"Parecía una aventura, y hoy tenemos un gran proyecto que impactó en toda Angola"

Los casi 8.200 kilómetros de distancia entre Santa Fe y la ciudad angoleña de Kuito no fueron impedimento para que los hacedores del convenio académico de cooperación entre la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y Escuela Superior Politécnica de Bié (Espb) de la Universidad José Eduardo dos Santos de Angola, sigan adelante con el proyecto iniciado en 2014. Este miércoles, la virtualidad los volvió a reunir con una charla hacia la comunidad, a la que El Litoral fue invitado.

"Todo parecía una aventura, y hoy tenemos un gran proyecto que impactó en toda Angola y en las autoridades del país, que depositan gran esperanza y expectativa. El Covid y la crisis económica han perjudicado, pero por la voluntad de las partes el proyecto sigue cada día más vivo", aseguró Gerson Palhares, decano de la Escuela Superior Politécnica de Bié de la Universidad José Eduardo dos Santos.

Del encuentro por Zoom participaron los docentes de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas, Mario Schreider y Viviana Zucarelli, impulsores del convenio académico junto a Palhares. "Unimos Santa Fe y Kuito de manera muy exitosa", valoró el angoleño y agregó: "Para nosotros el convenio con la Fich fue muy bueno, al tratarse de la primera apertura académica de la Argentina con Angola, y la verdad que estamos gratificados. El proyecto se ha consolidado a pesar de la coyuntura mundial, y hoy tenemos una carrera de Recursos Hídricos".

A su vez comentó lo que generó para los africanos este intercambio y apuesta universitaria sobre un recurso que abunda en Angola, pero carece de los profesionales capacitados para su gestión. "Para la población fue un gran impacto la creación de la carrera, primero porque sintieron que era posible tener ingenieros hídricos, y segundo porque la provincia de Bié recibió por primera vez colaboradores argentinos y se entusiasmaron por ello. Nos dimos cuenta que la academia y la ciencia une a los pueblos", reconoció Palhares, quien a los 14 años viajó a Cuba y se graduó como ingeniero agrónomo. Además, realizó en el país centroamericano una maestría en biotecnología vegetal.

La necesidad de profesionales

Al ser consultado sobre el motivo de elegir a Kuito como ciudad para el desarrollo del recurso hídrico, Gerson explicó: "Uno de los grandes retos era crear carreras de ingeniería, en las que el país tenía carencias. Elegimos Kuito porque es la ciudad donde nacen los mayores ríos de Angola, entre ellos el Kwanza que es el más importante del país".

Pero al momento de buscar información estaban perdidos y era nulo el conocimiento sobre una carrera que les sirva, hasta que en 2013 se pusieron en contacto con la casa de estudios santafesina. "Sabíamos que existía la carrera de hidráulica, pero nada sabíamos de la ingeniería en Recursos Hídricos. Entramos a Internet y gracias a Dios descubrimos la Fich y dijimos ´eso es lo que buscamos`, pero no teníamos idea qué era Santa Fe, solo conocíamos Argentina por Maradona, por la soja, pero nada de lo académico", dijo con gracia.

Principales logros y desafíos

Abel Paulo Guerra, uno de los primeros alumnos angoleños en Recursos Hídricos, es, además, alcalde de Kuito. Durante la charla indicó: "Nos sentimos bastante satisfecho, y hoy hay grandes resultados. La experiencia es muy interesante porque ahora sabemos cómo tratar el agua desde la ciencia, tanto para el consumo humano como para la agricultura y generación de energía".

Sobre este orgullo que le genera al decano Palhares los avances que genera en los estudiantes, resaltó que "los logros son varios. Hoy tenemos alumnos en cuarto año de la carrera, sobre el total de cinco años y medio que dura el cursado; si bien aún están inmaduros porque el proceso de aprendizaje de una carrera tan compleja lleva su tiempo. Trajimos el conocimiento y la posibilidad de formar recurso humano capacitado", y comentó que ya hay alumnos dirigiendo empresas nacionales de agua, aún sin haber terminado su carrera. Y explicó el motivo: "Esto se da porque somos un país muy joven y Angola no puede darse el gusto de dejarnos madurar porque el país tiene que caminar, y con los conocimientos que han adquirido les va muy bien".

Acerca del horizonte que imagina desde el punto de vista académico y la repercusión que puede generar en el país, el decano de la Escuela Superior Politécnica de Bié avizoró: "Para Angola el proyecto es promisorio, y el futuro es grande para la carrera. Lo mejor que hemos logrado es transmitir el sentimiento a toda la comunidad académica y la cooperación de los recursos hídricos. Tenemos esperanzas que los frutos van a llegar".

Sensaciones desde Santa Fe

"Esta experiencia de cooperación es la primera que realiza la UNL en el continente africano. Es un importante desafío porque de alguna manera contribuye a un cambio de paradigma en la cooperación internacional, demostrando que existen capacidades instaladas en el hemisferio sur que pueden ser aprovechadas por otros países en vías de desarrollo. En este caso, la UNL puede compartir 50 años de trayectoria en temas de recursos hídricos, pero adaptada a la realidad de Angola", remarcó Zucarelli.

Mientras que el otro gran protagonista del convenio, el ingeniero Schreider, dijo: "El trabajo contempló el entrenamiento de ingenieros de otras especialidades, graduados en Angola, para que sean capaces de continuar con el desarrollo de la carrera en ese país. Con ello se pretendió dar sostenibilidad al proyecto, esto es, 'formar formadores' que reciban y se apropien de los aportes de la Fich para comenzar a transitar su camino, sin necesitar de ayuda externa permanente".

"El recurso hídrico es uno de nuestros potenciales"

En pocas palabras y grandes rasgos, Gerson Palhares contó a la audiencia las características de su país: "Angola es un país que fue colonia portuguesa y que se independizó en 1975. Es un país con varios recursos minerales, pero a la vez es un país muy pobre. Tenemos al petróleo como mayor ingreso económico, siendo el segundo país de África en producción después de Nigeria".

También se refirió al trabajo que impera en la región. "La población mayoritariamente trabaja en la agricultura y en el último tiempo empezó a consolidarse el desarrollo. Hemos tenido muchos años perdidos por guerras civiles entre las tribus y etnias, pero ya estamos focalizados en el desarrollo de nuestro recurso y capital humano, y las áreas de las ingenierías es una de las más fuertes".

Por ello, generar profesionales que sepan administrar y tratar el agua para el consumo humano y otros fines necesarios, como la producción de alimentos, es fundamental: "El recurso hídrico es uno de nuestros mayores potenciales económicos. Hay mucha necesidad de que Angola tenga la capacidad humana para poder hacer gestión de los recursos".