Los puntajes de los jugadores de Unión ante Arsenal

MOYANO (6).- Sobrio y seguro como siempre. Le tapó una pelota difícil a Miracco en el segundo tiempo. Trabajó menos que Gagliardo, que fue decisivo.

GEROMETTA (6).- En la marca, algo complicado por la subida de Papa en un pasaje del encuentro; en las proyecciones, bien. Fue protagonista de dos jugadas de gol.

BLASI (6).- Firme y seguro en la marca, tratando de ser más preciso con la salida desde atrás, sobre todo cuando se eligió el pelotazo.

GALVÁN (6).- Aceptable debut, sin fallas en la marca y arrimando peligro con un tiro libre en el final que motivó una de las grandes atajadas del arquero rival.

ESQUIVEL (5).- Cumplió, sobre todo cuando debió lidiar con Albertengo, que se volcó mucho por su sector. Seguramente, la salida se debió al cansancio. Por ser un debutante, bien.

BUCCA (6).- Otro de los que se habrá ido por cansancio de la cancha pero no por rendimiento, porque hizo bien las cosas. Jugó como volante central al lado de Nardoni. Buen tranco, imponiendo el rigor físico y con manejo.

NARDONI (6).- Corrió muchísimo y terminó acalambrado en las dos piernas. No lo podía sacar el técnico porque ya había agotado la cuota de cambios.

CARABAJAL (6).- El de mayor claridad con la pelota, hasta que el cansancio hizo mella en su físico y Azconzábal decidió sacarlo para que Cecchini y Elizari asumieran el armado del juego en el medio. Tuvo un mano que definió bien, pero que el arquero le negó la posibilidad de marcar.

ZENÓN (5).- Sin tanto desborde por afuera, más contenido. Le metió un hermoso centro a la cabeza a Andereggen en la primera jugada de peligro de Unión.

LUNA DIALE (4).- Está claro que no jugó en la posición que le conviene. Por momentos desapareció del partido, no gravitó.

ANDEREGGEN (5).- Activo al principio, pero también muy preocupado por correr a Papa cuando éste empezó a escalar por afuera.

COMAS (5).- Se paró más cerrado, razón por la que Unión debió ir cambiando de carrilero (Carabajal, González y Elizari).

CECCHINI, ELIZARI, GONZÁLEZ, CORVALÁN.- Jugaron el último cuarto de hora. Fueron cambios para refrescar un equipo que empezaba a mostrar signos de cansancio. Se acomodaron un poco mejor en los minutos finales, pero ya daba la sensación de que ninguno quería arriesgarse a perder.