la esclavitud.
"Por décadas, políticos demócratas como Joe Biden han tomado por sentado a los votantes negros", señaló el polémico mandatario. "Ellos les hacen grandes promesas antes de cada elección y, luego, cuando llegan a Washington los abandonan", aseguró Trump en un acto electoral en Atlanta, en referencia a su rival en los próximos comicios de noviembre, que fue el vicepresidente del primer presidente negro de la historia del país, Barak Obama.
Tenés que leerAbuchearon a Donald y Melania Trump durante los homenajes a Ruth Bader Ginsburg"Los demócratas siempre tomarán por sentado a los votantes negros, hasta el día que una gran parte de los negros estadounidenses voten por los republicanos", agregó el jefe de la Casa Blanca, en el evento organizado por la organización Negros por Trump. Históricamente, la minoría negra ha sido una de las comunidades con mayor participación electoral y siempre ha mantenido una tendencia marcadamente favorable para los demócratas.
En esta campaña, en un intento por ratificar esa alianza, Biden eligió como su compañera de fórmula a la senadora negra Kamala Harris. De todas formas, además de ese vínculo histórico, el gobierno de Trump ha mantenido una relación de tensión permanente y casi de abierta hostilidad con gran parte de la comunidad negra.
En los últimos meses la comunidad negra se volvió a movilizar masivamente en gran parte del país, como supo hacerlo en otras épocas convulsionadas. Lo ha hecho con propuestas antirracistas puntuales (como Black Lives Matter, "Las vidas de los negros son importantes", que surgió en 2013) y en contra del "racismo estructural" que le imputan a la actual gestión, algo que el presidente ha negado una y otra vez.
Indiferente a cualquier planteo de la oposición o de la sociedad que rechaza sus actitudes racistas, Trump acaba de anunciar el aporte de medio billón de dólares para la comunidad negra, iniciativa a la que bautizó "Plan Platino", la que, según su punto de vista, que fue reflejado por la cadena Fox, "generará más oportunidades, más seguridad, más prosperidad y más igualdad para esta minoría".
En su discurso, el presidente prometió que en un segundo mandato creará 3 millones de nuevos puestos de trabajos para esa minoría y generará la oportunidad financiera para que se abran 500.000 nuevas empresas de propietarios negros. Según las estadísticas oficiales, la comunidad negra fue una de las más golpeadas por la pandemia, no solo en términos de contagios y muertes, sino por el derrumbe económico que esta provocó.
Desde lo simbólico, Trump también prometió designar al KKK, al igual que a la organización antifacista Antifa, como organizaciones terroristas. Esta iniciativa se contrapone con la actitud que mantuvo el mandatario en 2017 cuando calificó "muy buena gente" a una manifestación de activistas neonazis y supremacistas blancos en Charlottesville, que terminó con el asesinato de una joven manifestante de izquierda.