Si cuando se juegue por los puntos, el rival se equivoca groseramente en defensa y a Colón le ofrecen la posibilidad de ir ganando 2 a 0 a los 13 minutos del partido, es muy posible que lo termine ganando siempre. O en la inmensa generalidad de los casos. Es el libreto de un entrenador que prioriza el orden por encima de todo, que se siente mucho más cómodo manejando el partido desde ciertos parámetros y que conjuga practicidad con simpleza.
Son virtudes; a algunos podrá gustarle mucho, a otros más y menos y posiblemente haya quienes pretendan ver un equipo distinto. La gente de Colón conoce a Domínguez. Y ese virtuosismo que tiene este DT lo lleva, por ejemplo, a trabajar a su equipo de tal manera que cuando puede construir un resultado de la manera que lo hizo en el amistoso de este sábado ante Central, es prácticamente imposible que se lo saquen de las manos.
Tenés que leerColón goleó a Rosario Central 4-1: mirá los golesSi Vigo y Escobar van a ser más marcadores que volantes, dependerá de cómo se dé el partido. El retroceso del equipo, ganando 2 a 0 a los 13 minutos, se dio con ellos metiéndose en la línea defensiva. Fue línea de cinco y con cuatro volantes en el medio. Máxime cuando entró el colombiano Góez (dejó interesante imagen) por Chancalay. Colón jugó con orden y a esperar, saliendo rápido en contragolpe. Hizo cuatro goles, además, porque fue muy eficaz. Tampoco esto quiere decir que haya atacado sólo cuatro veces, fueron varias más. Pero cuando tuvo una situación propicia, generalmente no perdonó. Y esto es virtud.
Bien Farías, correcto lo de Lértora como volante central, más suelto Aliendro, bien Morelo (siempre molestando en la salida del rival y obligando al error defensivo, como pasó en los dos primeros goles), bastante sólido en el funcionamiento defensivo. Se vio a un Colón más que interesante en el primer tiempo, resignando protagonismo en el complemento pero sin perder la compostura. Daba la impresión de que el rival tenía que hacer 20 toques para buscar el lugar por el cuál meterse y no lo encontraba. Y lo de Colón era más directo. Y también más claro.
Se dice habitualmente que el fútbol es un juego de espacios y que ayuda a ganar al que mejor los ocupa. En eso, Colón fue más que Central, por más que, visualmente, haya parecido que la visita "apuró" un poco en el transcurso del segundo tiempo.
Otra cuestión para destacar es lo físico: está bien el equipo. Al menos, eso fue lo que se notó. Hay algunas imprecisiones que son naturales ante semejante inactividad. Y también un aspecto a tener en cuenta: se van a producir lesiones. Por ello, Colón, Central y todos los equipos de este bendito fútbol argentino al que los dirigentes que lo manejan ya no saben qué hacer para desnaturalizarlo y opacarlo, tendrán que estar atados a esta contingencia: la de saber que los jugadores se van a lesionar y habrá que tener recambio a mano siempre.