El Gobierno de Perú anunció este lunes que, debido al riesgo de aglomeraciones y propagación del coronavirus, mantendrá la prohibición de bañarse en el mar y tomar sol en las playas, aunque autorizó a la población a hacer deporte en la arena bajo supervisión policial y militar.
El anuncio forma parte de un plan que prevé en "una primera fase, que las playas sean utilizadas como espacios de deportes, donde la gente puede ir a correr, caminar, con bicicleta, pero no puede entrar con su sombrilla ni entrar a bañarse", dijo el primer ministro Walter Martos en declaraciones a periodistas, informó la agencia de noticias AFP.
"La policía y las fuerzas armadas vigilarán el acceso a las playas", agregó Martos.
En una segunda etapa, el plan del Gobierno prevé autorizar a la población a ingresar por turnos a la arena entre lunes y viernes pero siempre sin acceder al mar, detalló el Primer Ministro.
En caso que la pandemia decaiga en el país, se ampliará el permiso a los días sábados y domingos.
El objetivo de la restricción es evitar las aglomeraciones en las playas, lo que las convertiría en nuevo foco de contagio.
Actualmente está permitido entrar al mar a quienes hacen deportes individuales en el agua, como los surfistas y nadadores.
El acceso a las playas y al mar está restringido desde mediados de marzo, cuando el Gobierno decretó una emergencia sanitaria y una cuarentena obligatoria.
En Perú, el uso de tapabocas es obligatorio en espacios públicos.
Estas restricciones se flexibilizarán a medida que se reduzcan los contagios y la pandemia esté bajo control en el país que cuenta con más de 868.500 casos confirmados y 33.759 muertes.