Unos 106.000 habitantes de un distrito bávaro en el sur de Alemania, fronterizo con Austria, deben quedarse desde este martes en sus casas a menos que les resulte absolutamente indispensable salir, en una de las medidas más estrictas impuestas en el país desde el inicio de la pandemia de coronavirus.
Este confinamiento regional en el distrito Berchtesgadener Land, que también implica que quienes estén allí de vacaciones hagan sus valijas, entró en vigencia a las 14:00 (12:00 GMT) de este martes, luego de que se dispararan las cifras de infecciones en la pintoresca comarca montañosa.
La pequeña localidad austriaca de Kuchl, al otro lado de la frontera del Berchtesgadener Land, había sido cerrada la semana pasada, debido a la acelerada propagación del virus.
El número de nuevos casos anunciados en Berchtesgadener Land se encontraba al atardecer del lunes en 272,8 por cada 100.000 habitantes durante siete días, valores muy superiores a los de referencia establecidos entre 35 y 50, por encima de los cuales las autoridades deben imponer estrictas restricciones.
Las escuelas, guarderías, centros de ocio y restaurantes del distrito se vieron obligados a cerrar sus puertas. Además se prohibieron los encuentros públicos, con la excepción de los servicios religiosos.
Asimismo cerrarán los hoteles, a menos que ofrezcan alojamiento a personas que se encuentran en viaje de negocios.
Las estrictas medidas obligaron a partir a cientos de personas que pasaban allí las vacaciones de otoño. Las autoridades de turismo de Berchtesgadener Land estimaron que la cifra de turistas en la idílica zona montañosa del Watzmann y el Königssee llegaba a casi 2.500.
Entre las razones válidas para que los habitantes del distrito bávaro puedan salir de sus casas se incluyen ir al trabajo, comprar elementos esenciales y salir a practicar deporte o tomar aire fresco, aunque esto solamente podrá realizarse junto con miembros del mismo hogar.
Las disposiciones de momento tienen una vigencia de dos semanas. El aumento de los casos convierte a Berchtesgadener Land en escenario del peor brote regional de Alemania en la actualidad.